Capitulo 17: En lo mas alto

EN LO MAS ALTO

<¿Cuánto tiempo ha pasado? Solo espero que la palabra de mis antepasados sea cierta, que en un futuro no muy lejano alguien vendría a salvarme> Piensa la débil voz de una mujer en medio de miles y miles de libros, una biblioteca que a simple vista es infinita.

En medio de todos esos libros regados, había una pequeña niña de pelo largo, una mirada gris perdida entre miles de libros.

"En lo mas alto de la torre se encuentra el piso 1000, quienes los mas antiguos llaman, la biblioteca eterna, que contiene una vida propia y que en su interior, guarda a alguien que por generaciones se dedica a leer esos libros" Narra una voz muy interesante de un hombre mientras se alejaban de ese centro de atención.

"O eso es lo que cuentan las leyendas, realmente nadie sabe, los únicos que tienen acceso a todas esas salas son los reyes y los príncipes y se dice que al fondo de todo se encuentra la gema que recibe toda la fe que concentra y que mantiene atrapado el poder del gran dragón de la ira" Cuenta otra voz, de un hombre.

Eran dos chicos que se encontraban junto a una fuente narrando historias.

A la izquierda, un chico de gafas, pelo largo y puntiagudo hasta el hombro de color negro y ojos de color naranja, mientras se levanta las gafas con un pequeño tick, y a su lado un hombre un poco mas alto también con gafas, ojos verdes y pelo de melena de color azul, mientras se peina.

"Mamá, míralos están hablando solos" Señala una niña desde lejos y su madre le cubre los ojos y se los lleva.

"Ya chicos dejen de intentarlo, en inútil" Pide una chica algo desinteresada, ella se encontraba sentada a un lado de los dos chicos.

Ella era de pelo negro por fuera y algo tintado de azul en sus bordes y punta de su pelo, miraba con desinterés y aburrimiento con sus fríos ojos amarillos a sus recién pintadas uñas de color azul oscuro.

"Si no te interesa estar aquí Eken lárgate, debemos conseguir dinero de alguna forma" Responde el chico de pelo azul algo ofendido guardando su peine y llevando una de sus manos al pecho.

"Así es, es lo difícil de ser estudiantes de un hombre que a duras penas le dan ganas de despertarse" Se queja el otro chico sentando al bode de la fuente soltando un suspiro cansado.

"Hay mas formas de ganar dinero, contar historias es una forma vaga y mas en un día en el que casi no hay gente transitando" Agrega Eken levantándose del borde de la fuente y mira de reojo a sus dos compañeros.

"Durante el ataque destruimos un par de lugares durante la pelea y ahora debemos conseguir dinero para arreglar eso lugares, el poco transito de gente no importa" Gruñe el chico de pelo negro.

"Déjalo Thas, vayamos a trabajar afuera" Propone el chico de pelo azul mirando a los dos chicos.

"Es que me da pereza" Aclara Thas cerrando los ojos lamentándose.

No muy lejos del lugar, Kael se encontraba paseando por el lugar, cargando varias bolsas de compras.

<No puedo creer lo barato que son las cosas de aquí, o es que Yairo me dejo mucho dinero> Recuerda Kael cargando toda su bolsa de comida y algunas cosas de aseo personal.

"No tengo la menor idea de como cocinar pero me hare un banquete" Murmura Kael para si mismo dejando su timidez y mirando las bolsas con agua en la boca.

"Jallo Kael, no esperaba verte por aquí" Saluda una voz que hace estremecer y le pone la piel de gallina a Kael.

"Cuanto tiempo, solo fue una noche y te extrañe cosita adorable" Saluda la voz de Arie, quien aparece en el lugar.

Kael se da la vuelta y logra ver a Arie, ella estaba muy vendada y se veía cansada.

"Eres tu... te ves peor de lo que recordaba ayer" Nota Kael algo incomodo escondiendo sus compras y da varios pasos atrás evitando que Arie se acerque mas.

"Tuve una pequeña pelea durante la invasión, pero estoy viva, no tienes que preocuparte" Aclara Arie forzando una pequeña sonrisa.

"¿Hm? No te ves bien, aunque no es algo que realmente me importe" Reacciona Kael al ver la sonrisa falsa en el rostro de Arie.

"No se que me pasa, desde el ataque me siento vacía, debería estar feliz... lo tengo todo, pero siento que algo no cuadra y todo desde que vi a mi hermano" Cuenta Arie desviando la mirada al piso.

"¿Qué es lo que exactamente sientes que pasa?" Pregunta Kael algo confundido.

<Esto debe tener que ver con lo que causo Uma con su sacrificio> Analiza Kael, tensando su espalda y tragando algo de saliva.

"Siento como si él no debiera estar aquí, como que él no cuadra dentro de la historia" Agrega Arie jugando con sus dedos.

<No le puedo contar sobre lo que paso con Uma, sería un golpe muy duro para ella, ella tiene que descansar> Concluye Kael soltando un suspiro algo confundido.

"Aprovecha que lo tienes, aunque sientas eso, no quita el hecho de que esta vivo" Responde Kael dándole la espalda a Arie.

"El problema es que, no actúa como recuerdo, esta mas decaído, se la pasa en silencio, si lo entiendo, se la pasan juzgándolo de algo que no cometió" Narra Arie sintiéndose confundida, su sonrisa desaparece por unos segundos.

"¿De que lo juzgaron?" Pregunta Kael frunciendo ligeramente el ceño.

"Él no fue quien violo a la concubina y la enveneno, él que hizo eso fue Rosbal" Explica Arie agachando la cabeza.

<¿Fue él?> Recuerda Kael, recordando cuando se topo con Rosbal, su sonrisa era algo que parecía real, sus ojos se oscurecen y frunce el ceño, aprieta sus manos en un puño y tiembla con furia.

"Ya veo, eso es todo lo que necesito, espero que puedas mejor con tu hermano" Se despide Kael, pero cuando se voltea y camina un poco, por andar en su propio mundo choca contra Thas.

"Auch, oye mira por donde caminas" Gruñe el otro chico cayendo al piso y sacude su cabeza.

"Tu también discúlpate" Ordena Eken, la chica y él otro chico llegaron al lugar.

"Si, lo siento señor, ¿esta bien?" Pregunta Thas sobándose la cabeza y cuando abre los ojos ve a Kael sin prestarle atención y solo ve a Kael algo rojo mirando a todo lado buscando en donde esconderse.