Su alumna favorita

38. Lo haría todo de nuevo.

 Definitivamente esto no era lo que esperaba que sucediera cuando mis compañeras me habían retado a ir a buscar su ropa interior nada habia salido como esperaba que lo hiciera sin embargo una parte de mi no queria y no podia quejarse, había sido... Interesante.  

Y si se preguntan que fue lo que dije cuando llegue a casa mucho más tarde de lo planeado les ofrecí una disculpa y una excusa sobre como me había encontrado con la señorita Dewells , como ella se había presentado, una profesora de literatura quien me había dado una lección sobre como era inadecuado meterme en la casa de otras personas sin permiso que no sabía cómo ellos podían reaccionar y en cierto modo tenía razón les admiti que tenía razón y les entregué la prenda que me habían mandado a buscar.

 Lo que no esperaba es que esa noche diera otro giro más. Antes de irme a dormir recibí un mensaje  de Carter con una dirección. 

Aprovechando que todos estaban durmiendo marque su número. Como era de suponer no tardó en responder.

-Que demonios es eso?- inquirí, a la vez que me respaldaba contra la cama.

-Tal  parece que no puedes mantenerte alejada de mí- comento riendo, complacido consigo mismo.

-Deja de comportarte como un patán  y explícame  de que se trata esto.

-Pues es muy sencillo, esta bastante claro, es  dirección de un restaurante, uno muy conocido de la zona - informo - Y quiero llevarte ahí .

-Por que?- dije, y estaba en mí derecho a desconfiar de él , una parte de mí tenía la sospecha de que habían motivos ocultos.

-Me gustaría contarte toda la verdad sobre mí.Si vamos a hacer esto, no quiero que hayan secretos entre nosotros.

-Y no crees que ya es  tarde pars eso?

-Cerraras  el pico y me escucharás  o seguirás interrumpiendome?- masculló.

Por algun motivo su reaccion me hizo reir.Jamas me había tratado así y lejos de ofenderme, me divertia.

-Te causa  gracia sacarme de quicio?

-Tengo que ser honesta contigo?

-Es una obligación . Ya no hay más secretos entre nosotros.

-Es chistoso ser testigo de cómo intentas actuar como  un ser temerario y al que hay que guardarle respeto , ni  siquiera eres así cuando estas dando  clases. Que bicho te pico para transformarte en esa criatura de repente.

-No te equivoques , yo soy merecedor de respeto y puedo ser  imponente . Y tu tendrías que aprender a  respetarme- espeto en un tono firme de voz. 

Casi que podía imaginarmelo cruzado de brazos e hinchando su pecho.

-Oh por dios, no seas payaso.  No puedes intimidar a nadie, de hecho te aconsejo que dejes de gastar tiempo en aparentar ser un tipo duro cuando en realidad eres un puñetero  un osito cariñosito. Si piensas que me estás impresionando, permiteme aclarar que estás quedando como un  payaso ante mí al  intentar dar miedo.

-Oh cielo, tendrías que tenerme miedo, estar aterrizada, temerme. Porque puedo ser malo - respondió  soltando una especie de carcajada digna de un villano con una terrible gripa, totalmente ridícula- Puedo ser un gran tirano si me lo propongo. Sobre todo en la cama.

Mis mejillas se pusieron del color de mí camisón en cuanto oí eso y recorde que al menos ese trozo de su declaración era cierta.

-Hablando de eso… Que estás usando?

-Oh, no . No caeré en eso- le advertí.

-Vamos no seas aburrida- se quejo- Anímate, súbete  tren de la diversión.

-No,.no tengo quince años para tontear por teléfono con el chico que me gusta.

-Estas admitiendo que te gusto?- contesto actuando sorprendido.

-Acaso no es obvio ?- bufé.

-Pues me alegra enterarme de eso y mucho, porque a mí me pasa lo mismo. No he podido dejar de pensar en  tu boca  sobre mí pol... 

-Carter- chille evitando que pudiera completar esa frase.

La verdad es que no estaba  acostumbrada a lidiar con ese vocabulario tan... vulgar. Lo  que era gracioso teniendo en cuenta con quién había estado antes de él. 

Puede que Jeffrey no haya sido el mejor novio del mundo y por nada en el universo merecería ese título pero jamás había hablado de ese modo, si que había hecho cosas peores pero eso no.

 Y con una mano en el corazón debo reconocer que ipara que alguien pudiera ocupar su puesto en el podio de los peores cretinos de los que me había enamorado tendría que ser el descendiente del mismísimo diablo. 

-He pasado la última  media hora tocándome y aún así no puedo tener suficiente además me parecía egoísta privarte de semejante vivencia.

-Y has  elegido este momento justo , desinteresadamente para dejar de serlo?

-Que puedo decir? Soy un ángel.

-Si, un angel caído y que con tus acciones podras ser desterrado del cielo y te ganarás un lugar al lado de lucifer.

-No me arrepentiré, y si es contigo mejor, de hecho volvería a hacerlo contigo , todo, de nuevo  sin quitar nada de por medio, no pretendo eliminar ningún paso o instante  mucho menos la experiencia de oír como te corres a través del teléfono.

-Disculpa? Puedes repetirlo.No se si lo he comprendido bien.

-Que quiero ser participe de cómo acabas para mí.

-N…No lo lo sé , no he hecho esto antes.

-Siempre hay una primera vez para todo y yo podría ser tu tutor, tu profesor.

Este comentario despertó un fuego en mí interior que tenía la fuerza como para calcinarme y quemarme sin dejar una particular de mí.

Obviamente Carter no se percató de esto y continuo con lo suyo.

-Cierra tus ojos y desliza tus dedos en tus bragas, con cuidado con las uñas, no quiero que sales ese tesoro tan hermoso que tienes ahí, y que tanto amo, que tan loco me vuelve. Dale cariño, rozalo, de izquierda a derecha primero, imagina que estoy encima tuyo o mejor que soy yo el que lo hace y a la par dejo húmedos besos en tu cuello para luego subir a tu cara , tomarla entre mis manos y devorarte la boca, masajeandola tu lengua con tu lengua. Puedes verlo?

-Ajam- respondí ya con mí respiración agitada y mí entrepierna mojada.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.