El cielo luce gris, como llorando
Y las marcas negras que aparecen en él, son las mismas que en mi alma
Siento que en cualquier momento se romperá en un estallido de caos
Y la preocupación me invade, no por mi, si no por los que me rodean
Temo herirlos porque el caos que se genera en mi interior, es tan incontenible como mi deseo de libertad
Libertad que jamás tendré
Pues vivo preso de mis pensamientos y atado a las cadenas de mis delirios
Intento escapar pero es una cárcel que yo mismo he tallado
Y no entiendo el porqué
El porqué de mi estancia en este deleznable lugar
En el que yo mismo me encerré
reprimiendo todo
todo sentimiento, toda acción, toda pasión que alguna vez sentí ahora ya no me provoca nada
tengo dentro de mí un vacío voraz que consume todo,
todo lo que pienso y siento
Tengo pensamientos fugaces de mi libertad
Pero no son nada más que falsos recuerdos creados por mi para aliviar mi agonía
Una agonía que me acompañará siempre
aún si salgo de aquí