Son tus hijos, lo juro

03 Raíza busca ayuda

Después de salir de la oficina donde estaban reunidos para tratar los acuerdos del divorcio, Raíza detuvo el proceso de divorcio mientras pensaba bien lo que estaba ocurriendo y se fue directamente a casa de Fabiola, la esposa de su hermano

- No puedo creer lo que me estás diciendo. ¿Me juras que tus hijos son de él? – dijo Fabiola

- ¡Por supuesto! ¿Cómo te atreves a preguntarme eso? – Raíza se levantó para irse

- Tranquila Raíza, necesitaba ver tu reacción para poder describírsela a tu hermano, él sabe leer las expresiones de las personas, lo que lo hace bastante insoportable, ya lo conoces.

- Tienes razón, disculpa – decía mientras se volvía a sentar – es que no sé qué hacer, ssos análisis mienten, pero supuestamente son exactos, no entiendo – se soltó a llorar

- ¡Roberto! ¡Roberto! ¡Ven a acá un momento!

- ¿Qué haces Fabiola? No quiero que mi hermano se enfade con mi esposo, sabes cómo es él – decía entre sollozos, no podía parar de llorar

- A ver, ¿dónde está la cucaracha que debo matar ahora? Fabiola ¿Por qué mi hermana llora? ¿Les pasó algo a mis padres? – dijo Roberto

- No se ha muerto nadie, insensible idiota, como ya sabes tu hermana se está divorciando y fue su esposo quién metió la demanda argumentando que él había sido infiel y vino junto a nosotros buscando algo de apoyo.

- Fabiola, sabes muy bien que jamás me meto en esas cosas, quiero mucho a mi hermana, pero si ella no pidió mi ayuda es porque no la necesita y mi cuñado debe estar diciendo la verdad. No es el primer caso de divorcio por infidelidad cometida por el esposo y lo expresa en la corte.

- ¿No se te ocurrió investigar nada? ¿Para qué eres detective en la policía? – dijo Fabiola

- Te repito, es un problema de mi hermana y mi cuñado. No te oculto que me parece muy raro por parte de mi cuñado, siempre ha sido muy romántico con ella, la trata como si fuera la primera vez que la conoce, lo que es típico de los hombres con una amante fija que aman a su mujer, Mi cuñado no es de ese tipo de casos de amantes

- ¿Cómo que no es el caso? ¡Estas describiendo a mi esposo con toda claridad! ¡Canalla! Mi propio hermano es cómplice de Freddy, no lo puedo creer – espetó Raíza

- Cálmate hermanita, te aseguro que Freddy te ha sido fiel siempre, me conoces bien y cuándo vi su comportamiento, mis agentes lo siguieron durante un buen tiempo y te aseguro que no tienen ninguna amante. Sólo tiene buenos amigos, donde incluso uno es uno de mis agentes y él no lo sabe. Además, mi cuñado es como un perro, fiel a mi hermana, incluso en todo este tiempo que han estado separado le ha sido fiel y te si te soy sincero, tiene un aguante envidiable.

- ¡Estúpido! ¡Insensible! – gritó Fabiola – el problema es que Freddy descubrió que tus sobrinos no son hijos de él, ya le pregunté a tu hermana si le había sido infiel y le leí su rostro como me has enseñado para que no fueras con ella lo brusco que eres en tu trabajo y dice la verdad, no le ha sido infiel.

- ¡De acuerdo mujer! ¿Por qué él asegura que no son sus hijos?

- Se realizó un examen de ADN y resultó que no es el padre de los niños – dijo Fabiola

- Tuvo que tener una razón para hacerlo, eso no es algo que se le ocurre a alguien por casualidad. ¿Le diste motivos para sospechar que le eras infiel? ¿Dijiste el nombre de otro nombre mientras hacías el amor? ¿Te escuchó hablando con alguien y te sorprendiste?

- ¡Por Dios, Roberto! Deja lo cerdo para tu trabajo – dijo Fabiola

- Lo siento Fabiola, pero necesito esas respuestas. Para hacerse un examen de ADN tiene que haber una sospecha poderosa

- No es ninguna de esas razones – dijo Raíza – Freddy fue a una clase de biología de Junior dónde realizaron prueba de ADN que se compran en farmacias y resultó que Freddy no es el padre de Junior. Freddy le restó importancia, pero como Junior se puso a llorar, fue a un laboratorio confiable y se hizo las pruebas con los niños para calmarlo. Ahí fue donde le confirmaron que no eran sus hijos, pero Freddy se encargó que a los niños se les diera un papel sin valor legal para que se quedaran tranquilos y fue allí cuando se fue de la casa sin explicarme nada

- ¿Eso es todo? ¿Esa es la razón del divorcio? – Roberto soltó una carcajada descomunal

- ¿Cómo que sí eso es todo? ¿Te causa gracia lo que estoy sufriendo? – espetó Raíza indignada

- Hay un dicho que dice "La ignorancia es la felicidad" pero en este caso no lo es. Hazme un favor, no permitas que avance el divorcio, pues siempre he tenido la costumbre de investigarte, sabes, antes de ser policía, y sé que sólo ves por los ojos de tus hijos y de mi cuñado, tranquila y no sé cómo, pero esos son hijos de ustedes

- ¡Desgraciado! ¿A mí también me vigilas, cerdo? ¡Está noche duermes en el sofá! – gritó Fabiola

- No será la primera ni última vez – dijo Roberto con arrogancia



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En el texto hay: familia rota, divorcio, examen adn

Editado: 27.05.2018

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