Somnus

I N C O N S C I E N C I A

Lain se inclinó a la altura de Shira y palmeó su hombro, mientras que continuaba sollozando.

—¿Qué hay de nuestra familia?— Shira llevó la mirada hacia Asher quien mantenía una mirada indiferente— ¿Fue todo una mentira?, ¿todos estos años?

Pero Asher no emitió respuesta alguna.

—¿Desde qué me pediste que jugara contigo cuando nos vimos la primera vez en el refugio?

Asher soltó un suspiro.

—¡Respóndeme!— exigió.

Asher rascó su cabeza con irritación.

—Bien, lo siento, ¿contenta?

Shira largo una risita irónica.

—¿Lo sientes?, ¿realmente lo sientes?

—Si eso es lo que quieres oír, entonces si, lo siento.

Shira retomó su postura y se acercó hacia él.

—¿Realmente eres el Asesino de Cera?

Asher observó a Shira con molestia.

—¿Quieres que te detalle sus asesinatos?

—¿Cómo has podido asesinar a todas esas personas?

—En mi defensa, no todos los asesinatos fueron cometidos por mí.

Shira llevó la mirada hacia Lain con desentendimiento.

—¿Qué quiere decir?

—Voy a explicártelo luego, ¿de acuerdo?

—¿Por qué?, ¿aún te resulta difícil aceptar que tu mejor amigo es un asesino?— provocó Asher.

—¿De qué está hablando, Boyle?, ¿a quién se refiere?

—Oh, me estoy refiriendo a Callen, quien, de paso, fue de gran ayuda— respondió con desinterés.

—¡Cállate!— pidió Lain con molestia.

—¿Callen?, ¿el agente Tous?

—Voy a explicártelo luego, Shira, por favor, prometo explicarte todo, solo, no ahora, ¿de acuerdo?

—Las cosas como son, Lain. Es un maldito asesino.

Lain se acercó hacia él y lo tomó de su uniforme.

—¡Tú lo has convertido en uno!, ¡nadie más que tú es responsable de todo lo que ocurrió!

Asher negó con la cabeza.

—Ya había matado a alguien antes de conocerme, por lo que ya era un asesino y se dio el lujo de olvidarlo. ¿Yo?, simplemente le devolví sus recuerdos.

Shira salió de la habitación con las lágrimas cayendo por su rostro y Lain fue tras ella.

—No puedes irte así, Shira.

—Déjame sola, Boyle.

Ambos llegaron hacia el exterior de la estación.

—Dijimos que íbamos a sacar a la luz la identidad del asesino e íbamos a hacer caer a todos los involucrados.

Shira se giró hacia Lain con molestia.

—Bien, ¿que hay de Callen entonces?, ¿es verdad lo que dijo?— interrogó con irascibilidad.

Lain rascó su cabeza con molestia.

—Callen— pronunció con dificultad— El está enfermo.

—¿Está enfermo?, ¿y por eso asesino personas?

—¡No es así, Shira!

—Entonces, ¿cómo es, Lain?

—Velo por ti misma— respondió con calma— Está siendo transferido a la prisión local de Beazley.

Shira asintió con aflicción para seguidamente girarse y salir de la estación.

Lain volvió de regreso a la estación y se adentró en la sala de interrogación para sentarse frente a Asher.

—Comenzaremos con el interrogatorio— informó Lain.

Tomó la carpeta y ubicó los perfiles de las personas asesinadas frente a él.

—¿Has matado a todas estas personas?

Asher negó con la cabeza.

—No a todas.

—Señala a las que has asesinado.

Asher le dio una rápida mirada a los perfiles para seguidamente señalar los perfiles de Liv Gatius, Ashey Chay, Lua Basil, Zinei Fezon y Basin Fezon.

—¿Qué hay del resto?

—Sabes que esos fueron obras de Callen, a excepción de Jayden Bassinas y Bayl Fezon.

—Ailan los salvó.

—Si, puede realmente irritable.

—Si, es lo mismo que dijo Cam, pero a diferencia de Cam y tú, él no es un asesino.

—No puedo negarlo.

Lain se silenció momentáneamente.

—Tú también— esbozó Lain con aflicción— ¿Cuánto has sufrido como para llegar a cometer todos esos asesinatos y haber usado a Callen de esa manera aun sabiendo lo que estaba sufriendo?

Asher lo observó con desentendimiento.

—¿Yo?— y seguidamente formo una sonrisa divertida— Yo no soy como Callen, por el contrario, tuve una buena vida. Los señores Klein cuidaron realmente muy bien de mí, al igual que Shira, honestamente no puedo quejarme, han sido la familia que cualquiera podría desear.

—Entonces...¿por qué?

—Ya te lo dije, Lain, porque es divertido, incluso ahora mismo, estoy realmente divirtiéndome— Asher se recostó sobre la silla con una gran sonrisa— Incluso cuando observaban las fotos de las escenas, no sabes lo que me contuve para no soltar una carcajada.

Lain asintió en respuesta.

—Bien, has confesado los crímenes de Liv Gatius, Ashey Chay, Lua Basil, Zinei Fezon y Basin Fezon.

...

Una semana después...

—Les pedimos que se pongan de pie para recibir al señor Juez— pidió la secretaria de la sala.

Y todos los presentes se pusieron de pie a la espera de la llegada del mismo.

El hombre ingresa a la habitación y toma asiento frente a los presentes.

—Tomen asiento, por favor.

Y los presentes nuevamente tomaron asiento.

—Damos por comenzado el juicio en contra de Callen Tous— informó el juez que llevaría a cabo la sesión.

Callen se encontraba sentado a un lado en conjunto con el abogado designado, mientras que en la primera fila del público, se encontraban, los padres de Callen, Lain, Leah, Athan, Shira y Blaise.

—Como parte defensora tenemos al abogado, Brail Banch. Como fiscal de la causa, tenemos a Gail Tilve y en representación del jurado implicado, Carel Walid. Dando comienzo a esta sesión amparada por la ley nº 9231— y el sonido del martillo resonó en cada rincón del lugar— Le concedo la palabra al fiscal de la causa, Gail Tilve.

El fiscal se paró frente a los presentes.

—Señor Juez, al acusado Callen Tous, se lo imputa por el homicidio de Deo Prunes, el día treinta de julio del año dos mil tres, incentivar el suicidio de Keelan Alou el día diecisiete de octubre del año dos mil seis, el homicidio de Neil Bonzo, el día diez de marzo del dos mil veintidós, Dorek Oset, Argus Llop y Arlet Ros, el día veinte de marzo del año dos mil veintidós, sumando un total de seis homicidios. El homicidio de Deo Prunes, fue disfrazado de suicidio, mientras que los asesinatos de Neil Bonzo y Arlet Ros fueron producidas por herida de arma blanca ubicada en el pulmón izquierdo acompañada de hemorragia tanto interna como externa, conforme quedo acreditado en las pruebas que se detallaran a continuación, las víctimas intentaron defenderse, sin embargo fueron atacadas sin piedad.




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