La distancia

La distancia es muy grande entre tú y yo,
aunque ambos nos vemos muy seguido, por la misma clase de música.

Tú tocas la guitarra y yo el piano, 
eres muy bueno en ello, 
a mí no se me da la guitarra, 
en cambio tú tocas muy bien el piano, la batería, y otros instrumentos más, 
pero tu fuerte es la guitarra definitivamente...

Yo te miro desde lejos y hay veces en las cuales cruzamos miradas,
tú también me miras de la misma manera.

Y sin embargo no hablamos, 
no nos dirigimos palabras, 
y eso es mucha distancia para ambos...

Me atrevo confesar que hasta en privado he practicado lo que te diría,
pero no encuentro la forma de llegar a ti.

Siempre te veo con tus amigos,
solo son tres amigos en tu grupo, 
solo he hablado con uno de ellos porque él también toca el piano,
y aún así no sé como llegar a ti, 
no se como introducirme, 
poderme ganar a mi mismo pánico.

En mi grupo solo somos mi hermana y yo, 
quien tu amigo (el del piano) la invitó a salir
y aún así tú y yo no nos hemos hablado.

¿Y si a lo mejor sientes lo mismo y por el miedo no dices nada? 
¿y si alguien te rompió el corazón? 
Porque veo como rechazas las invitaciones de las chicas, 
escuché una vez que te preguntaron si te gustaban los chicos
pero la pregunta fue de mala manera
en forma de burla
y tu golpeaste a aquel chico...

¿Y si sientes algo por mí y piensas que también te romperé el corazón? 
Porque yo no lo haría, 
recuerda que todavía hay gente dispuestas a dar un verdadero amor...

Pero me adelanto... 
¿Y si solo me miras porque soy mala en música? 
No, no lo creo, el profesor dice que soy una de las mejores en la clase. 

Bien, aquello no sonó modesto, lo sé. 

¿Y si me miras solo por curiosidad? 
Pero... 
¿Por qué te daría curiosidad? 
¿Y si me miras porque soy rara? 
Porque lo soy, lo admito.

¿Y si me miras porque ya te diste cuenta que yo te miro?

Pues eso sería obvio, 
¿Por qué no disimulo más? Oh no... 
 

Pero... 
Hoy todo cambió,
Hoy te vi y me... 
Y me sonreíste... 
casi me desmayo, 
también te sonreí, 
y tus mejillas se tornaron rojas.

Pero sin embargo, 
seguimos en una distancia... 
Una cruel distancia, 
porque es como que hay algo que nos separa... 
Es el miedo... 
Es nuestra distancia.
 

La mismísima distancia que nos une.

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Inspirada en una canción de Tercer Cielo.