Susurros Sepultados

Capítulo 3

Me quedé llorando dentro del ropero por horas, ahora estoy consciente de lo que está pasando. No es ninguna broma, no es un juego, es la oscura realidad. 
El espíritu de Lily me está persiguiendo, esta es su habitación y según entiendo, es o era parte de la familia.
Ella quiere algo de mí sólo que no sé lo que es. Tampoco sé por qué yo.

Me quedo dentro hasta que un débil rayo de sol entra por el cuarto, con la puerta entreabierta del ropero veo mi señal para salir.

Cuando me apoyo en mis piernas me doy cuenta de que tiemblan, miro a mi alrededor, a la habitación aparentemente vacía, cierro el ropero con cuidado y mordiendo mis labios para evitar sollozar del miedo empiezo a caminar a la salida. Giro el pomo de la puerta y miro por el pasillo, no hay nadie, así que empiezo a salir y antes de cerrar la puerta vuelvo a girarme.
Me la puedo imaginar sentada en esa cama, abrazando a sus rodillas y mirándome.
No sé si es mi mente o si es ella jugando conmigo. O si es el miedo controlándome.
Pero cierro la puerta igual.
Hago de mis manos puños y en la izquierda siento la presión de la llave dorada dentro.

Camino hacia la puerta de Alisha, entro al darme cuenta de que está abierta, ella sigue dormida así que la muevo, no sin antes esconder la llave dentro de mi sostén.
-Despierta.- Susurro cerca de ella, gimotea y se aparta de mi agarre pero vuelvo a insistir.- Hey, Alisha, por favor.
Ella abre un ojo.-¿Qué?- Dice enojada. Ella odia que la despierten temprano, fuerzo una sonrisa, ella no puede saber que no me encuentro bien. 
-Estaba pensando en que deberían ir al río hoy.
Me mira sorprendida.-¿Por qué?
-Hablé con Nelson ayer sobre ese chico Asher, dijo que se pone a pescar por las mañanas, deberías ir, ya sabes...

Una sonrisa ilumina su rostro.-¿ Me estás queriendo decir que...?
-Vamos, antes de que sea tarde, tal vez él no sea tan mal chico.- Pega un chillido y me abraza del cuello.
-Eres la mejor hermana del mundo.- Se levanta con toda energía.- No sé qué usar, debo parecer casual ¿Cierto? Asher no puede saber que sé que se encuentra ahí.- Ella habla rápido y yo me siento como una basura por mentirle de esa forma, no puedo ni imaginar su rostro de desilusión cuando regrese sin haberlo visto. Porque ese tal Asher no estará ahí hoy porque yo jamás hablé sobre él con Nelson.
Pero aun así, la visto bonita y le hago una trenza de lado.
-Recuerda llevar a los niños, para que se vea causal.- Le quito una pelusa del pantalón.
-¿No vienes?
-No, tengo cosas que hacer, pero no te preocupes por mí , estaré bien.
Su sonrisa la hace ver aun más hermosa.- Gracias.

Veo a mis hermanos partir en la minivan, Alisha va al volante, papá le enseñó en el verano pasado a conducir.
Me quedo de pie en la entrada hasta que sólo son un borrón en medio del camino y luego me giro hacia la casa.
-A ellos no puedes tocarlos, si quieres que alguien te ayude entonces lo haré yo, pero no los metas en esto.
Y luego entro.
Lo primero que hago es ir hacia la habitación de la abuela.
Mis pasos resuenan en la casa, la madera de la escalera cruje bajo mi peso, saco la llave y la sostengo en mi mano. Estoy loca, estoy loca por hacer esto.

Me paro frente a la puerta de Willa, primero compruebo si hay sonidos dentro, no hay nada, todo está en silencio, como si no hubiera nadie más en casa.
Y me pregunto si Nelson fue el culpable de la muerte de Lily, si lo fue, no me extrañaría si no existe una tal Willa detrás de esta puerta y eso de la enfermedad no es más que otra mentira.
Redención.
Eso es lo que Nelson quiere, pero para eso debió haber hecho algo muy malo. 
Le pedía disculpas a Lily y ella estaba enojada. ¿Qué otra cosa a aparte del asesinato pudo haber ocurrido?
Si es lo que sospecho, no puedo dejar que ese hombre se acerque nuevamente a mis hermanos.
Tengo que encontrar las respuestas, eso es lo que ella quiere, eso es lo que quería decirme en su canto.
Necesito encontrar la oscura verdad.

Inserto la llave en el pomo, la llave entra pero no gira, pruebo sacudiendo levente la llave todavía dentro pero no sirve. Esta llave no abre esta puerta. 
Pero no hay más puertas que abrir.
Las de la cocina, el baño, las otras habitaciones, todas están abiertas.
La desesperación me invade.
Miro hacia la puerta de Lily.
-Necesito tu ayuda.- Murmuro.
Estoy consciente de que le estoy hablando al mismo espectro que le temo. 
Escucho ruidos en la parte de abajo, me trago un grito llevándome las manos al pecho. 
Juro que si ella aparece subiendo esas escaleras me desmayo.
No soportaría verla, no soportaría tenerla frente a mí en la vida real.
Escucho su voz en mi cabeza.
Scarleth

Con el coraje que no sé de dónde lo saco, empiezo a caminar.
Debo cerrar este capítulo, debo hacerlo.
Empiezo a bajar las escaleras, el reloj de la sala marca el medio día, una rápida mirada a la pared de la derecha y me encuentro con cuadros. ¿Cómo es que no me tomé el tiempo para ver estos detalles?
Voy rápidamente hacia ahí.
Algunas fotos están en blanco y negro, muestran a Nelson con la que supongo es Willa, están tomados de la mano, sonriendo a la cámara.
Luego están un par de chicas, las reconozco ahora, a ambas. Mamá y Lili y en estas fotos ellas parecen tan... parecidas que incluso parecen hermanas.
Pero es imposible, ella nunca mencionó a una hermana. 
Así como nunca mencionó a sus padres.



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En el texto hay: fantasmas, traicion, muerte

Editado: 03.04.2018

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