Sombras del Pasado

25

Asher.

El alivio me invadió cuando descubrimos la ubicación de Nyx, Dave le había pagado a una persona con contactos para saber dónde se encontraba y por suerte, funcionó. Aunque nos tardamos un poco más buscando su paradero por el bosque, ya que no había nadie en la cabaña.

Ordené qué llevarán a Melissa lejos, para interrogarla y que desapareciera de nuestra vista. Porque ella había sido quien causó el accidente de auto, en las cámaras de seguridad se pudo ver a alguien cerca a mi camioneta, modificando los frenos.

Lo que no me esperaba era la noticia de su embarazo.

Si, quería tener más hijos con ella y la noticia en ese momento me hizo sentir una emoción especial, solo que no era el momento que los dos hubiéramos querido para saber la noticia.

Callie, qué se había quedado con Kate después del accidente, seguro se alegraría por saber que tendrá un hermanito o hermanita. Porque ambos iban a estar bien.

Sentí un nudo en el estómago cuando tuve que dejar a Nyx sola, con los médicos, y esperé afuera.

Pasó bastante tiempo, miraba el reloj en mi celular cada momento, hasta que recibí una llamada de Kate.

—¿Papi? —la voz de Callie se escuchó a través de la llamada.

—Princesa... —hablé, intentando que las palabras no suenen entrecortadas—, ¿ocurre algo? ¿Estás bien?

—Si. ¿Cuándo volverás? Te extraño y a mami.

—Ocurrieron unas cosas, pequeña, pero pronto estaremos de vuelta. La tía Kate te cuidará muy bien, como siempre.

—Ella es muuuy buena —su dulce voz me hace sonreír.

—Así es. Nos vemos pronto princesa, duerme temprano.

Ella se despidió de mi y la llamada acabó.

La espera me estaba matando, y aunque intentaba mantener la calma, mi mente no dejaba de dar vueltas.

Por lo menos hablar con mi hija me ayudó a que el tiempo pasara más rápido, porque minutos más tarde, la doctora salió, y su expresión parecía tensa.

—Señor Harper —dijo la doctora, y la seriedad en su voz me hizo temblar—, hemos realizado todos los procedimientos necesarios. Debido a la caída y al tiempo tan corto de gestación, había un riesgo significativo para el bebé. Sin embargo, tratamos de hacer todo lo posible para protegerlo...

Mis ojos se llenaron de lágrimas mientras asimilaba sus palabras. ¿Significaba qué el bebé había...?

—¿Cómo está nuestro hijo entonces? —pregunté con voz temblorosa.

—La cirugía fue un éxito, y el bebé está estable por ahora.

Un suspiro de alivio escapó de mis labios y sonreí, esperando que todo salga bien.

—Estamos observando su desarrollo de cerca. Pero tendrá que quedarse más tiempo en el hospital para poder vigilarlos, en caso de que sufra un aborto en cualquier momento. Aunque el embarazo esta en una etapa temprana, es necesario tener cuidado con el estrés y las caídas.

Nyx estaba siendo observada de cerca, y después de que me dejaron entrar a la habitación, yo no me separé de su lado.

///

Nyx.

El bebé estaba bien, nuestro hijo seguía con vida. Una carga que llevaba por esa preocupación pareció desvanecerse en cuanto me lo informaron.

Asher nunca se había separado de mi lado desde que llegamos al hospital y eso ayudaba. Pero había estado completamente ajena sobre mi embarazo, mientras él salió brevemente de la habitación para hablar con los médicos, decidí aprovechar ese tiempo a solas para procesar todo lo que sucedía.

Me quedé en la cama, acariciando mi vientre con un mano, mientras miraba la ventana, observando el paisaje exterior. La vista era hermosa, aunque mis ojos se llenaron de lágrimas mientras pensaba en lo que hubiera pasado si no hubiéramos llegado al hospital a tiempo.

¿Cómo había sido tan ciega y no darme cuenta que estaba embarazada?

Empecé a sentir culpa, mis manos temblaban mientras mis lágrimas caían silenciosamente. Me sentía como si hubiera fallado en proteger a nuestro bebé.

Los recuerdos del accidente, la caída por el barranco, y las lesiones que podría haber causado a nuestro hijo vinieron a mi mente.

Cuando Asher regresó a la habitación, me encontró llorando, y se preocupó, viniendo hacia mi.

—Nyx, cariño, ¿Qué sucede? —susurró Asher con voz suave.

Me aferré a él con fuerza, como si temiera que desapareciera si lo soltaba.

—Esto... Todo es mi culpa.
No supe que estaba embarazada, soy una idiota. No protegí a nuestro bebé y por eso, casi lo perdemos.

Él me acunó con ternura, sus manos acariciando mi cabello mientras me calmaba.

—Nyx, no puedes culparte por no saber. El pequeño no mostraba señales, eso es todo. Nuestro bebé está estable ahora, y eso es lo que importa.

Pero no podía dejar de sentir la misma culpa. Había sido mi cuerpo el que llevaba a nuestro hijo, y debería haberme dado cuenta de mi embarazo antes.

—Puse en peligro a nuestro bebé de esa manera.

Asher se apartó un poco para mirarme a los ojos, intenté apartar la vista, pero él no me lo permitió.

—Nyx, escúchame. No permitiré que te culpes de esa manera. El hecho de que no te diste cuenta no significa que pusieras en peligro a nuestro bebé.

—¿Qué tipo de madre no se da cuenta de que está embarazada?

—La clase de madre que ha pasado por un accidente, y que ha enfrentado un tipo de peligro. No te menosprecies, Nyx. Eres una gran madre, nunca haz descuidado a Callie, y se que nunca fue tu intención que esto pasara con el bebé.

Él tomó mi rostro entre sus manos, su pulgar secando con ternura las lágrimas que caían por mis mejillas.

—No todas las experiencias son iguales, Nyx. No hay un manual para ser madre, y cada embarazo es diferente. Has pasado por momentos difíciles, y es comprensible que algunas señales hayan pasado desapercibidas. Lo importante ahora es que nuestro bebé está bien. Concéntrate en recuperarte y volveremos lo más pronto a casa.

Asher me abrazó con fuerza, sus brazos me daban consuelo. Y si, tal vez debía calmarme, esperando que estuviera bien lo más pronto posible.




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