Desamor es oportunidad,
para un nuevo comenzar.
Aunque te invada la tristeza,
quererte también es belleza.
Es tiempo de autoconocerte,
con buenos ojos verte.
Y tal vez poder descubrir,
que para más de un alma
eres el centro del mundo;
y poco a poco con calma,
o en menos de un segundo,
puedes volver a reír...