Sombras de Neón. (volumen 1)

Capítulo 9: El Nuevo Orden y la Semilla de la Luz.

​I. El Centro Clandestino.
El almacén abandonado, convertido en clínica clandestina, se había convertido en el cuartel general temporal de la resistencia. El Dr. Kael, un hombre de mediana edad con implantes médicos en sus manos, trabajaba sin descanso para estabilizar a Aura.
​Ramsés se mantenía vigilante, su plasma-caster cargado, mientras observaba a Nix monitorear la red. La hacker estaba en el centro de una tormenta digital, coordinando la resistencia y filtrando los archivos de Corporación Sol al dominio público.
​«El despertar es un éxito», informó Nix, sus ojos rojos e inyectados por el agotamiento. «Millones de nanobots de control se han desactivado. Los purificados están regresando a sus hogares, confundidos pero libres. La policía de Neo-Sevilla está desorganizada. El vacío de poder es total.»
​II. La Fragilidad de la Diosa.
Ramsés se acercó a la camilla de Aura. Ella seguía inconsciente, rodeada de monitores que registraban su actividad neural. El Dr. Kael se secó el sudor de la frente.
​«Su cuerpo físico se está recuperando», explicó el Dr. Kael. «Pero su mente... es otra historia. La explosión psíquica que lanzó para destruir a Aldrich y a los drones fue inmensa. Ha abierto un canal psíquico que su cuerpo aún no puede manejar. Ella es el amplificador, Ramsés. Y la sobrecarga casi la destruye. Solo el pulso de 'despertar' de Nix, que se canalizó a través de ella, evitó el colapso total.»
​«¿Sobrevivirá?», preguntó Ramsés, su voz áspera.
​«Sí. Pero no podemos moverla. Necesita tiempo. Y paz. La conciencia de la Diosa Sol... es la llave para la nueva era de Neo-Sevilla», respondió el médico con seriedad.
​III. El Caos de la Superficie.
En el exterior, la liberación había desencadenado el caos. Grupos de ciudadanos, recién liberados de la purificación, se unían a la resistencia de la Zona Roja, asaltando los puestos de Corporación Sol. Pero el orden social se desmoronaba.
​«Están surgiendo nuevas facciones», advirtió Nix. «La mafia de la Zona Roja está intentando tomar el control del tráfico de energía. Los políticos que estaban bajo el yugo de Aldrich buscan desesperadamente restablecer la ley y el orden... a su manera.»
​Nix miró a Ramsés. «Necesitamos una voz. Alguien que represente la esperanza de la gente. El Fantasma te eligió. Aura te nombró. El pueblo te necesita, Cazador.»
​IV. El Primer Paso del Liderazgo.
Ramsés miró a la Giralda a través de una ventana. Ya no sentía la necesidad de huir, solo la de proteger. La mención de "nuestro Rafa" resonaba en su alma, un ancla emocional que Aura había forjado antes de caer.
​«La Torre Sol debe ser un símbolo. No de poder, sino de rendición», dijo Ramsés con una nueva autoridad. «Nix, ¿puedes reactivar los sistemas de comunicación de la Torre Triana sin ser detectada?»
​«Sí. Pero es un riesgo. Tendrían acceso a nuestra frecuencia si no tengo cuidado.»
​«Entonces hazlo. Voy a transmitir un mensaje. A toda Neo-Sevilla. El pueblo necesita saber que su opresor ha caído, y que la libertad no es caos, sino justicia.»
​Ramsés se preparó. El cazador había muerto en el túnel con El Fantasma. Había nacido un líder, un protector, un símbolo de la resistencia. El futuro de Neo-Sevilla descansaba en sus manos.

.
​V. El Mensaje de la Torre.
Ramsés se posicionó en el centro de la sala de comunicaciones de la Torre Sol (Torre Triana). Nix, con la mirada fija en el datapad, había reactivado el sistema. Los ojos de Ramsés se clavaron en la vasta extensión de Neo-Sevilla que se veía a través del cristal. Era el momento.
​«Señal establecida. Retransmitiendo a todas las frecuencias de la Corporación, todos los canales de comunicación de Neo-Sevilla», informó Nix.
​Ramsés respiró hondo. La voz del Cazador, antes un arma, ahora sería una promesa.
​«¡HABITANTES DE NEO-SEVILLA!», la voz de Ramsés resonó por toda la ciudad, amplificada por los sistemas de la Torre. Los hologramas publicitarios de Corporación Sol parpadearon, reemplazados por la imagen de Ramsés, su rostro serio pero lleno de convicción. «VUESTRO TIRANO HA CAÍDO. VUESTRAS MENTES SON VUESTRAS OTRA VEZ. ¡SOIS LIBRES!»
​VI. La Semilla de la Luz.
El mensaje de Ramsés resonó en cada rincón de Neo-Sevilla. En las calles, la gente alzó la mirada hacia las pantallas, una mezcla de asombro y esperanza en sus rostros. Los purificados, ahora liberados, lloraban de confusión y alivio.
​«No habrá más purificación», continuó Ramsés. «No habrá más esclavitud mental. La Corporación Sol ha caído. Pero este es solo el comienzo. La libertad no es un regalo, es una responsabilidad. Y ahora, es vuestra responsabilidad construir un nuevo futuro.»
​En el centro médico clandestino, el Dr. Kael observaba la transmisión, una sonrisa de satisfacción en sus labios. Miró a Aura, que aún yacía inconsciente. Una lágrima resbaló por su mejilla. Aura había sido la chispa, el catalizador de este despertar.
​«El Fantasma murió para darnos esto. Aura sacrificó su conciencia. No los olvidéis», dijo Ramsés, su voz teñida de la pena por sus camaradas caídos. «La luz de un nuevo amanecer ha llegado a Neo-Sevilla. No dejéis que las sombras regresen.»
​VII. El Nuevo Líder y el Vacío de Poder.
El mensaje de Ramsés terminó. La imagen de la Giralda, limpia y majestuosa, sin la sombra de la Torre Sol, apareció en las pantallas, un símbolo de la historia recuperada.
​Nix se acercó a Ramsés. «El mensaje ha sido recibido. Pero el caos continúa. Las facciones están luchando por el control. El vacío de poder es peligroso, Cazador.»
​Ramsés asintió. Sabía que su batalla no había terminado. Era solo el principio. El pueblo de Neo-Sevilla, aunque libre, necesitaría guía.
​«Entonces tendremos que llenar ese vacío», dijo Ramsés. «Con justicia. Con equidad. Con la verdad.». VIII. El Epílogo de un Comienzo.
Días después, Neo-Sevilla era una ciudad en transición. La Torre Sol, ahora vacía y silente, era un recordatorio de la tiranía caída. La Giralda, por contraste, brillaba bajo el sol, símbolo de la resistencia.
​Aura permanecía en el centro médico clandestino. Su cuerpo se recuperaba lentamente, pero su mente seguía en un profundo estado de meditación. El Dr. Kael confiaba en su recuperación. Aura no solo había despertado; se había convertido en la semilla de una nueva conciencia, una guardiana psíquica para Neo-Sevilla.
​Ramsés, con Nix a su lado, había comenzado la ardua tarea de reconstrucción. La resistencia de la Zona Roja se había unido bajo su liderazgo. El ex-cazador de Corporación Sol se había convertido en el protector de Neo-Sevilla, el líder de un nuevo consejo, trabajando para establecer un nuevo orden.
​La ciudad de Neo-Sevilla,, se había liberado. Pero la historia de la libertad, y las sombras que acechan, nunca termina. Este era solo el primer volumen.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.