T O R R E [ #2 - Los Aliados ]

Capítulo XII

Amelie se había percatado de lo que sucedía cuando ya era tarde.

Sintió una inmensa ola de energía proveniente de otra perla, por lo que rápidamente corrió hacia la habitación donde Kay descansaba y lo hizo ponerse de pie. Ella sola no podría enfrentarse a la fuente de ese poder por sí misma, así que pediría ayuda.

Al levantar a Kay, este apenas podía mantenerse de pie. No podrían pelear con él en un estado debilitado, así que planeó algo rápidamente.

Aunque no lo quería, tenía que salvar a Julie y Ray. Aunque no tenía nada en contra del padre de Kay, se sentía ofendida por el hecho de que, últimamente, él parecía estar muy cerca de su enemiga, Julie.

Enfrentando sus propios ideales, decidió darles una mano.

Es en ese momento cuando escucha un grito proveniente del jardín. Kay, algo sobresaltado por el grito, corre al balcón, encontrando a Julie, Ray y la chica llamada Astrid combatiendo justo afuera de la residencia. Además, su padre estaba sujetando fuertemente su brazo izquierdo, el cual lucía incompleto y sangrante. Eso hizo que Kay se molestara mucho, por lo que, inconscientemente, y gracias a la ayuda de la perla que poseía, creó una larga hoja, la cual hizo caer desde el cielo hasta la posición de Astrid en un intento de tomarla desprevenida.

Ella esquivó ágilmente su ataque, pero, en su lugar, dejó que una densa nube de polvo se levantara. Kay y Amelie no perdieron el tiempo y saltaron desde el balcón, tomando Kay a Julie y Amelie a Ray.

Amelie se negaría por completo a salvar a Julie, por lo que Kay terminó encargándose de eso.

Una vez pusieron a salvo a sus compañeros, aunque Amelie no los denominaba como tales, dejaron que alguien más se encargara del trabajo. Aunque Amelie, aun consiguiendo la determinación y el apoyo de Kay, en este momento no podía actuar.

—Tal vez esa chica ciega pueda hacer algo. Al menos, conseguir tiempo.

Amelie decidió secretamente dejar todo en las manos de Melissa, la cual descansaba justo a la entrada de la mansión, mientras tanto, llevaban a Julie y Ray a un lugar seguro.

Al llegar de regreso la habitación de Kay es donde comenzó la histeria.

La herida de Ray era muy grave, pero podía ser arreglada por la perla, algo que desconocían, por lo que Kay rápidamente rompió un trozo de tela de la cortina y la usó como torniquete para detener la pérdida de sangre provocada por el corte de Astrid.

—¡Padre! ¡Resiste!

En su rostro se podía ver la desesperación. Y mientras él peleaba por la vida de su padre, Amelie simplemente observaba. Julie fue la primera en recuperarse del shock de lo que estaba sucediendo y salió corriendo de la habitación. En cuanto Amelie notó esto, corrió tras ella, tratando de alcanzarla.

En el momento en que Amelie salió al pasillo y volteó hacia ambos lados, la figura de Julie no se veía por ninguna parte.

—¿A dónde habrá ido?

La adrenalina estaba disparada en todos, por lo que sus mentes estaban mucho más activas de lo normal, en especial en la de Julie, ya que era la única que podía pensar claramente en una situación así. Parece que sus años de prácticas por fin dan frutos.

Digo, es lo que se espera de un exmédico de combate de Central.

—¡Julie! —Amelie gritó con todas sus fuerzas.

Aunque la situación lo apremiaba, el simplemente decir su nombre le causaba repudio. La veía como una enemiga a la que había que destruir por todos los medios posibles.

Entonces, como si ella la hubiese invocado, la puerta de uno de los cuartos se abrió y salió Julie cargando a Kaly, la cual tenía los ojos vendados por alguna razón.

Julie sabía que solo Kaly podría salvar al padre de Kay, por lo que corrió por ella, pero, tomando en cuenta que es una niña de apenas diez años, la escena estaba muy fuerte para ella, por lo que optó por vendarle sus ojos para que no pudiera ver la grotesca herida en el brazo de Ray. Además, Kaly era muy cercana a Ray y Alessandra, por lo que le dejaría una herida incurable.

Con todo esto en la cabeza de Julie, ella actuó rápido y ahora se encontraba de vuelta en la habitación de Kay, mientras hacía que Kaly tomara una venda que consiguió de algún lado y curara a Ray, o al menos lo intentara.

Kaly parecía entender lo que sucedía, por lo que no hizo preguntas y actuó rápidamente.

Amelie solo podía mirar la escena sorprendida, la Kaly que ella conocía era una inocente niña de diez años que, según ella, era imposible que la trajeran a una escena tan horrible. Pero ella vio que Kaly se comportaba de una manera diferente a la usual. No veía su característica sonrisa ni sus movimientos exagerados, sino que su rostro se mantenía serio y sus manos se movían con extrema delicadeza mientras hacían su trabajo.

Realmente parecía que una persona completamente diferente ocupaba el cuerpo de la niña, pero no era así. Kaly era especial, bueno, no solo ella, también Melissa, así que es imposible tratarlos de la misma manera que a los demás.

Como sea, mientras Amelie se quedaba mirando, Kaly continuaba vendando la herida de Ray al mismo tiempo que los gritos y la desesperación de Kay no cesaban. Esta era la primera vez que Julie veía en ese estado a Kay, por lo que estaba sorprendida.



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En el texto hay: pasados oscuros, manipulacion, trianguloamoroso

Editado: 26.05.2021

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