0. Prefacio

Aura tomó tímidamente la mano de su padre entrelazandola con la suya fuertemente. El hombre de cabello oscuro al sentir la cálida mano de su hija ni se inmutó. La pequeña al ver que no hubo reacción; hablo tratando de llamar su atención.

"Papi, ¿Hoy podemos ir al parque juntos?"

Miro con ojos dulces a su padre, esperaba que está vez su respuesta fuera diferente.

"Aura..."

Hubo un silencio, que rápido fue apagado por la voz de la niña de ojos grises.

"¡Dime, papi!" 

Su alegría desbordaba.

"Eres tan molesta"

La expresión de aura cambio al escuchar aquello; Un nudo en su garganta apareció. 

"¿Po- por qué?"...

Su voz era temblorosa 

No aguanto más; sus lágrimas comenzaron a salir, no podía pararlas, ella realmente odia llorar frente a su padre. 

"¡¿Qué es lo que tengo que hacer para recibir tu amor, papá?!

incluso después de ser rechazada, ella seguía con la esperanza de recibir una respuesta reconfortante, pero ni siquiera hubo una, solo silencio. 

"Si soy una niña buena, ¿me amarás? como lo haces con mi hermano William y mi madre Ariel. Si me esfuerzo incluso más que ahora-"

la interrumpió 

"¡Cierra tu maldita boca de una buena vez!"

Apesar de la orden de su padre, ella no calló. En ese momento sus emociones estaban al tope, ella quería con todas sus fuerzas ser amada por el.

"Por favor papá, yo solo quiero tu cariño"

"Ni aun que estuvieras muerta recibiras una muestra de afecto de mi parte"

Dijo soltándose agresivamente de la mano de ella.
La pequeña niña que alguna vez fue alegre y encantadora ahora solo derrochaba tristeza.

Ezequiel el cual era su padre nosintio ni un poco de pena al ver llorar desconsoladamente a su hija; Aura,  la cual siempre lo amó a pesar de su indiferencia.

"¿¡Por qué?! ¡Yo fui primero! ¡Yo merezco más tu amor que ellos! Papi, acaso ¿no recuerdas todos esos momentos llenos de felicidad que vivimos junto a mami?

"¡Callate! Eres igual de estúpida como esa perra"

En ese momento las piernas de Aura perdieron su fuerza cayendo al suelo. 
Lentamente se llevó las manos a su pecho de alguna forma las frías palabras de su padre hicieron que sintiera un terrible dolor en el.

"Lo unico que me provocas es desprecio"

El corazón de esa tierna niña terminó de romperse y el brillo que alguna vez tuvieron aquellos hermosos ojos, ahora solo mostraban un profundo dolor.