Hailey.
—Esto es suficiente, llamaré a Rae —gritó Andrew entrando al departamento junto a los demás.
—¿En qué ayudará tu exnovia a que Jordan nos deje en paz? —preguntó Richard.
La idea de que Andrew llamara a una de sus exnovias más famosas, no me hacía sentir para nada bien, pero supongo que tenía buenas razones para hacerlo. Sacó su celular y comenzó a buscar entre sus contactos.
—Rae, ¿estás ocupada? ¿Podrías venir al departamento? —hizo una pausa— Sí, aquí están todos los chicos —me miró— y las chicas.
Mientras Andrew seguía hablando por teléfono, pude darme cuenta que Ben estaba en la mesa con una expresión no muy alegre en su rostro. Me acerqué y me senté frente a él.
—¿Estás bien? —era obvio que no.
—Cada día desconozco más a Jordan. Ya no es el mismo. Recuerdo cuando solíamos ser mejores amigos y salíamos por ahí en la noche a asustar niños.
Reí y él hizo lo mismo. Ben era definitivamente, el más sensible de la banda y sé que el tema de Jordan aún le afecta. No debe ser fácil sentirse traicionado.
Volteé a ver a Andrew, quien guardó su celular un poco más relajado y se sentó en el sofá junto a James. Sus ojos de pronto se cruzaron con la míos y él sonrió desviando su mirada al suelo. Sin darme cuenta, yo estaba haciendo lo mismo.
No podía deducir qué era exactamente lo que sucedía con los chicos, pero era obvio que no era algo muy positivo.
—¿Vendrá Rae? —le pregunté a Andrew aún desde la mesa.
—No tarda en llegar —respondió él algo nervioso.
Después de algunos minutos preguntándome a mí misma para qué Andrew la había citado aquí, llamaron a la puerta y él abrió de inmediato. Por la puerta entró la súper modelo, luciendo espectacular, como siempre. Su cabello castaño caía por su espalda y sus grandes ojos verdes observaban a Andrew.
—Lamento la tardanza, chicos —habló ella abrazando a Andrew.
Algo me decía que a pesar de que ella ahora salía con Alfred, me haría sentir unos celos terribles.
Editado: 18.11.2018