Los preparativos
La fundación organizó talleres para dar la bienvenida al bebé. Los niños crearon tarjetas, dibujos y regalos, cada uno con su toque personal. Rachel, conmovida, comprendió que la sorpresa es un regalo de la vida, a menudo preparado por otros sin que lo sepamos. “Es justo como dijo Pierre Dac: ‘Me encantan las sorpresas y yo mismo las creo’”, murmuró sonriendo.