Capítulo 37: La Larga Noche del Alma.

Mientras Eldric intentaba alcanzar a Lilianne, el templo continuaba su colapso. El suelo se hundía bajo sus pies, y la oscuridad parecía tomar forma, rodeándolos con una neblina densa y amenazante. Las figuras de sombras de su pasado se alzaban a su alrededor, pero Lilianne solo podía ver el rostro de la maga oscura que había sido. Su antigua vida estaba tan presente en su mente que comenzó a difuminarse con la realidad, y la batalla interna se intensificaba.

—No puedo retroceder. —dijo Lilianne, su voz firme, pero rota por el dolor. —Este es el precio de mi venganza.

Eldric se acercó aún más, con deseo de salvarla, pero en ese momento, Lilianne levantó la mano, canalizando un torrente de magia oscura hacia él. El poder que había desatado la cegó por completo, y su mente quedó atrapada entre el deseo de venganza y el remordimiento.

Con un grito de desesperación, Eldric conjuró su última defensa, protegiéndose del ataque mientras la oscuridad lo rodeaba. Lilianne, al ver la magia de Eldric interceptando su hechizo, comenzó a dudar. El amor y la lealtad que él le había mostrado, incluso en medio de la oscuridad, comenzaban a desgarrar su alma.