capitulo 6

Ha llegado el día de la reunión con el otro grupo, nos preparamos, cogimos armas. Cuando llegamos al centro comercial, Miguel y Héctor se escondieron unas tiendas. Estuvimos esperando 30 minutos cuando vi al líder, me emocione era mi hermano, nos abrazamos y le pedí perdón por las cosas que le dije durante una discusión.

—Me alegro mucho de que estés bien. —dijo Sergio

—No, sé que decirte. —dije

—Sabes, haces unos meses, cuando comenzó todo, fui a tu casa y no estabas y eso me asusto mucho, pero me alegra de saber que estas vivas. —dijo.

—Bueno, creo que los dos queremos lo mismo para nuestra gente y que podremos confiar que nadie nos lo va a jugar. —dije

—Tienes razón. Si te soy sincero cuando supe el nombre de la líder mil cosas se me pasaron por la cabeza. —dijo.

Héctor y Miguel salieron de su escondite, pero no eran los únicos que estaban escondidos ya que el otro grupo hicieron lo mismo. Sergio y yo nos reímos de la situación e hicimos las presentaciones.

—Sabes creo que papa estaría orgulloso de nosotros, de las cosas que hemos hechos. —dijo Sergio.

—No estoy tan segura. Si no fuera por una persona estaría ya muerta. —le dije

—Me gustaría conocer a esa persona y darle las gracias por sálvate. —me dijo. 

— ¿Dónde estáis? —pregunto

—Nosotros estamos en una urbanización .no muy lejos. —le dije

—Ah, también tenemos a un médico. —dije

Nos despedimos, nos fuimos cada uno, por un lado. Estaba muy contenta de ver a mi hermano. En el coche de vuelta a la urbanización. Miguel empezó a hacerme preguntas sobre mi hermano y fue entonces cuando me di cuenta de que se me había olvidado felicitar a Sergio por su cumpleaños y nos reímos todo el camino de regreso.

Al llegar nos preguntaron cómo fue la reunión y les dije que muy bien que conocía al líder del otro grupo, que era mi hermano mayor y que estaban en una base militar a un par de kilómetros al sur. Todos se quedaron más tranquilo a escúchame. Gabriel me miro, como diciéndome ya te lo dije.

Hemos visto unas bengalas, alguien necesitaba ayuda y como no estaban muy lejos de nosotros decidimos ayudar, en medio del bosque vimos unas personas que estaban huyendo de un grupo de infectados, les hicimos señales para que nos siguieran, eran una familia de 3 personas, cuando llegamos a la urbanización nos explicaron que  al principio eran más de 40 personas pero fueron atracaron por un grupo que vestían de rojo, ellos pudieron escapar eran de parís que estaban de vacaciones cuando paso todo. el padre se llama Daniel, tiene 47 años, pelo canoso, alto, no muy delgado, con pantalones negros, jersey oscuro, la madre es Elea, castaña, altura media, delgada 44 años, pantalones cortos marones, jersey claro, el hijo es bruno 26 años pelirrojo, alto y delgado, vaqueros y una sudadera gris con un jersey blanco. Preguntaron por el líder del grupo y cuando le dijeron que era yo, pregunto cómo una persona tan joven era el líder del grupo y no supe que contéstale.

—Es la líder porque sabe lo que hay que hacer. —Dijo Héctor.

— Ella nos ha salvado a todos nosotros. —dijo Maite.

—  Bueno, si todos confían en ti y porque nos ha ayúdalo, haremos lo que nos pida.—dijo Daniel.

Después de habla fuimos a la casa principal que era donde hacíamos las reuniones ya que era la más grande