Salí de la urbanización, me dirigí al centro de Orihuela, para saber quién hacia esos dibujos. Tarde en llegar porque fui andando, estaba segura de que podía averígualo.
En muchos edificios del centro tenía ese símbolo, oí un ruido, era un espray, un hombre vestido con una túnica roja, eran ellos la iglesia de los caídos ¿Qué hacen aquí? Sé que son peligrosos, me metí en un edificio, subir hasta el tercer piso, entre en piso que tenía la puerta abierta, estaba claro que alguien entro y se llevó todo lo que podía, me acerqué hacia la ventana, estaba rota y llena de polvo, estuve un buen rato observando, quería saber a dónde iba, pero no quería ser descubierta, no había donde escóndanse.
Llego un coche con más gente todos iban vestido igual, estuvieron hablando un rato y se marcharon, tomaron la dirección contraria de la urbanización.
Me he dado cuenta de que ahora tenemos dos enemigos, los que nos atacaron y esta secta.
He salido del edificio, tengo que encontrar algo de comer y de beber. Menos mal que hay varios supermercados.
Entre en el más grande, apenas había cosas, cogí lo que pude, y Salí de allí, solo tenía que buscar un sitio para pasar la noche.
Empecé a oler a quemado, vi como salía un gran humo negro, no estaba muy lejos, así que me decidir ir hacia allí, para saber qué había pasado.
Llegar hasta un polideportivo, había coches quemados y algunos miembros de esa secta estaban muertos, en el interior había mucha sangre, parecía que hubiera sido una especia de batalla entre ellos. El humo era más intenso dentro, escuche que alguien pedía ayuda y me acerque hasta llegar a un hombre que estaba atrapado, un trozo del techo le había caído encima. Cogí un trozo de metal e hice palanca, el salió tosiendo y me dijo que su amigo estaba dentro que tenía que ayúdale a encontrarlo y salir de allí.
Había mucho humo, no veía bien y apenas podía respirar. Solo se oía el fuego, llegamos hasta una puerta, estaba bloqueada por unas vigas, nos consto moverlas hacia un lado. No se escuchó nada, hasta que el que me acompañaba llamo a su amigo.
Entonces alguien le contesto.
—Estoy aquí, !Date prisa, Alex ¡ — grito Pedro
—Vale, Pedro. Estate tranquilo, té vamos a sacar de aquí. — Alex
Se notaba que eran buenos amigos. Incluso juraría que se conocían de antes que esta pasara.
Nos costa bastante mover la viga, pero lo conseguimos y le sacamos de allí.
Ya casi no se podía respirar, el humo era cada vez más intenso. Solo logre ver una pequeña luz, fuimos hacia allí, esperando que diera hacia la calle.
Una vez fuera, conseguimos respirar con normalidad. Pude fíjame mejor en ellos, Pedro es delgado, tiene el pelo oscuro y Àlex castaño claro.
—Oye, quisiera darte las gracias. —comento pedro
—No tienes porqué dámelas. –dije
—La vedad es que sí. – Álex
—¿A dónde iréis ahora? — pregunte
—Creo que intentaremos ir a una urbanización, pero no sé, si ellos nos aceptaran— Álex
—¿Por qué no os van acepta? — quise saber
—Porque, mi grupo les ataco. — Pedro
Me quede muda, No sabía ni que decir ni que hacer. Me preguntaron que me pasaba y les dije yo era de ese grupo. Entonces Pedro me conto que tenía planeado escapa de este lugar, pero antes quería ganase nuestra confianza, fue el quién dejo aquella nota.
Me contaron lo que le había ocurrido.
Unas furgonetas entraron a toda velocidad y dentro había infectados, cuando estaban en el centro las abrieron y salieron de ellas, mientras los infectados les atacaban, ellos disparaban y lanzaban unas granadas.
No tenían escapatoria, su líder Lucas se escapó con sus mejores hombres y dejaron al resto a su suerte. Y que recordaba mucho más
.—Bueno, creo que no habrá problemas, si venís conmigo, les explicare todo esto. — dije
—Pero, antes hay que busca un sitio para dormí. — Pedro
Buscamos un sitio tranquilo para pasa la noche, algo me decía que podía fiarme de ellos.
Pasamos por varias calles e intentaba evitar los edificios con pintadas porque eso significa que los de la secta estaban cerca o eso era lo que creía.
Al final encontramos un bloque de pisos bastante antiguo y decidimos entrar. Subimos hasta el último piso para tener mejor vista de lo que pasase fuera.
Estuvimos buscando algo de comer, pero solo encontramos unas bolsas de frutos secos.
Me asome por la ventana con mucho cuidado para que no se vista por nadie, no tenía nada con que comunícame con los míos.
Nada más amaneció, salimos de allí, caminamos un rato, cuando empezamos a oí disparos, corrimos para saber lo que sucedía, temía que mis amigos estuviesen en peligro. Cuando estábamos a punto de llegar, resulto que eran los hombres de Lucas estaban siendo atacados por un grupo de coléricos.
No estaba segura de que hacer si ayudares o no, pero al final no hizo falta, ya que lograron acabar con ellos, tomaron la dirección de la urbanización, como ya había recorrido varias veces. Conocía un atajo, llegamos a las puertas y miguel me miro preocupado, no sabía quién eran mis acompañantes ni porque veníamos corriendo.