En la UPE Sor Juana se dirigió a la sala de conferencias, allí buscó una buena ubicación, donde pudiera apuntar bien.
- ¡CAMARADAS! –empezó Aníbal- Gracias a los avances en la automatización ya no es necesario trabajar...
Sor Juana sacó la escopeta del habito, le apuntó a Aníbal y disparó. Aníbal cayó al piso. Los asistentes a la conferencia, al comprender lo ocurrido, despellejaron viva a Sor Juana.
- ¿Está bien señor? –preguntó uno de los escoltas de Aníbal.
- Si, si –respondió Aníbal.
- La escopeta no pudo atravesar el blindaje –exclamó otro escolta.