#20

El silencio dentro del auto es desbordante, nadie habla, ni mucho menos intercambia miradas, todos nos manteníamos en una misma posición y con la mirada puesta en una dirección, sin ninguna intención de iniciar una conversación, siendo yo la que menos ganas tenia de intentarlo.

—¿Usualmente no hablan durante los viajes? —Su madre parece darse cuenta de nuestra resistencia para hablar uno con el otro —¿O es que no les gusta? o ¿están molesto? —Deseo contestar esa ultima pregunta pero me detengo al recordar que a ninguno de los dos nos convenía ser honestos y mucho menos en estos momentos.

—Hablamos mucho.

—Me distrae —Ambos lo decimos al mismo tiempo, demostrando una vez mas, lo mal que nuestra relacion se encontraba hasta este punto.

Era claro que lo hacíamos mucho años atrás, pues era algo que me resultaba difícil de olvidar, pero que en estos momentos después de todo lo que había pasado entre nosotros, se había convertido en algo que muy rara la vez sucedería, si es que no era casi imposible de lograr sin terminar en pelea.

—Ya veo —Su madre no parece creernos en absoluto pero aun así actúa como si lo hiciera —El próximo mes estaremos celebrando el cumpleaños numero cincuenta de mi esposo, así que nos gustaría que tu y tu familia asistieran a la reunión —Me cuenta con emoción, la que me hace sonreír con un poco de envidia.

Hace años atrás mi mayor deseo es tener una familia tal y como los chicos en mi escuela solían tenerlo, una madre que me preparara el desayuno y que me apoyara en todo, un padre que me amara y me cuidara como su princesa y uno o mas hermanos con los que pudiera compartir momentos especiales con lo que pudiera pelear y contar con ellos cuando los necesitara.

Cosa que jamás pudo suceder y que ahora sabia con certeza que era lo ultimo que deseaba conseguir.

—Pueden venir los chicos con los que estabas hace rato —Me recuerda a los chicos con lo que intercambie un par de palabras antes de regresar —Se ven que todos te quieren mucho —Asiento porque se que en verdad ellos me quieren como nunca alguien lo ha hecho —No puedo esperar por conocer a tus padres de una vez por todas —Yo también quisiera hacerlo, después de todo jamás los había conocido en persona, solo por medio de fotografías que mi abuela se había encargado de enseñarme durante mi infancia.

Imágenes que en este momento eran tan borrosas como la voz de la abuela.

—Mama —Jungkook parece darse cuenta de la incomodidad que dicho tema despierta sobre mi, intentando detener a su madre, quien por mas que el pelinegro continua deteniéndola, parecía que ella no estaba dispuesta a dejar pasar el tema.

—No tengo familia —Dejo salir las palabras consiguiendo que un silencio por parte de ambos se instale dentro del auto —Mis padres no quisieron hacerse cargo de mi cuando nací, así que me dejaron con mi abuela materna con quien viví hasta los catorce años —Lo dejo salir de la forma mas normal posible a pesar de la mirada que no solo la madre del pelinegro me da, sino también la del pelinegro, quien parece sorprendido, cosa que no me sorprende siendo consiente de que jamás le había contado esto a nadie mas que a quien era mi hermana mayor y quien era la única que sabia toda la historia detrás.

—Pero, ¿no tienes una hermana? —Su madre pregunta sin poder salir de su asombro.

—La tengo —Asiento con alegría al recordar la manera en la que ella me había cuidado —Pero no es mi hermana de sangre —Recuerdo algo que hace mucho dejo de ser importante entre ambas —La conocí cuando recién había llegado a Seúl, así que ella no dudo en acogerme como parte de su familia y cuidarme —Omito partes esenciales de las que nunca me atrevería a contar, cosas que aunque no eran vergonzosas, eran difícil de digerir.

—Ya veo —Sus palabras parecen incomodas como si no se hubiera esperado algo como eso.

—¿Por qué nunca...? —La voz de Jungkook sueno en un susurro solo para que yo pueda escuchar pero lo interrumpo mucho antes de que termine de formular aquella pregunta que honestamente sabia que podría llegar a hacer.

—No hay problema si la llevo, ¿verdad? —Pregunto manteniendo una sonrisa sobre mi rostro, aparentado que este tema era uno de los mas triviales que alguien podía llegar a tener dentro de una conversación normal.

—Claro que no querida —Sonríe pero aun soy capaz de darme cuenta de la manera compasiva en la que me observa, algo me seguía resultando molesto —¿Tus padres murieron o...? —Parece pensarlo bastante antes de detenerse, cosa que consigue llamar la atencion de Jungkook, quien parece estar de mucho peor humor del que ya se encontraba.

—Mama —Lo dice en modo de advertencia intercambiando un par de miradas discretas con ella desde el espejo retrovisor que soy capaz de notar sin moverme ni un centímetro.

—¿Esta mal preguntar? —Cuestiona en busca de lo que parece ser una negativa por parte de ambos, cosa que ninguno de los dos se atreve a hacer, aun de la cierta incomodidad sobre el tema —¿Te incomoda el tema? —Se dirige a mi y aunque me gustaría asentir de inmediato, niego con rapidez para no ser descortés con ella —Ves Jungkook no hay nada de malo en mi pregunta —Le hace saber al pelinegro que le da una mirada de total desacuerdo.

—Mama, por favor no insistas —Vuelve a repetir a pesar de conocer perfectamente lo curiosa que podía llegar a ser su madre.

—No esta bien —Las palabras salen por mi misma sin poder si quiera detenerlas —No están muertos, viven en diferentes paises con sus respectivas familias —Los recuerdos de la primera vez que los conocí son amargos y oscurecen mi humor demasiado, pero aun así me obligo a mi misma a seguir con un sonrisa sobre mi rostro.

—No debí de preguntar —Parece que se ha dado cuenta de la profundidad del asunto —Lo siento —Se disculpa y por una extraña razón una sensación de equivocación se instala sobre mi.

—No tiene porque disculparse —Soy honesta a pesar de lo incomoda que me ha hecho sentir, siento que ella es la ultima persona que debería de ofrecerme alguna disculpa —Son cosas sin importancias —Soy honesta con ellos, pues después de todo mi esfuerzo, mis lagrimas, mis ilusiones y desilusiones, todo ello había dejado de ser relevante en mi vida.