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Nyx.

La casa estaba rodeada y yo no tenía la menor idea de por qué.

Como todos los días, iba a ir a dejar a Callie al jardín infantil, para después ir a trabajar, pero una de las empleadas que hacía el aseo en la casa de Asher, me informó que una oleada de reporteros estaba en la puerta.

—El señor Asher me dijo que llegaría pronto, podrá preguntarle a él lo que sucede.

Asentí, y miré por la ventana, sin abrir mucho la cortina para que los reporteros no pudieran verme.

Carajo, ¿Asher había hecho algo?

No, no. Si fuera así, él ya me lo hubiera contado.

La puerta del garaje se abrió y pude ver a Asher saliendo de su auto, rodeado de reporteros que le lanzaban preguntas. Estaba serio, pero sus ojos encontraron los míos a través del cristal. En ese momento, supe que algo estaba mal.

Corrí hacia la puerta, pero antes de que pudiera salir, Asher ya estaba dentro. Su expresión era tensa, llevaba su habitual traje oscuro y se quitó la corbata como si le estuviera faltando el oxígeno.

—¿Qué está pasando? —pregunté, tratando de contenerme para no gritar.

Asher cerró la puerta detrás de él y suspiró.

—Nyx, necesitamos hablar.

Lo seguí hasta la sala, ignorando los murmullos y preguntas de los periodistas afuera.

—Llama a Dave y haz que se comunique con mi hermana y a mi padre, que no digan ni una palabra al respecto —le ordenó a la misma empleada de antes—, o serán las presas de los periodistas.

—Si, señor.

La empleada asintió rápidamente y se retiró para realizar la llamada, dejándonos a solas en la sala. Asher se pasó una mano por el cabello, visiblemente agotado.

—Esto es un desastre —murmuró—, la noticia sobre lo que hizo mi madre se ha difundido. Se suponía que esto debía salir bien y al principio, así fue, pero ahora quieren hablar contigo para saber tu opinión de la historia. Los reporteros están aquí por eso.

—La noticia ha salido en todos lados. No solo eso, la comunidad la está condenando por sus acciones.

—¿Y cómo vamos a manejar esto? ¿Qué pasará con nosotros?

—Primero, necesitamos proteger nuestra privacidad y a nuestra familia. No quiero que salgas de la casa por hoy, ni Callie. Entre menos te expongas a los medios públicos, será más seguro.

En las siguientes horas, Asher estuvo en su despacho, y yo miré las noticias en donde la atención mediática se enfocó principalmente en la madre de Asher, cuyas acciones fueron detalladas en titulares impactantes. Los medios resaltaron la traición y las acciones en contra de su hijo, dejando en claro que la responsabilidad recaía en ella, no en la familia en su conjunto.

Los comentarios y las críticas se dirigían mayoritariamente hacia la madre de Asher, su reputación estaba por el piso ahora.

"¿De verdad una madre puede hacerle eso a su hijo

y a sus propios nietos? Que asco que existan personas así. "

Fue el primer comentario que leí, de miles y todos expresaban lo mismo.

"Debería estar en prisión, es una arpía"

"Me siento mal por la esposa de su hijo, no debería pasar por esto estando embarazada."

Mientras que otros comentarios, simplemente apoyaban lo que había hecho.

"Uno siempre sabe qué es lo mejor para sus hijos, es un instinto de madre"

Y la discusión por internet seguía.

"Está mal de la cabeza señora, el instinto de madre no significa que debamos lastimar a alguien por ello. Medíquese."

La madre de Asher pasó de ser una figura respetada a convertirse en el centro de la controversia y la condena pública en redes.

Toda la comunidad se dividía en distintas opiniones, decidí desconectar temporalmente de las redes sociales, todo era muy tóxico.

Pronto, Asher salió de su despacho con una expresión seria. Había estado lidiando con llamadas de abogados y manejando la situación de la mejor manera posible.

—Las cosas están en marcha para protegernos legalmente. Se han emitido declaraciones oficiales desvinculando a nuestra familia de las acciones de mi madre. Los abogados están trabajando para asegurar que se tomen medidas adecuadas. No puedo prometer que la reputación de mi madre estará bien, pero la tuya, la de mi padre, mi hermana y la mía, si lo estarán.

Asentí y guardé mi celular en el bolsillo de mi pantalón. Tenía a Asher cerca de mí, me llevaba más de veinte centímetros de diferencia en la estatura, por lo que vio cuando mi pantalla se iluminó con las revistas y noticias digitales.

—No deberías leer esos comentarios en línea, Nyx. La gente habla sin conocer toda la verdad.

—No hablan de mí... Más hablan sobre tu madre y sé que ella fue la que hizo todo esto, pero... ¿no es complicado para ti?

—Claro que es complicado. Es mi madre, Nyx. A pesar de todo lo que ha hecho, sigue siendo parte de mi vida. Pero no puedo permitir que esto destruya nuestra familia.

Con temor de que no quisiera ningún tipo de contacto físico en este momento, me acerqué más a él, estando lo suficientemente cerca como para pasar mis brazos alrededor de su cintura y abrazarlo, me relajé cuando él me devolvió el abrazo con fuerza, rodeándome con sus brazos con ternura.

—Esto no es justo para ti.

—Tampoco lo es para ti, Asher. Tienes que pensar en ti mismo también, y... no estás solo, me tienes a mí.

—Y eso es suficiente.

///

Todo estaba tranquilo cuando Asher y yo entramos al consultorio del ginecólogo de la mano. La sala de espera estaba casi vacía. Asher estaba tenso, como cada vez que veníamos para saber algo sobre mi embarazo.

—¿Cómo te sientes hoy? —preguntó él, sin apartar la vista de mi vientre.

—La respuesta es la misma que las veces anteriores que me preguntaste en el auto, estoy bien. Las nauseas se están yendo, por fin —le dije, sonriendo.

Asher asintió, intentando relajarse mientras esperábamos a ser llamados. Sus dedos jugueteaban ligeramente con los míos, hasta que fuimos llamados al consultorio del ginecólogo.