16. Periodo de prueba.

El dicho popular estipula que con una buena charla cualquier tipo de malentendido se soluciona y si,  tenía que darle la razón a quien fuese que lo haya creado,  porque a pesar de que está conversación que tuvimos con Carter no borre del mapa a su prometida , hacía que la convivencia entre nosotros fuese un poco menos pesada , al menos no lo detestaba tanto y me brindaba cierta esperanza, la esperanza de que en algún momento y con las cartas a nuestro favor podríamos tener una chance si el hacía las cosas bien por lo pronto estaba a prueba.

“Wildest dreams” de Taylor sonaba en mis auriculares y nunca me había sentido tan identificada con algo mientras pasaba por el pasillo con los auriculares puestos.

Nothing lasts forever

But this is gonna take me down

He's so tall and handsome as hell

He's so bad, but he does it so well

I can see the end as it begins

Porque tenia que reconocerlo, esta historia tenia un punto de partida, el cual comenzo en esa condenada fiesta de Año Nuevo en la que nuestros caminos se cruzaron y uno de final, el cual puede ser dulce si él cumplia con su palabra o uno amargo si me demostraba que era como todos los hombres a los que habia conocido antes, aunque podia ser agridulce tambien, lo que no era para nada favorable porque eso significaria que habriamos quedado en un punto medio, en el que no habriamos ido ni para adelante ni para atrás, nos habriamos quedado estancados, probablemente con un corazón roto y esa sensación del “y si” quemandonos en nuestros pechos.

Say you'll remember me

Standing in a nice dress

Staring at the sunset, babe

Red lips and rosy cheeks

Say you'll see me again

Even if it's just in your wildest dreams

Okay, esta era mi parte favorita sin dudas, porque una parte de mi, esa que trataba de mantener amordazada en mi interior, rogaba y le pedia a las fuerzas del cielo que Carter no pudiera olvidarse de mi, ni de como me quedaba ese vestido negro que habia escogido ayer para nuestro encuentro, deseaba que soñara con él, que lo atormentara tanto como a mi lo hacia su recuerdo cuando estaba a solas.

La canción seguia reproduciendose mientras yo avanzaba por el pasillo, con  mí objetivo cargando su maletín y luciendo sumamente profesional a unos metros de mí, las miradas de las chicas me hacían sentir celosa. Y si, no podia no entenderlas, yo lo veía igual. 

“Deja de ser tan patetica”, me regaño una voz dentro de mi a la vez que me embargó un la lastima temiendome entre sus brazos, abrazandome, amenazando con no soltarme jamas.

 Afortunadamente para mi ese momento bochornoso no se extendio demasiado ya que alguien tiro de mi cable, obligandome a pararme en seco. 

Me giré sobre mis talones, lista para descargar mi bronca sobre el capullo que se habia tomado semejante atrevimiento, cuando descubri que se trataba de Sissi.

-Pido alto al fuego- bromeo al darse cuenta de cuanto me habia molestado su actuar- Vengo persiguiendote desde  la entrada- dijo tomando grandes bocanadas de aire- Y estoy segura de que despues de esto varios pensaran que esto loca- chasqueo su lengua- Da igual, estoy acostumbrada a ello, que le hace una raya más al tigre- agrego con una risita- Al menos pude alcanzarte. Y lo mejor es que las clases de resistencia estan dando sus frutos, hace unos meses atras ni en chiste estaria asi. Posiblemente estaria tirada en el piso, desmayada.

-Lo… Lo siento, estaba muy metida en mi mente. La proxima estaré mas atenta- prometi para dejarla tranquila.

-Quizas podria anotarnos, te haria bien - comentó- Y no… No es porque crea que no estas en estado o que te hace falta ejercitar, lo contrario a  eso, tienes la clase de figura por la cual yo me inscribi a esa tortura- confesó-Sin embargo los especialistas sostienen que es bueno para nuestros cerebros, no solo por los resultados sino porque sirve para despejarnos y asi olvidar lo que nos preocupa. Ademas, seria muy hipocrita de mi si criticase tu apariencia teniendo en cuenta de que estoy en un curso donde pone en lo alto a nuestro genero y esa es la regla inquebrantable. 

-Paso- conteste- No es que no quiera, simplemente no es que tenga mucho tiempo de sobra, ya sabes, entre el estudio y el café a duras penas puedo tener unos minutos libres para mi. De vez en cuando salgo al parque a correr- informe, como si esto fuese relevante para ella- Aun asi, gracias por tenerme en cuenta.

-Booh- puso su pulgar hacia abajo- Eso es deprimente, que … Tienes cuanto? 19?

-Casi 21- le corregi.

-Como sea, estas entrando a la epoca dorada, dando tus primeros pasitos en la decada perfecta, no puedes dejar que la estropeen tus responsabilidades, es por ello que esta noche iras conmigo.

-Ir contigo adonde?- pregunte, confundida y abrumada por su confianza.

-Iremos  a un bar con mis compañeros esta noche y tienes que acompañarme. No puedes permanecer encerrada en tu habitación mirando la pared- se quejo haciendo un mohin- No puedes desaprovechar de esa manera tu juventud.Podras hacerlo eso en tus treinta o cuarenta. Ahora es hora de que salgas alli y vivas, que te emborraches, que te vuelvas loca, que cantes a los gritos en un karaoke, que corras libremente, que hagas chuzas en el bowling, que participes de concursos de comida, de que crees recuerdos que traeras a colación en una cena entre tus amigos y tu esposa… O esposo, o lo que sea. Estoy cien por ciento al favor de la poligamia, de la libertad. No es algo que escogeria, no obstante si te hace feliz, no me fastidia, no cambia la percepción que tengo sobre ti.

Senti el impulso de indagar respecto a ello, pero no queria quedar como la chica a la que le influye lo que los demas tenian para decir sobre ella.