Ha pasado un mes y medio que no veo a Xendra, no ha regresado a clases después de lo que había ocurrido y tampoco respondía mis llamadas ni mensajes, aunque cuando intentaba llamarla muchas veces su teléfono estaba apagado, quizás se había ido de viaje con sus padres no quería llegar a pensar lo peor.
No eh podido encontrar una buena razón para justificar las intensas ganas de rendirme a esperar noticias y buscar como fuera su ubicación me enloquecería si no recibía respuesta, luego de la escuela me fui a la casa de Erika para festejar que cumplíamos 8 meses...últimamente me había dado cuenta que se comportaba extraño y en ocasiones no me llamaba por mi nombre, trataba de no prestarle atención aun cuando hace un par de horas los rumores de sus amoríos con uno de mis compañeros se confirmaron y aun así no dañe la ocasión por que solo iba por una sola cosa de ella, tenerla entre las sabanas lo cual ayudaba como distracción y pasarla bien, mi celular comenzó a sonar asustándome un poco y provocando una pausa en plena acción.
Erika me insistió que no respondiera y deje que terminara de sonar, pero, a la segunda vez ya deje de besarla para responder el celular con tono de rabia puesto que era una falta de respeto molestar en estas circunstancias aunque mi error también se encontraba en no haberlo puesto en silencio.
Respondí de inmediato sin importarme quien estuviese en la otra linea.
*Llamada en curso*
_ Hola, ¿Quién habla? ¿Qué quiere?
_ Bajale -las voz era calmada- ¿conoces a Xendra?.
_ Si, se podría decir que la conozco.
_ Solo escucha, tu fuiste la ultima persona con la que ella tuvo comunicación y si quieres saber de ella, puedes llegar al hospital de la quinta avenida.
_ ¿por que? ¿Le ocurrió algo?
_ Llega si quieres saberlo, yo te lo explico todo.
_ De acuerdo, yo llegare ¿Dónde me podrías estar esperando?
_ Estaré afuera en la entrada.
_ Y, ¿Cómo te reconoceré?
_ Yo te envió una foto para que me reconozcas -Suspiro-.
_ Esta bien, ya voy en camino.
*Llamada finalizada*
Colgué y comencé a recoger mi ropa, Erika desnuda con las sabanas cubriendo su parte inferior solamente me miraba curiosa esperando alguna respuesta respecto a la llamada y al hecho de que me estaba vistiendo sin haber acabado lo que habíamos empezado, una notificación me llego esa debía ser la foto, la revisaría en el camino.
_ Tengo que irme, se me presento una emergencia.
Obra del destino, de Dios o solo una casualidad como desees llamarlo mis dudas serian respondidas, ahora no podía prevenir el pensar en lo peor, por lo que no desaprovecharía esta oportunidad que podría acercarme a ella.
Erika_ Aun no terminamos amor.
Gateo sobre la cama hasta mi, permitiendo mirarla totalmente desnuda. Me mordí el labio al tenerla tan cerca, tenia la tentación hay mismo pero, le di la espalda metiéndome en la cabeza que debía irme.
_ Tengo que salir, será para la otra.
Erika_ Brayan se trata de nuestro día.
_ Disculpa -me coloque la camisa- te escribo después.
Baje a toda velocidad y después de cerrar de un portazo por el miedo y la emoción combinados corrí al auto, hice lo que puede para llegar sin problemas, así aprovechando cada segundo.
Estacione el auto al frente apenas llegue, y mientras subían automáticamente las ventanillas me terminaba de abrochar la camisa.
Mire la imagen en mi teléfono luego levante la mirada hacia la otra acera, de inmediato la vi consumiendo un cigarrillo, era pálida con el cabello pelirrojo que parecía tinturado, tenia unos ojos azules, era alta y con una mirada que lograba transmitir tranquila a diferencia que la de Xendra baje del auto para poder acercarme, me pare frente a ella la que libera una pequeña nube de humo para luego romper el silencio.
_ Hola, ¿eres Brayan?¿cierto?
_ Si, soy yo ¿Quién eres tu? ¿Qué le ocurrió a Xendra?
_ Noto que de verdad te importa lo que esta pasando.
_ Claro que me importa, explicame que esta pasando.
_ Bueno, tuvo una pelea con su hermano hasta el momento no me ha dicho la razón pero, la golpeo muy fuerte como para casi matarla, intento violarla nuevamente y no lo pudieron atrapar, el cobarde escapo y esta no es la primera vez que sucede. Uno de los vecinos reporto a la policía por que escucho los gritos de Xendra.
_ Me sorprende mucho que me digas eso, yo conozco muy poco de ella pero, me alegra mucho saber un poco mas de su vida.
_ Eso no es todo, escucha bien la policía dijo que su casa estaba abierta y la encontraron inconsciente en medio de la sala, solo con la parte de abajo de la ropa interior que intento romper y llena de sangre, no se ve tan mal ahora, esto de llamarte lo hice atrevidamente por que note que no paraban las notificaciones ya que timbrabas mucho a su celular y a ella al mencionárselo hace unos días, solo me dijo que tu eras un estúpido igual que el resto, que no quería por ningún motivo verte - levanto los hombros-.
_ ¡Que cobarde! Me pregunto cual será su motivo, ¿no lo sabes?
_ Solo te puedo decir lo que me dijo la policía, eso mejor deberías preguntárselo tu ¿Quieres verla?
_ Bueno, si claro -me mordí el labio- vamos.
Termino su cigarrillo y entramos al hospital, la seguí hasta la habitación de Xendra, entre muy callado detrás de su amiga, se que no le gustaría verme pero, ya me encontraba hay no pretendía regresarme por mucho que supiera el trato que recibiría.
_ Hola Xendra -un aire frio me recorrió el cuerpo-.
Xendra_ ¿Paso algo Dimitra? Ya que entras sin decirme sobre lo que te pedí que hicieras.
Dimitra como ahora me enteraba que se llamaba, camino despacio hasta la parte delantera de la camilla mirándome y después regresar la mirada a Xendra.
Xendra_ ¿Por que miras a la puerta? ¿Paso algo?
Dimitra_ Primero relajate todo esta bien, traje conmigo una persona que se encontraba preocupada por ti.
Xendra_ ¿Quién mas podría estar preocupado por mi? Digo, los muchachos han venido y son los que mas me importaba que supieran de mi.
Dimitra_ Si -se rasco el cuello- creo que te falto una persona mas.