Sweet Pain

Capítulo 4 "Ensuciando la realidad con poesía"

Ezio pesa demasiado, el sol ya casi aparece y el lugar más cercano es mi casa, necesito sacarle toda la información que necesito así que ya voy pensando en maneras de hacerlo.

Llegué por fin a casa, abrí la puerta para ingresar y atravesé el patio de suelo de piedra, ya a punto de quedarme sin fuerzas solté a Ezio bruscamente, supongo no lo sintió, sigue dormido.

Abrí la puerta de la casa, lo tomé de su atuendo a Ezio y lo arrastré hasta la sala, cerré todas las puertas y ventanas bien. Busqué una silla y senté a Ezio para posteriormente amarrar sus manos, brazos, torso, piernas, pies, adicional a eso envolví su cuello en una soga que estaba atada al techo por si intentase hacer caer la silla.

Una vez asegurado mi objetivo voy a buscar algo de agua, salgo con un vaso al patio buscando la cubeta. Sacio mi sed y vuelvo a la sala dándome cuenta que ya salió el sol. Miré detenidamente a Ezio, su perfume de rosas me sigue pareciendo encantador, su máscara no es fea, pero quiero ver su rostro. Intento sacársela pero está muy bien adherida a su capucha y su capucha es parte de su atuendo. No puedo ni moverla.

Esperé un rato, no podía abrir las ventanas así que a pesar de que había sol tenía las velas prendidas para alumbrar la sala.

Ezio mueve la cabeza un poco, la levanta como tratando de reconocer el lugar donde está y solo logra centrarse en mí sentada en frente.

—Ya era hora de despertar —Dije.

Enmudecido y sin expresión dijo algo con voz tan baja que no entendí.

—¿Qué dices? —Pregunté casi que gritando— Dame la información que necesito y te perdonaré la vida.

Había improvisado todo un kit de tortura, no sabía si aplastar sus dedos con un martillo o mutilar su torso así que para asustarlo tomé un cuchillo y lo acerqué a su cuello, lo tomé de la capucha bruscamente y con la voz alta le dije que era mejor que hable.

—Última oportunidad, sería una lástima que te corte el cuello —Acerqué mucho el filo a su piel— !Ahora, hijo de puta!

—Lux —Respondió Ezio con total calma— La vulgaridad es algo que no le queda a una señorita como tú. No eres capaz de matar a sangre fría, es mala tu actuación y por eso no te va bien en la vida.

Algo dentro de mí se sintió intimidada ¿Era duda lo que sentía en mí? 

—¿Porqué dices eso? —Pregunté.

—Estás histérica, recuerda que la calma es el mejor arma de un asesino.

No entiendo, no se siente intimidado con el filo de un cuchillo en el cuello ¿Qué hago?

—Si te pregunto sobre mi padre me lo dirás ¿Verdad?

—Por supuesto —Afirmó— ¿Qué deseas saber?

¿Así de fácil me va a dar la información? ¿Qué clases de asesino es? Es más educado que la mayoría de la gente de Quito. Su tono de voz es lo suficientemente equilibrado para mantenerme alerta y perderme en él.

—Perdí la memoria y no recuerdo mi pasado —Quité el cuchillo de su cuello— Hablemos entonces, quiero que me cuentes todo lo que sepas sobre mi padre.

Me pide que tome asiento para que esté más  cómoda. Con suma educación me pide disculpas por atacarme aquella noche que le quitó la vida a Altair, él no quería que yo vea como cometía su "Obra". No dije nada, si me alteraba quizás no me de la información.

Una vez frente a frente me contó todo lo que sabía sobre mi padre: Un día ambos llegamos a Quito, nunca supo de donde, el punto es que mi padre era un hombre misterioso, casi no salía y pocos lo conocían. Ezio antes de dedicarse a cometer crímenes lo conoció un día que mi padre recogía un encargo. Cruzaron un par de palabras y esa fue la última vez lo vio, fue tan poco tiempo que no alcanzo a verle bien el rostro. Luego mi padre se fue de Quito y no supo más de él, aunque Ezio confiesa que su deseo es asesinarlo porque es lo que merecen los cobardes y demostró serlo al dejarme.

—Los cobardes viven lo suficiente para triunfar aunque la mayoría solo alarga su fracaso —Añadió Ezio— Tu padre era cobarde, pero no tonto, te dejó a cargo del incompetente de Sven, a él lo mataré segundo.

—No sabes mucho sobre mi padre, al menos sé que crecí con él y no me abandonó a mi suerte... —Pensé en lo último que dijo— ¿Porqué quieres matar a Sven?

—Se cree perfecto, es egocéntrico y no tiene virtud alguna que relucir —Dijo con calma— Al principio lo vi como un maestro, sabía muchas cosas, yo lo admiraba y quería aprender de él, pero con el tiempo descubrí que es un egoísta, él tiene conocimiento de unas tierras donde están mucho más avanzados que aquí y nunca me quiso decir donde quedan, decía que no lo iba a entender.

—Espera ¿Conoces a Sven?

—¿Qué si lo conozco? Me arruinó la vida, me sumergió tanto en la desgracia que aprendí a vivir en ella. 

La historia de Ezio es curiosa.

Ezio siempre fue un fino artista, dominaba el baile, letras, música y teatro como nadie lo hacía, un día mientras imprimía unos poemas le entregaron equivocadamente unos que suyos, leyó un poco de esos versos:

"Estamos a un baile de ser felices y a un beso de ser millonarios;
Polizones de la vida y de la muerte presidiarios;
Quisiste cambiar al mundo, pero él te cambió a ti;
Y aún así, siempre apuntaste a ser feliz.

-Sven"

De inmediato Ezio preguntó por aquel autor de esos versos y para su suerte apareció unos minutos después. Sven y él entablaron una amistad aunque más que eso era una admiración por el trabajo artístico de Sven en la escritura.

Luego de unas semanas Ezio era un alumno muy disciplinado, tanto que no solo aprendió sobre letras, matemáticas, historia, filosofía, astrología, etc, también decidió entrenar físicamente, combate, supervivencia y manejo de armas para estar preparado para lo que sea. Sven sabía enseñar y Ezio aprender, el conocimiento y habilidades en el alumno se desarrollaron muy rápido. 

Las cosas comenzaron a ponerse raras cuando Sven comenzó a negarle conocimientos a Ezio, según porque eran demasiado complejos. Dejó de educarlo e instruirle aprendizajes y se concentró en ejercicio físico. A partir de aquí comenzaron los disgustos, se distanciaron un poco y cuando estaban cerca había una tensión por parte de ambos, no estaban cómodos ya juntos.



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En el texto hay: historia, romance odio, misterio asesinato drama

Editado: 04.08.2021

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