Somnoria-El Orbe De Los SueÑos

Capítulo 5: La Montaña de los Sueños

Tras la unión de los Orbes y la revelación de su próximo destino, Elisa y sus compañeros se dirigieron hacia la Montaña de los Sueños, una cumbre que se alzaba en el horizonte como una promesa. La montaña, cubierta de nieve eterna y coronada por las nubes, era el lugar más sagrado de Somnoria, donde se decía que los sueños de los dioses se entrelazaban con los de los mortales.

La ascensión no fue fácil. El camino estaba plagado de pruebas que desafiaban no solo su fuerza física sino también su voluntad. Criaturas hechas de pesadillas y dudas intentaron desviarlos de su camino, pero la determinación de Elisa y la unión de sus amigos superaron cada obstáculo.

Kley, con su espada mágica, cortaba a través de la oscuridad que se cernía sobre ellos. Rosel, con su magia estelar, iluminaba el camino cuando la noche caía. Theodor, con sus canciones, mantenía viva la esperanza en sus corazones, y Frost, con su instinto y fuerza, los guiaba por las rutas más seguras.

Finalmente, llegaron a la cima de la Montaña de los Sueños. Allí, un altar antiguo esperaba, tallado en la misma roca de la montaña y adornado con símbolos que hablaban de un tiempo antes de que la memoria fuera memoria.

Elisa, sosteniendo ambos Orbes, se acercó al altar. Sabía que este era el momento para el cual había sido elegida. Colocó los Orbes en dos cavidades que parecían hechas a su medida, y el mundo contuvo el aliento.

Una luz dorada emanó de los Orbes, envolviendo a Elisa y a sus compañeros en un resplandor cálido. Las visiones de sueños y pesadillas se entrelazaron, mostrando un futuro posible para Somnoria, uno lleno de paz y armonía, pero también uno donde la oscuridad podía consumir todo.

Elisa comprendió entonces que el equilibrio entre la luz y la oscuridad era esencial. Los sueños no podían existir sin las pesadillas, así como la esperanza no tenía sentido sin el miedo. Era su responsabilidad mantener ese equilibrio.

Con una decisión firme en su corazón, fusionó los Orbes en uno solo, aceptando la carga de ser la guardiana de ese equilibrio. El Orbe unificado brilló con una luz nueva, una que no era ni completamente luminosa ni totalmente oscura, sino perfectamente equilibrada.

LaMontaña de los Sueños respondió. La nieve alrededor del altar se fundió,revelando un jardín de flores que brotaban al instante, cada una representandoun sueño  cumplido. La risa de los dioses resonó en el aire, y Somnoria se llenó de una magia renovada.

Elisa y sus amigos descendieron de la montaña, no como simples aventureros, sino como héroes que habían restaurado la esencia de su mundo y aunque sabían que su viaje juntos había llegado a su fin, también sabían que las historias de sus hazañas apenas comenzaban a tejerse en el tapiz de Somnoria.

 

continuara....

continuara

 



#1775 en Fantasía
#317 en Magia

En el texto hay: fantasia, profecias, magiayamistad

Editado: 23.04.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.