Año nuevo

En una bulliciosa mañana en Ciudad de México, Pyrrothor, se da cuenta de que la última pieza del artefacto que busca está escondida en algún lugar de la Ciudad de México . Determinado a completar su objetivo, comienza su búsqueda, dejando a su paso caos y destrucción.

Mientras tanto, en la casa de los Velázquez , Neil escucha los estragos causados por Pyrrothor en su camino hacia la ciudad. Con determinación, se pone su disfraz y se dirige hacia el centro de la ciudad para enfrentarse al villano.

La confrontación entre Neil y Pyrrothor es épica. Los dos luchan con una ferocidad sobrehumana, cada golpe resonando a través de las calles de la ciudad. Los noticieros locales, al captar la intensidad de la pelea, comienzan a transmitir en vivo, llevando la noticia a México y al mundo entero.

Los poderes combinados de Neil, con su fuerza y su invulnerabilidad, chocan contra los oscuros poderes de Pyrrothor. La batalla parece interminable, con edificios destrozados y calles convertidas en campos de batalla.

Finalmente, al caer la noche, Neil logra derrotar a Pyrrothor, encerrándolo y poniendo fin a su reinado de terror. El mundo entero queda asombrado al descubrir la existencia de estos seres con habilidades extraordinarias.

Neil desciende con un noticiero el cual le pregunta su nombre y él dice que es "Sunkai".

Poco después regresa a su casa con sus padres, con los cuales celebra la victoria, y les agradece por su apoyo y por estar para el, el mundo está a salvo gracias a Sunkai o Neil, al llegar a las doce todos en sus casa gritan "feliz año nuevo".

Al día siguiente ya era 2013, y empieza a sonar la canción "persiana americana" interpretada por soda stereo.

Al día siguiente, Neil vuela por la ciudad con gracia, utilizando sus poderes para ayudar a recoger escombros y salvar a aquellos que quedaron atrapados en los estragos causados por la batalla. Con su fuerza sobrehumana y su velocidad increíble, Neil se convierte en un rayo de esperanza para los ciudadanos de Ciudad de México.

Después de horas de arduo trabajo, Neil regresa a casa, donde se encuentra un periódico que cuestiona su papel como salvador de la tierra. Neil no ve el periódico y va y saluda alegremente a sus padres antes de dirigirse a encontrarse con sus amigos, Luciana y Alex.

Juntos, los tres amigos pasan el tiempo charlando y riendo mientras caminan por las calles del pueblo. Finalmente, llegan a su cafetería favorita, donde se deslizan por las ventanas con una familiaridad asombrosa. Aunque no podemos escuchar sus conversaciones.

Y así, en este momento de camaradería y complicidad termina esta historia, o eso creen, se acaba la canción de fondo.

Una nave no identificada surcaba el espacio, su avance rápido y sigiloso reflejaba una intención ominosa. En su interior, un hombre descansaba, pero su semblante no denotaba paz, sino más bien una oscura determinación. Sus rasgos recordaban a los del Neil, pero una mirada fría y calculadora sugería que este hombre era algo más que un pariente lejano. De repente, sus ojos se abrieron con una intensidad aterradora, como si estuviera poseído por una sed insaciable de poder. Con un gesto impasible, sabía que estaba a punto de alcanzar la Tierra.