ʜɪsᴛᴏʀɪᴀs ᴘᴀʀᴀ ᴄᴏɴᴛᴀʀ

BUSCA TALENTOS

Estaba en la calle a mitad de la madrugada, no pude evitar escuchar un par de chicos que peleaban y mencionaban el amor efímero que era uno de ellos. Sinceramente me quedé a ver que pasaba, quien se rendía o abandona primero, pensé que quizás lo haría ella, pero no. Admiro el valor que tuvo la chica para decirle que ella ya no quería nada, juro que hubiera escapado de esa situación, pero me dieron ganas de averiguar más. Quizás sea un especie de admirador secreto, o alguien simplemente entusiasmado en la vida de los demás, alguien que busca talentos.

A lo largo de los años supe mucho de esa chica, una escritora excelente, por lo que me llevó a preguntarme si mis colegas que viven al otro lado del mundo, eran capaces de reconocer lo bien que escribía y lo mucho que ofrecería, movi un par de contactos, supe que la hablaron y los dejo en duda, ¡Que agallas!. Una oportunidad así, una propuesta increíble, fue puesta en duda, tenía que saber porqué y todo me llevó a un chico de ojos café, el de la madrugada de hace tantismos años. Vi que se encontraron, estaban sumamente incómodos y más porque él tenía una hija, escuché casi toda su conversación y me fui pensando en lo imbecil que era él por invitarla a su casa, a comer con su mujer, como si le echara en cara la vida que la chica hubiera tenido de no haber desechado de cierto modo ese amor de casi no se cuanto tiempo, solo se que termino hace veinte años, lo recuerdo porque esa madrugada que los vi, había terminado también con mi prometida y yo era, según ella, el desinteresado. 

Era casi la noche, volvi a mi casa, me recosté en el sillón blanco y descuidado que tenía en la cocina, me dormí y solo recuerdo que sonó mi alarma tantas veces como fue posible, porque sabía que tenía que seguir a la escritora y ver como terminaría esa cena. La vi salir de su casa con el mismo vestido rojo y un gran saco negro, que recuerdo que lo llevaba puesto el día que pelearon, tengo una gran memoria. Llegó a la casa, entró y no supe más nada hasta las tres de la madrugada, cuando ella salió, en el umbral de la puerta los tres la despedían como una familia feliz, y ahí me di cuenta de que mi ex prometida había formado una familia, pero no tenía que afectarm eso todaví, en cuanto a la mujer del vestido rojo se le notaba en la cara de la chica que estaba sumamente nerviosa por las miradas que tenía en su espalda, tal vez en su rostro había enojo, ira o quizas tristeza, es confuso. Vi que el que cerró la puerta fue él y vi su cara de decepción desde mi auto, ni siquiera se ofreció a llevarla.

Su casa estaba a unas cinco cuadras, ella estaba sola y yo la iba siguiendo, me iba asegurar de que nada le pasara, pero alguien venía detras, eran un tipo con un cuchillo en la mano, ella seguía caminando como perdida, me baje del auto me puse detrás de ella sin que me reconociera, logre que el tipo se fuera corriendo, con mi reloj, mi billetera y un par de cortadas en los brazos, me volvi a subir al auto, me llevaba como dos cuadras de distancia, no se había percatado de la situación, de todas formas era un alivio. Llegó bien a su casa por suerte.

Esa noche llamé una vez más a mis amigos y me dijeron que había aceptado, que había hablado con la coordinadora del equipo y le había parecido una buena idea ir. Algo le hizo cambiar de opinión en esa cena y realmente no se que fue. En la mañana preparé mis cosas, me iba a presentar a ella, como el desconocido que soy, fui al aeropuerto temprano, ella no llegaba y pense por un momento que no se iba a ir. Pero lo vi a él, el de los ojos café, esperando en un auto, mirando su celular varias veces, nervioso, él la iba a buscar. Al pasar unas horas la vi entrar por la puerta de atrás, estaba pérdida con las indicaciones y se le cayeron las cosas de su bolso y la ayudé, le comencé hablar de la  nada, quizas fue raro pero me atrajeron sus ojos profundamente negros y una sonrisa radiante, me contó más de lo que quería saber, le conté quien era y lo mucho que me costó llegar a ese vuelo para reencontrarme con mis amigos. 

Por algún motivo él no apareció, quizas se arrepintió, pero de lo que estoy seguro es de haberme enamorado de ella, llevamos mucho tiempo juntos desde que llegamos a este lugar, es genial, hacemos un gran equipo con mis amigos y ella, somos criticos, escritores de grandes periodicos, libros, revistas, siete coordinadores que son los que arreglan viajes, hay una variedad, somos revolucionarios y buscamos a personas, ese es una de las cosas que más me dedico hacer, pero ella no sabe que la investigué, no sabe que llevó casi veinte años con el equipo viendo su trabajo y como creció, ella solo escribe, aunque de cierto modo creo que ella lo presiente, creo que ella sabe que estuve ahí o quizas no. 

 



#22849 en Otros

En el texto hay: amor, historiascortas, historiasdetodo

Editado: 26.10.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.