Samantha
Han pasado unas tres semanas y en ese tiempo mi barriga creció, no es una barriga de 7 meses pero creció a lo cual se me hizo demasiado raro por qué en un embarazo normal la barriga empieza a crecer a las 12 o 16 semanas y yo apenas tengo 4 semanas, pero mi embarazo no es normal así que es lo que hay.
Me encuentro en la sala de estar esperando a Andrew por que iremos a revisar que todo esté llendo bien con este bichito.
–Perdón por tardar bonita pero es que hay mucho trabajo.
–No pasa nada, vamos.
Empezamos a caminar hacia la salida donde ya nos espera un automóvil para llevarnos a nuestra destino, Andrew habré la puerta dejándome subir antes que él, la cierra tras él cundo está completamente dentro del auto.
El recorrido al hospital de la manada es silencio pues Andrew se lo pasa en su laptop todo el camino checando cosas de la manada, cundo llegamos bajamos y nos dirigimos al lugar correspondiente. No es la primera vez que venimos así que ya sabemos cuál es el camino.
–Alfa, Luna—. Hace una reverencia ante nosotros, yo le dedico una sonrisa y Andrew un asentimiento de cabeza—. Creo que ya sabe cuál es el procedimiento Luna.
Y si, está en lo correcto, me dirijo a la cama que está en la pequeña estancia y me recuesto ahí, subo mi sudadera hasta donde inician mis pechos y el doctor o más bien doctora, por qué Andrew no quiso que un hombre me viera así lo cual es ridículo por qué faltan unos meses para el parto; la doctora me echa el gel que utilizan para ver a los bebés en los ultrasonidos y empieza a mover el aparato sobre mi barriga.
–Como pueden ver aqui está su manita está en una posición demasiado bien para las semanas que lleva, aquí puedo ver qué para su siguiente cita que es en unas cuatro semanas ya podrán escuchar los primeros latidos de su corazón.
–¿No es demasiado pronto? Apenas tiene 4 semanas.
–Sam acuérdate que nuestros embarazos no son como los que tú conoces, para una persona común y corriente tiene que esperar 9 meses nosotros solo esperamos 6 meses y los cachorros salen completos.
–Asi es Luna. Se podría decir que su bebé nacería al rededor de las semanas 26-27 de un embarazo normal, lo que en un embarazo de nosotros serían las semanas 36-40. Si se preocupa que su bebé salga con algo deforme o con algún retraso, no se preocupen es totalmente normal.
Asiento no muy convencida desde que soy una niña a mí me han enseñado que los bebé nacen a los 9 meses u 8 meses si son prematuro, pero aquí es totalmente diferente. Salimos del hospital después de programar la siguiente cita en 4 semanas.
Cundo llegamos a casa Andrew se despide de mi con un beso en la frente y sale casi corriendo a su oficina, muestras yo me tomo mi tiempo hasta llegar a la cocina justo a la nevera.
–Luna—. Dicen todas las muchachas del servicio al verme entrar a la cocina– ¿Que se le ofrece?
–Vine por algo de la nevera, no quería molestar así que vine.
Asienten todas al mismo tiempo, me dirijo a la nevera y agarró el helado de chocolate y la mostaza voy por un tazón y lo sirvo justo, es un antojo muy raro lo sé pero últimamente a este bebé le dan ganas de comer eso.
Salgo de la cocina con las miradas de las muchachas del servicio sobre mi, lo sé chicas es un antojo muy raro pero no es mi culpa es culpa del bichito.
[Es demasiado raro Sam, a mí me daría asco]. dice Alaska con un tono de disgusto en su voz.
{Deja en paz los antojos de cachorro laska}.
[Es que es demasiado raro ese niño, lo saco de su papá yo lo sé por qué tú y yo somos demasiado cool]. Ríos ante eso. Me da demasiada risa que a laska no le agrade del todo Andrew y su lo lobo lo cual me da más risa por qué Eyolf a echo lo posible por gustarle a laska.
{No seas grosera laska}.
[No seas grosera laska, dios se parecen demasiado tu y Andrew Eyolf me dijo que... Mierda]. Yo
{La grandiosa Alaska a esa hablando con su "enemigo", ya admite que lo amas}.
[!No lo amo Iuhg! Solo hemos platicado ¿Si? Al final de cuentas lo tendré que soportar por una vida así que me voy acostumbrando]. Está enamorada lo sé.
{Ajá claro}. Se hizo la indiganada y no me volvió a contestar y se supone que la inmadura soy yo.
Iba subiendo las escaleras a la segunda plata donde están las habitaciones cundo siento una energía muy fea, se siente muy pesada sobre. Siento que me observan así que volteos a todos lado pero no hay nada, no guardias al rededor, me dirijo a mi habitación con un mal sabor de boca.
(***)
Eh permanecido en mi habitación después de lo ocurrido fue demasiado extraño, no quiero decírselo a Andrew por qué se que se pondrá como loco y querrá triplicar la seguridad en la casa y la verdad no quiero eso a demás que tiene cosas más importantes que hacer sobre la manada y no me gustaría molestarlo.
Estoy tan sumida en mis pensamientos que no me doy cuenta que Andrew entro a la habitación hasta que me da un beso en la mejilla que hace que salte del susto a lo cual el ríe.
–¡No hagas eso Andrew! Me asustaste tonto.
–Tonto—. Lo repite con una sonrisa en su rostro—. Nunca me había dicho así pero no importa y no te quise asustar, te hablé cundo entre pero no me hiciste caso y pensé que estabas enojada conmigo.
–No estoy enojada es solo que... Estaba pensando.
–¿Y en qué pensaba esa cabeza bonita que tienes?
Ahora que digo.
–Ahm están pensando en... en lo que dijo la doctora que en la próxima cita escucharemos a nuestro bebé.
–¿Segura?—. Asiento con la cabeza, e una parte no estoy mintiendo, estoy nerviosa por escuchar a el bichito que hay aquí adentro—. Bueno... Ahora que me acuerdas yo también estoy muy emocionado al escucharlo, quiero que llegue con ansias ese día.
Se acuesta a un lado de mi agarrándome de mi cintura en el proceso y subiendo me a horcajadas sobre él, me acerco a su boca queriendo darle un beso cariñoso, pero el parece tiene otros planes ya que cundo estoy a punto de despegarme de su boca agarra mi nuca y me pega más a su boca.