CAPITULO 2

Hoy me he levantado con un poco mas de energías la cual pienso utilizar para el trabajo, debo poner todo de mi en esto si quiero conservarlo, necesito este trabajo para poder sustentar mis necesidades y las de mi novia, Dios sabe lo mucho que estuve esperando por algo como esto... bueno, no como este trabajo, pero algo similiar ya que adoro trabajar en una oficina, amo estar detrás de un escritorio y algún dia quiero poner mi propia empresa y no tener que depender de nadie para ganar mi propio dinero con mis propias inversiones.

Me aliste lo mas rápido que pude para asi tener un poco de tiempo y preparar un desayuno mas un café bien cargado para mi, se que dije que me desperté con mucha energía, pero el café es el café y nadie le dice que no a una buena taza de café bien cargado para comenzar un maravilloso dia con el de hoy... o por lo menos yo espero de que sea maravilloso para mi, quien sabe lo que pueda suceder.

Llegue justo a tiempo al trabajo para ver como la ex-secretaria de la señorita Walter comenzaba a organizar algunos documentos que estaban en el escritorio que ahora ambos compartíamos, poniéndolos asi en orden. Me acerque a ella y comencé a ayudarle s organizarlos bien mientras ella me decía como hacerlo y donde o en que carpeta ponerlos lo cual fue fácil, también me dijo que debía dejarlos en la oficina de Walter, esa mujer es un poco exigente y estricta cuando se trata del trabajo y la verdad es que no la culpo porque se como son algunos empleados cuando se toman confianza.

Todos los documentos son presisamente sobre libros que están por publicar, algunos son buenos, otros aburridos, otros no son tan buenos y les faltan palabras y por lo que vi son los contratos con los escritores de dichos libros, también hay condiciones que ponen para poder publicar el libro de dicho autor como por ejemplo, el libro tiene que tener palabras suficientes y tiene que estar bien escrito, no le debe faltar palabras, para que falten mejor que sobren, por lo que me sospecho que algunos de estos serán devueltos a sus autores y que los envíen cuando estén completamente terminados. Lei algunos de los documentos y los clasifique tal y como Corine me dijo que lo hiciera.

Note que algunos de los documentos tenían la firma de la señorita Walter, es una C con una W dentro de esta, ambas letras combinadas se veian hermosas y mas con la letra de esta mujer, es una muy bella firma, extraña, pero hermosa al igual que la persona que la hizo. Me duele admitir esto, pero esta mujer le ha quitado el puesto de las mas hermosa a mi novia y eso es mucho decir ya que Ann era muy hermosa cuando estaba en la secundaria, era la típica chica popular, pero buena gente, esa mujer parecía un angel, nadie competia con su belleza en ese entonces... Pero ahora esta mujer apareció para robar su lugar en la belleza.

Desde el primer momento en el que hable con ella, algo en mi se removio, no se que es, pero lo que si se fue algo especial, algo que Ann nunca hizo que pasara en mi, repito, aun no se que es, pero la sensación no me desagrada, no del todo... aunque creo que debería preocuparme, porque no es normal que algo asi este pasándome cuando tengo una novia a la que se supone que amo con todo mi corazón y por la que se supone que me revele contra mi familia defendiendo asi nuestra hermosa relación de tantos años, la cual no quiero tirar a la basura solo por una simple sensación de calidez.  

Entre a la oficina de la señorita Walter y deje los documentos en su escritorio como me dijo Corine que tenia que hacer siempre que organizara los documentos que se requerían para el dia siguiente, a los cinco minutos de tener todo en orden y de aprender a como prepararle el café a la jefa, llega la dueña de la editorial con un hombre a su lado, el hombre es rubio al igual que ella, tiene un parentesco que es imposible no ver, el le esta mostrando lo que parece ser un libro o un guion, no se lo que sea, pero parece fascinarle a la joven empresaria y mas por como le habla el hombre que viene a su lado, la emoción se nota en sus ojos. Se me hace conocido de algún lado.

-Es su hermano, Carlo, el es escritor- dijo Corine sacándome de mis pensamientos- Es mayor que ella, por si te lo preguntas, trabaja aqui como jefe de redacción y es uno de los escritores mas reconocidos a nivel mundial.

-Si, ya me di cuenta, ya decía yo que lo había visto en algún lado- dije arrugando un poco la frente.

Con razón se me hacia tan conocido, es uno de los escritores mas reconocidos de estos últimos años, el y otro sujeto en NY, pero ya esa es otra historia. Ella termino de hablar con su hermano y se despidió de el con un beso en la mejilla y se giro hacia su oficina, al hacerlo yo aun la estaba mirando y ella conecto mirada con la mia, al nuestras miradas conectar sentí un delicioso escalosfrio pasar por mi espina dorsal, cosa que me hizo estemecer de placer... placer que no me podia permitir sentir ya que yo tengo novia y ella es mi nueva jefa, es una mujer prohibida para mi en todo el sentido de la palabra, asi como yo estoy prohibido para ella.

Aparte la mirada y continue haciendo lo que Corine me decía sobre la computadora y sobre como organizar la agenda de la Srta. Walter, también me dijo que no es necesario de que yo  le diga sobre las citas que ella tenga por el dia, que ella siempre chequea su agenda un dia antes o en la misma mañana, asi no me distraerá en mi trabajo, otro dato curioso que no sabia era si ella tomaba café en las mañanas o no, se lo tendría que preguntar a Corine y si ella toma café tendría que saber que clase de café y como le gustaba.

Escuche como sus tacones resonaban en el piso medio alfombrado en dirección a su oficina, abrió la puerta pero ya no se escuchaban mas sus pasos, la tentación de mirarla era tan grande en mi que me tuve que forzar a no hacerlo, como dije y me lo repito una vez mas, esa mujer no es para mi, yo tengo novia y ella es mi jefa, Edmund, tienes que dejar de pensar en esa mujer... todo esto era tan difícil para mi y estoy seguro que con el paso del tiempo lo seguirá siendo porque esta mujer es hermosa de pies a cabeza... un pecado andante para los hombres.