Tal parece que la noche no se prolongó lo suficiente, pues bostezaba cada cierto tiempo. Con el vaso en mano evaporando por el té contenido me dirigía hacia la puerta principal, en el recibidor, verifiqué que los artículos en mi bolso estuvieran completos y coloqué el calzado, solo sucedió un segundo antes de darme cuenta cuando el líquido se derramó por todo el suelo; después de tomar minutos para limpiar cogí el pequeño papel y salí.
En cuanto conseguí un lugar en el bus me dispuse a leer.
¿Have you ever fallen in love?
I do
Bien, esto ya era extraño, la primera tarjeta la pude pasar como equivocación pero entonces ¿qué significaba en esta ocasión?
─Seguro alguien está teniendo un buen rato con esta broma, pues dejemos se canse -pensaba-
Depositaba el escrito dentro de mi bolso, tomando mis auriculares para el resto del recorrido lo cual no era nada especial, muchos edificios, locales de conveniencia e infinidad de artículos de distintos tipos en venta.
Bajé un par de cuadras antes de la facultad, disfrutaba observando la arboleda que le rodeaba, el perfecto ejemplo de imagen visual que tranquilizaba mi mente, con la seguridad de que todo iría bien pues solo se trataría de un día normal, por supuesto, sin mencionar la extraña nota, mi ánimo iba de maravilla hasta que, sí, todo se trastornó.
Lo primero que sentí fue un brazo rodear mis hombros con la sorpresa giré rápidamente encontrándome con el borde de una chaqueta oscura, debía mirar más arriba si deseaba descubrir su rostro, pero justo en ese momento aumentó la fuerza en su agarre provocando que nuestra distancia disminuyera. Con tal cercanía conseguí apreciar un aroma fresco proveniente de él, segundos después me decía al oído
─Sólo sígueme ¿vale?
─Debes estar de broma, pero quien...
─¿Lo ven? Es mi chica y si no les importa agradecería nos dejaran tranquilos ¿entienden?-Decía para las chicas reunidas frente a nosotros-
─Pero nunca les hemos visto juntos eso... -Le reprochaban-
Lamentablemente no lo dejó pasar y antes de que continuaran con su argumento él, si bien no lo esperaba y tomando en cuenta que todo sucedió tan rápido mi capacidad de respuesta se vio afectada, no soy la mejor en reflejos, antes de poder decir o negar incluso de alejarme, se giró y plantó un beso muy cerca de mi boca, tres segundos después reaccioné y empujé tan fuerte contra su pecho que las palmas de mis manos terminaron adoloridas.
─¡Estás loco! ¡Que te crees! Eres un...
Me quedé en silencio cuando miré su expresión, si era un jugador lo normal sería que tuviera una sonrisa disimulada o bien sintiéndose el centro de atención estuviera molesto porque le rechacé y exhibí, pero en su lugar mantenía los ojos húmedos e irritados.
─Pero que...
─Lo sé he cometido un gran error pero por favor perdóname ¿es qué acaso planeas estar enfadada por siempre? Escucha yo te amo
─De qué diablos estás hablando yo no...
─Okay, de acuerdo, hablemos cuando estés tranquila, te veo más tarde
Fácil e ingeniosamente se deshacía de mí, daba media vuelta, me giñaba el ojo izquierdo y regresaba a su caminata dejando lo peor detrás. No fueron amables ni por poco, la charla o mejor dicho la orden fue:
"Alguien como tú no lo merece" "Aléjate, deja de pretender permanecer a su lado" "Solo le harás daño", entre otras cosas.
Esto lo iba a pagar, de eso estaba absolutamente segura, caminé hacia el tocador para asearme, arreglar mi ropa y cabello, las chicas en Corea se tomaban demasiado en serio el intimidar a otras, pero no funcionaba como deseaban en mi caso, jamás dejaba que me dijeran qué debía hacer o cómo comportarme, mis años de rebeldía servían de algo, las palabras no funcionaban en casos como este así que me ahorré la explicación.
─Esto está mal, ese maldito hijo de... -No me tranquilizaría hasta encontrar y obligarle a decir la verdad.
Toda la escena me retraso más de veinte minutos, tarde para mi primera asignatura pero ya no importaba estaba molesta solo esperaría por la siguiente hora, caminé por el corredor que conducía hasta la salida del edificio a partir de ahí aproximadamente a cinco minutos se encontraba una cafetería, algunos estudiantes se aglomeraban en el pequeño parque a un costado el cual dividía ambas facultades, pasaría por alto toda aquella multitud pero unas cuantas chicas en modo "Fan" captaron mi atención, un par de ellas las reconocía por lo ocurrido en la mañana. Estando segura me dirigí hasta ahí con la absoluta decisión de aclarar las cosas, me abrí paso entre las chicas, el enojo me invadía, sin esperarme a verlo, grité