Sunkai

A visperas de la navidad

Al día siguiente, Martina prendió la televisión con la esperanza de encontrar algo interesante. Sin embargo, su rostro se petrificó al escuchar la noticia escalofriante que llenaba la pantalla. Mil personas habían sido masacradas el día anterior, una tragedia inimaginable que dejaba a Martina sin aliento.

El horror se apoderó de ella mientras las imágenes y los informes detallaban el alcance de la masacre. Un nudo se formó en su estómago, incapaz de comprender cómo algo tan atroz podía haber sucedido. Las lágrimas llenaron sus ojos mientras su corazón se llenaba de dolor y compasión por las víctimas y sus seres queridos.

Martina se quedó mirando fijamente la pantalla, sintiendo una sensación de impotencia y tristeza abrumadora. La noticia de la masacre la dejó sin palabras, esto hizo que pensara si darle el disfraz a Neil o mejor no, pero sabe dentro de su ser que su hijo no va a ser derrotado tan fácil, Juan llega con ella.

¿Estas bien amor? - preguntó intrigado
Ella lo miró y estaba pálida del susto, Juan corre a abrazarla
Mil personas murieron ayer, mientras nosotros comprábamos cosas para mañana - contestó afligida
Lo sé cielo, por eso debemos dejar que Neil haga lo suyo - afirmó
Si, hay que levantarle el castigo, el lo hará bien estoy segura - dijo con esperanza

Mientras tanto enn un campo abierto, bajo un cielo despejado y brillante, Neil se encontraba frente a su padre, Rnozor-Jhei, listo para comenzar su entrenamiento, el cual iba a tratar del control de las ondas de energía y aire . Rnozor-Jhei, con su imponente presencia y sabiduría, emanaba una energía tranquila pero poderosa, lista para guiar a su hijo en este viaje de autodescubrimiento y dominio.

Con una reverencia respetuosa, Neil se preparó para el desafío que se avecinaba. Siguiendo los enseñanzas de su padre, comenzó a concentrarse, canalizando su energía interior y sintonizándose con el flujo del aire que lo rodeaba. Sus manos se elevaron lentamente, como si estuvieran guiadas por una fuerza invisible, mientras comenzaba a sentir la energía pulsando a través de su cuerpo.

Rnozor-Jhei observaba con orgullo y determinación, guiando a Neil con palabras de aliento y sabiduría. Con cada movimiento, Neil se sentía más conectado con el universo, más en sintonía con la energía que lo rodeaba. Pronto, comenzó a liberar ondas de energía y aire con precisión y control, cada vez más fuertes y enfocadas.

El campo resonaba con el sonido de las ondas de energía y aire, creando un espectáculo impresionante de poder y destreza. Neil se sentía vivo, vibrando con la emoción de dominar una habilidad ancestral y poderosa. Con cada paso, cada movimiento, se acercaba un paso más a controlar sus poderes.

Al final del entrenamiento, padre e hijo se miraron con respeto, compartiendo un vínculo indestructible forjado a través del poder y la sabiduría.

Hijo, estamos a punto de terminar tu entrenamiento - dijo
¿Tan pronto? - preguntó extrañando
Así es, no hay nada más que yo pueda enseñarte más que lo de mañana - contestó
Se pasó muy rápido el tiempo - comentó
Así es, lo demás deberás aprenderlo por experiencia y si tienes dudas aquí estoy - dijo
Gracias papá - dijo

La esfera se cierra, Neil agarra la esfera y regresa a su casa en la tarde, donde es recibido por sus padres.

Ya llegué - dijo con una sonrisa
¿Cómo te fue hijo? - cuestionó Interesada
Bien ma' - contestó
Que bueno - dijo
¿Y la comida? - preguntó intrigado
Ya casi está - contestó
Que bueno porqué tengo mucha hambre - dijo
Bueno toma asiento - sugirió
Claro - dijo para después lavarse las manos y sentarse.

Una vez la comida estuvo lista, Martina la sirvió, todos se sentaron a comer. Neil comenzó a comer con una velocidad sorprendente, devorando la comida como si nada.

Sus padres se quedaron boquiabiertos al ver cómo su hijo devoraba la comida con tanta voracidad y rapidez. Pero para su alivio, habían preparado suficiente comida para todos, así que no tenían que preocuparse por quedarse sin nada para cenar. Mientras observaban a Neil, no pudieron evitar reírse y sorprenderse por su increíble apetito, preguntándose cómo era posible que un chico tan delgado pudiera comer tanto.

Lo bueno es que no tenías hambre - bromeó Juan
Si, lo se es que de repente me entro un gran apetito - dijo
Supongo que es el apetito de un Saironian - dijo Martina
Na, creo que lo heredé de ustedes - bromeó

Todos rieron y pasaron un buen momento en familia, mientras tanto Pyrrktaan aterrizaba con Pyrrothor y Naminja

¿Cómo te fue? - preguntó Pyrrothor
Hay una pieza aquí en este pueblo - contestó Pyrrktaan
Genial, tenemos que buscar aquí ahora - dijo Naminja
¿Algún problema con eso Naminja? - preguntó Pyrrothor
No, es solo que es posible que llame la atención de ese Saironian - contestó
Tranquilo si se entromete, conocemos su debilidad - aseguró Pyrrktaan
Cierto, entonces la buscaré yo solo - dijo Naminja
Bien así no nos exponemos tanto - dijo Pyrrothor.

De vuelta a la casa de Neil, estos acababan de cenar, pero se quedaron conviviendo un rato en familia .

Hijo tu padre y yo hemos hablado y creo que te vamos a levantar el castigo - afirmó Martina
¿Enserio? - preguntó emocionado
Así es hijo - contestó Juan
¿Ósea ya voy a poder usar mis poderes? - preguntó todavía emocionado
Así es hijo, ayuda a las personas - contestó su madre
¡Si! - exclamó emocionado saltando de la silla
Pero no sin antes - dijo interrumpiéndolo para después levantarse y agarrar el regalo debajo del árbol - esto es para ti - dijo

Neil lo tomó extrañado. Martina esperaba con nerviosismo a que Neil abriera el regalo de Navidad que le había preparado con tanto cariño. Cuando Neil desenvolvió el paquete y vio el disfraz café con toques amarillos, una capa amarilla y un antifaz, sus ojos se iluminaron de emoción. Vio con asombro el emblema de la "S" en el torso, y una sonrisa se dibujó en su rostro.




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