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Aprieto los dedos de mi mano con ansiedad mientras me preparo para hablar con Jack. El nerviosismo y la inseguridad es una de mis peores cualidades y por ende alejo los momentos que crean estas sensaciones en mí, pero desde que llegué a la escuela y vi a Jackson sentado en una de las bancas en el jardín, no pensé en nada mas solo en salir corriendo para hablar con él y eso fue exactamente lo que hice, pero al llegar a él, la inseguridad me embarcó, pensado que quizás Jack no querría hablar conmigo y preferiría mantenerse alejado de mí. Tal vez venir hacia él no fue la decisión más correcta, así que antes que se dé la vuelta y me vea, doblo tratando de desaparecer de su vista. Aunque ya es demasiado tarde.
- ¿Nancy? - cuestiona y me devuelvo con una pequeña sonrisa.
-Hola-murmuro pasando mi peso de un pie a otro.
- ¿Cómo has estado? – pregunta
-Bien ¿y tú?
-Bien- masculla demasiado serio para mi gusto y no sé cómo tomármelo.
-Anoche fui a buscarte a casa de Lilian, pero no estabas- me siento a su lado, en la banca.
El suspira.
-Sí, tuve que salir con urgencia- me mira – Lamento no decírtelo.
-No, tranquilo. - sonrío – Alex estaba, así que charlé un poco con él y me entretuve.
Una verdad a medias en realidad
Él alza una ceja.
- ¿Alex?
-Sí, es mi mejor amigo, va en nuestra misma clase- me encojo de hombros
No responde, solo se queda sumido en sus pensamientos.
- ¿Pasa algo? - pregunto luego de unos minutos de silencio total.
-No, solo tuve un mal fin de semana- espeta- Pero ahora que te veo, me empiezo a sentir mejor- sonríe.
Me sorprende la facilidad con que cambia de humor.
-Me alegra que pueda ayudarte- mascullo con las mejillas encendidas y una sonrisita baja
Jack toma de mi mano y le da un tierno beso. Y puedo jurar que me derretí por dentro
-Siempre eres de gran ayuda Nans- me toca la mejilla- Mi humor siempre mejora cada que te veo.
No pude responder. No cuando todo pensamiento coherente escapó de mi mente.
- ¿Sabes? Tú me recuerdas al mar.
- ¿Por el azul de mis ojos? – inquiero
-En parte sí, pero a lo que me refiero, es que el Mar es hermoso, infinito, da tranquilidad a tu mete y calma a tu corazón, pero también puede ser peligroso. Tú me recuerdas a eso.
- ¿Infinito? -frunzo el ceño sin entender a qué se refiere con ese término y Jackson ríe.
-Si Nans, infinito. La bondad y la nobleza que hay aquí- apunta con su dedo anular el lugar donde se aloja mi corazón – Es infinita.
Sonrío
-Eso fue hermoso, Jack- me sonrojo.
-Tu eres hermosa.
-También crees que soy peligrosa- apunto.
-No es que crea. Dije que podrías llegar a ser peligrosa- corrige- Tu belleza y tu inteligencia pueden ser armas letales, capaz de acabar con absolutamente todo Nans.
No comento nada al respecto.
-Nancy, sé que llevamos poco tiempo conociéndonos y que prácticamente no sabemos nada del otro, pero en tan poco tiempo te has logrado meter en mi corazón sin poder evitarlo- toma mi mano y la aprieta- Me gustas Nancy - mi corazón da un salto con tal confesión. - En verdad me gustas.
Mi mente no para de crear oraciones sin sentido y mi boca no puede formular pregunta alguna. Solo me limito a sonreír abiertamente, dando a entender con esto que me gusto tal confesión.
El ambiente se torna tenso entre ambos, mirándonos sin saber muy bien como continuar. Mi vista involuntariamente se dirige hacia sus labios y la piel erizada de mi cuerpo me confirma saber lo que me provocan. Sus labios son carnosos y rosáceos promoviendo el deseo que crece en mi por querer probarlos. Obligo a mis ojos dejar de mirar la boca de Jack y alzo la vista encontrándolo mirando fijamente mis ojos y que hasta este punto los suyos se han vuelto más oscuros.
Jack se acerca lentamente hacia mí y sin previo aviso me toma de la mejilla acercando sus labios a los míos y mi pulso se dispara. Mi corazón galopa queriendo salir de mi pecho.
El rose de los labios de Jack junto a los míos me pone frenética. Un escalofrió desciende de mi cuello hasta mi columna, el beso es suave y dulce. Los labios de Jack se mueven en sincronía con los míos haciendo el momento una completa maravilla. Sus labios son suaves y sensuales, el ritmo de nuestros labios se acelera haciéndonos respirar cada vez más rápido, el beso se vuelve un tanto salvaje y deseoso haciendo llevar mis manos hacia las mejillas de Jack queriendo atraparlo. Nos apartamos por falta de aire. Los labios de Jack están hinchados de manera que de la mima forma deben estar los míos a causa de la fricción de nuestros labios. Sus pupilas están dilatadas dejando ver sus ojos aún más hermosos.
-Sé que no nos conocemos demasiado y sé que este beso fue muy precipitado de mi parte. Así que no quiero que te sientas presionada- abrí la boca para alegar, pero él alza una de sus manos haciéndome callar- Por eso te pido que nos conozcamos, tengamos citas como cualquiera pareja normal y que nos enamoremos sin trampas ni presiones. Si en algún momento no quieres seguir con esto, ya sea porque te guste otra persona o porque crees que no podrías llegar a enamorarte de mí, solo me lo explicas y ya. No pasara nada e igual seguiremos siendo amigos y eso también aplica para mí, aunque claro ya yo tengo claro mis sentimientos hacia a ti y créeme hare lo imposible para hacer que te enamores de mí. así que ¿Qué me dices? ¿aceptas?
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Editado: 10.02.2022