-Vete a tu habitación ¡servidumbre! dijo Lucy
-Lucy yo soy…
- ¿Qué no escuchaste? ¡Largo! me interrumpes! -dijo con un voz enojada y llena de ira.
No, ella no es la Lucy que conozco
- ¿Interrumpir? -dije mirando la pequeña flor que comenzaba a brotar, ella se dio cuenta y dijo
- ¡Esto no es de tu incumbencia servidumbre!
-No me iré hasta que me escuches Lucy ¿Acaso no me recuerdas? tú y yo siempre hemos estado juntas cuando eras una niña yo…yo… -no me podían salir las palabras por el nudo en la garganta que sentía.
- ¿He? ¡yo jamás te he visto en mi vida! ¡y si lo hice no me importa! ¡NO SÉ QUIÉN ERES! ¡Me largo de aquí!
Tan solo oír esas palabras me hicieron sentir como si hubieran roto mi la garganta y sentía un hueco en mi pecho, otra vez ese sentir recorrió me rostro.
¿Como era que se llamaba a esto?
¡ah! Sí…
recordé las palabras del “controlador de sueños”
yo estoy llorando
No podía parar de hacerlo. Me fui a mi habitación y me recosté en la cama y sentí como una luz aclaraba la habitación, miré el cielo oscuro, era una luz redonda y plateada la que aclaraba la habitación, sentía como mis ojos se comenzaban a serrar poco a poco, hasta que otra vez todo estaba oscuro.
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-Así que lloras otra vez…-decía una voz, era la misma voz que escuche en ese lugar extraño
¿acaso estaba…?
Abrí los ojos rápido y me levante enseguida, aunque eso hizo que me dé vueltas la cabeza. Sentí que mis ojos giraban como dos espirales.
-Tranquila no hay necesidad de apuro después de todo el tiempo de aquí no es igual que el tiempo humano -cuando dijo eso pude ver con más claridad al ser que estaba hablándome y no era el mismo de aquella ocasión se veía como una persona.
Una persona muy hermosa
- ¿Quién eres? ¿Eres humano? -dije
-Yo soy un ser mágico de este lugar, me encargo de cuidarlo y también cuido los sueños de los niños del mundo exterior.
- ¿Por qué…?
- ¿Qué?
- ¿Por qué te vez como una persona?
-Ya te dije que poseo magia y puedo aparentar muchas formas, como el ave del aquel entonces y como una persona como la que estás viendo justo ahora -dijo y lo mire sorprendida él tenía el aspecto de un hombre joven un poco más alto que yo, cabello rizado y castaño, piel clara, ojos verdosos, y una mirada aunque era amable ocultaba tristeza al igual que Lucy.
- ¿Tú eres el que me trajo aquí y el que me envió donde Lucy?
-Correcto
-Explícame ¿Porque tengo esta apariencia como la de una mujer humana? ¡Yo solo soy una muñeca de trapo!
-Para que puedas vivir-dijo el joven de ojos verdes
- ¿Vivir? -pregunte confundida
-En este lugar no solo llegan los sueños y pesadillas que desean olvidar las personas si no también las cosas que olvidan como por ejemplo tú. Te lo mostrare mira.
Mire asía donde se dirigía su mirada y vi a muchos juguetes flotando en este cielo extraño, cada uno de ellos parecía hablar, pero al escuchar bien eran lamentos y llantos, decían;
¡por qué! si yo siempre estuve a tu lado ¡porque me olvidaste!
Los solitarios juguetes soltaron lágrimas y al poco rato cada uno de ellos iban desapareciendo como pequeñas estrellas uniéndose a las que estaban arriba en el cielo y nuevos colores se formaban en ella
¿era así como debería haber desaparecido?
yo…también he sido olvidada
Recordé lo que Lucy me dijo en el jardín de flores
- ¿Por qué a mí? de entre todos ellos ¿qué esperas que yo haga?
-Ya te lo dije. Porque eres especial, esa es la razón. Tú me dijiste que querías ver sonreír a Lucy ¿acaso ese no era tu deseo? es por eso que te envié de vuelta a ese mundo, aunque no al mismo tiempo ya que el tiempo aquí avanza diferente, sin embrago solo tienes un tiempo límite para cumplir tu deseo, si no lo haces acabaras como esos juguetes y no volverás a ver a Lucy.
- ¿Y cuándo lo haga que sucederá conmigo?
-Si lo logras te quedaras con ella en ese mundo, podrás vivir a su lado como un ser humano más, pero no puedes contarle sobre este lugar a nadie si lo haces no podrás regresar nunca y desaparecerás, como esos juguetes.
- ¿Que ganas haciendo todo esto? -pregunte
-no gano nada solo… estoy cumpliendo una promesa.
- ¿Promesa?...
-Eso no es de tu incumbencia -Su voz parecía un poco diferente como si estuviera ligueramente enojado, pero solo ligueramente.
-Entonces ¿cuánto es mi tiempo límite?
-Un año, si no lo logras en un año te convertirás en estrellas para este cielo.
-un año...
-El tiempo se está acabando tienes que despertar -dijo y vi como mi cuerpo comenzaba a brillar y a desaparecer poco a poco.
- ¿Despertar? ¿Acaso no estoy ya despierta?
-Tu alma está aquí pero tu cuerpo todavía duerme.
- ¡Espera no quiero despertar! ¡Aún tengo muchas cosas que preguntarte “controlador de sueños”! ¡Aun no! -sin hacer caso a mis palabras se acercó a mi rostro y luego a mi oído diciendo en voz suave;
-No me llamo así, mi nombre es ….
Cuando lo dijo enseguida desperté en el mundo de Lucy. La mañana era muy brillante, me sentí con un poco de miedo por este mundo que, aunque ya había estado en el parecía desconocido, pero ahora tenía una meta por lograr; que Lucy volviera a sonreír. La idea hacía que mi cuerpo se sintiera lleno de vida pero a la vez mi pecho se sentía cálido cuando recordé la suave voz del joven de ojos verdes diciendo su nombre cerca de mi oído.
NOTAS DEL AUTOR
Persona desconocida: ¿la meta es hacer sonreir a esa niña malcriada? ¡eso es facil!
Autor: Aver intertalo pues (se crusa de brazos y muestra una mirada afilada)