Capitulo 1

—¿Como crees que deba decírselo? A mi se me ocurrió esto "oye Mía en realidad no me gustas y nunca lo harás, estoy enamorado de otra persona, no de ti. Sólo fuiste una distracción".

—Por eso las chicas te adoran, Christopher —le digo a mi amigo con el sarcasmo oyéndose a kilómetros de distancia.

—Ya te he dicho que no me llames por mi segúndo nombre Grace.

Gruño al escuchar cómo me llama. Es mi segundo nombre. Lo odio. Al nombre, no a Jake.

—Mas te vale que no me vuelvas a llamar así si no quieres terminar como la última vez.

—L-lo siento —dice tartamudeando.

—Eso creí —digo acompañado de una risa malvada—. Me encanta tener poder sobre ti. Lo sabes, ¿no?

Flashback

Estábamos en el sillón doble de mi casa mirando una película de terror. Justo cuando aparece el monstruo saliendo de la televisión, Jake grito como una niña y me abrazó tapándose los ojos con mi hombro. Puse pausa a la película y lo mire preocupada.

—Jake, ¿quieres que vayamos por bocadillos? No entiendo por qué quisiste ver esta película y no una comedia romántica como yo propuse.

—Es que eso es muy gay. Además creí que lo soportaría, Grace.

—¿Cómo me llamaste? —digo amenazante acercándome a él.

—Emm e-este... Quise decir...

Rápidamente lo tome del brazo y le hice una llave.

—Como vuelvas a llamarme así tú castigo será peor.

Tome unas sogas que mi hermano, Liam, utiliza para atar sus instrumentos en la parte de atrás de su camioneta, e hice un nudo en sus sus manos y pies. Luego lo até a una silla frente a la televisión y puse la película desde el comienzo. Lo sé soy malvada, pero se lo merece.

Me limpio el sudor del rostro con una toalla. No me lo puso fácil. Lucho  cómo si le fuera la vida en eso. Y cuando lo ate de pies y manos, se sacudía como pez fuera del agua.

Me senté en el comedor a comer galletas mientras oía los gritos de Jake.

Fin flashback

—Créeme que lo sé. Eres mala. Aún tengo pesadillas por esa maldita película.

—¡Ey! Te desate dos horas más tarde, cuando podría haberte dejado toda la noche ahí.

—¡Dos horas después la película había terminado!

—De todas formas lo merecías.

—Ya, no importa. Cambiando de tema, ¿qué harás esta noche?

—La verdad, no lo sé. Pero no quiero quedarme en mi casa.

—Ven a mi casa. Llamaremos a Nick, pedimos una pizza, helado y veremos alguna película.

—Buen plan. Iré. ¿Qué película veremos?

—Estaba pensando en...

Justo en ese momento suena la campana. Se terminó el receso.

—Luego te llamo y te digo. Vamos, te acompaño a tu clase.

Caminamos hasta mi salón riéndonos y charlando de cosas triviales.

(***)
 

Historia. Odio esa materia. Ni si quiera sé si es verdad lo que se supone que pasó. Es difícil resolver un crimen, pero pueden resolver la historia de miles de años.

—El director les dará un anuncio, dejen lo que estaban haciendo y escuchen.

—Muchas gracias profesora. Alumnos, en un mes se hará el Baile de Otoño, organizado por los estudiantes del último año. Se elegirán a un rey y una reina. Estos serán elegidos mediante votación. Tienen dos semanas para votar a los candidatos. El ganador se elegirá el día del baile. Eso es todo. Buenas tardes.

Luego de eso, sale del salón. 
Genial. Otro baile, otro concurso para reina, otra vez le subirán el ego a Jessica Whalberg. Si es que eso es posible.

Al fin suena la campana. Ya me estaba hartando de escuchar a la vieja esa hablar como si estuviera sonámbula. En serio, cuando habla, perece que lo hace dormida. Guardo mis cosas para salir, pero alguien me detiene antes.

—Oye Kent. Trata de no estorbarme, ¿si? Yo ganaré ese concurso, otra vez —y hablando de zorras...

—Wow. No recuerdo haber visto a una perra ganar la corona de la reina. Pero si creer eso te hace feliz, puedes hacerlo.

—¿Cómo me dijiste?

Ups. Creo que veo humo saliendo de sus orejas. Esto va por muy mal camino. Me gusta.

—¿No oíste? No tengo problema con repetir lo que acabo de de...

No puedo terminar mi frase ya que siento cómo su mano impacta en mi mejilla.

—Oh, créeme, no quisiste hacer eso.

Su cara de furia cambio a una de preocupación y dos segundos después a una de seguridad.

—Sí, lo hice.

La furia me consume. Cierro mi puño con fuerza y golpeo su preciado rostro de muñeca. Cae al suelo y no tardo en ponerme sobre ella golpeando su rostro con mi mano abierta. Quiero que le duela, no desfigurarla. Trata de defenderse con sus manos paro la esquivo, aunque siento algunos rasguños en mi rostro. Justo cuando iba a darle un golpe, siento su rodilla impactar en mi costilla, y unos brazos fuertes tomarme por la cintura separándome de Jessica.

N/A:
Quiero aclararles que cualquier comentario realizado sobre la sexualidad, puntos de vista, o lo que sea, es sin ánimo de ofender.