Caliz lunar

“Convido esta copa a la luna llena,

El vino a su palidez se convierte en sangre,

Sangre dulce, prohibido elixir de tu esencia,

En esta noche diáfana, remolino de demencia,

Brindo a la suerte de poder conocerte,

En su astral marmolado puedo verte,

Como un espejo que persigue tu ausencia,

Temer verla porque desde ella te veo,

En mi espía, soberbia dama, su favor poseo,

Mi deseo de ti cumple con paciencia,

Pues conoce cada triste secreto.

Es a la luna este tributo de sangre,

Licor de pasión, frío fuego de espera,

Cálido tormento por la vida entera,

Disfrutable amor que de dolor se nutre,

Se desliza como una novia de velo ilustre,

Provoca mis ansias, despierta mis ganas de arte,

¡¡¡Salud!!! Por esta herida que causa amarte,

Menos son las llamas de una hoguera,

El ardor de mi alma enamorada las congela,

Horrorizadas y en vergüenza no pueden tocarme,

Les daré lecciones a su insolencia,

Mi piel quema mejor que ustedes.

Fuego helado, hielo hirviente,

Cada gota en este cáliz lunar viviente,

Es una ofrenda a las deidades mundanas,

Mi mente las crea de sueños indecentes,

Sobre el altar de las tradiciones paganas,

Mientras la inocencia se hace baile y risa,

En este balcón celebro a la sombra esta misa,

Frente a la joya nocturna de testigo,

Pienso es ti y hago estos tratos dementes,

Esperando hechizarte de alguna forma,

Fuego frío, hielo ardiente, sonrío,

Y ella sobre mí también sonríe.

¡¡¡Salud por ella!!! ¡¡¡Salud donde quiera estés!!!

El vino sangriento quema mi garganta,

Como un trago de miel congelada,

Delicia, por mis venas, una sensación santa,

Cubre mi cuerpo de una emoción profana,

Líquido vital, hemoglobina sagrada,

Sabrosa condena de amor venenoso,

Trae tu imagen a mis pupilas cansadas,

Mi pecho se enciende como un reloj lagrimoso,

Desesperante tiempo sin poder encontrarte,

Si el insomnio o la pena te guían mirar al cielo,

En las noches de ansiedad y desconsuelo,

Te dirá la luna que aquí estoy para amarte,

Sin importar las distancias.

Dulce tormento de una pasión prohibida,

Esta sangre ha cerrado un pacto aciago,

Esta sangre que frente a la luna conmovida,

Herido de espinas mi corazón llora,

Fuego de vida, hielo de muerte,

Feliz de conocerte, deshecho por no verte,

Este cáliz vacío de tal contraste será llenado,

Para brindar otra vez al amparo del exceso,

Atrapo entre los dedos este fugaz beso,

Lo suelto a la brisa con tu nombre,

Como una mariposa de plata sea llevado,

Que te encuentre tras tu ventana insomne,

Y se apodere de tus labios este conjuro,

De amor y deseo pactado a la luna,

Para que su luz se filtre hasta tu cuna.

Fuego frío, hielo ardiente y yo en medio,

Amor y dolor,

¡¡¡Salud por ella!!!