CAPITULO I

*esta historia todavía no esta terminada al ser terminada será editada y corregida para ustedes ;)* atte. Antonia.

Daphne Bloyd 

¨Estrella fugaz¨

Tal vez, en otra vida pueda amarte. 

Solo quiero otra oportunidad para quererte mejor, para sentirte de nuevo conmigo y poder demostrarte todo esto que siento y poder abrazarte...                   

  —Te necesito—. susurre entre sollozos.—por que tiene que ser todo tan complicado— .

No puedo soportarlo, me rindo ya no puedo mas... tal vez, en otra vida podamos estar juntos... quiero estar contigo ahora, por favor no me dejes así. 

La vida me dio tantas oportunidades pero nunca pude tomar una buena decisión para llegar a ser verdaderamente feliz.

— Te extraño.— dije entre sollozos mientras colocaba su foto en mi pecho y me largaba a llorar con mas y mas fuerza hasta que mi cuerpo cedió y caí rodillas al suelo completamente destruida.

Estaba al borde de la orilla en el puente Bow Brige, con el alcohol corriendo por mis venas y con unas ganas inmensas de morir, desaparecer, de por fin llegar a esa otra vida donde pueda estar de nuevo con el y ser feliz y amarlo tal como el me amaba.

—Tal vez ya es hora de que llegue esa otra vida y pueda sentirte otra vez.— dije aun llorando.

En un completo acto de cobardía y valentía me di media vuelta sin pensarlo; me deje caer junto con la botella de vodka y y la foto de la persona que ya no esta conmigo en mis manos. De pronto sentí como el agua toco mi espalda y un fuerte golpe en mi cabeza fue suficiente para que todo se vuelva negro.

[...]

2 años antes  

Mi primera clase del año y ya estoy peleando con el profesor de literatura que cree que Shakespeare da a entender que el amor son solo corazones que puede acabar con la oscuridad cuando el mismo dijo que el amor es ciego y ridículo y no te das cuenta de las tonterías que llegas a hacer por amor.

—El mismo lo dice.— dije intentando no alzar la voz.

—No; no me contradiga señorita bloir, por algo soy su profesor se mucho mas que usted respecto a literatura y sabría perfectamente si las cosas son como usted lo dice.— Dijo  el profesor algo agresivo.

—Primero que nada, es Bloyd.— Remarque al mencionar mi apellido.— Segundo, al parecer usted no tomo en cuenta sus estudios o  quizás paso hace muchos años, ya que no es capas de saber que el propio William Shakespeare cito;  «El amor, como ciego que es, impide a los amantes ver las divertidas tonterías que cometen». —Leí la parte de atrás de mi libro Hamlet  que poseía en su contraportada algunas frases poéticas de el mismo autor del libro.—¿Va a negar las propias palabras del escritor ahora?.— Ahora si me exprese en un tono frenético y algo desafiante levantándome de mi asiento mientras me recargaba en las palmas de mis manos sobre la mesa.

—Me esta faltando el respeto señorita Bloyd.— remarco mi apellido en un tono burlón que me hizo querer explotar.—Siéntese ahora.

Además de sus comentarios sexistas y machistas tenia que aguantar que me contradijera de esa forma sabiendo que el estaba en un error es completamente injusto. A regañadientes me senté de nuevo.

—Imbécil.— Vociferé entre dientes pero aun así me escucho.

—Quiere repetirlo señorita Bloyd.—Dijo ahora molesto.

—¿Quiere que lo repita?.— Dije algo desafiante. No obstante no obtuve respuesta de su parte solo su mirada desafiante.—Okey imb...-

—Fuera de mi clase, ¡ahora!.— Dijo algo eufórico.

—Okey.— Dije burlona al mismo tiempo tome todas mis cosas.—Me largo. —Dije tajante y salí lo mas rápido que pude dirigiéndome a la parte de atrás de Notre Dame  para tomar aire y poder leer mi libro en paz ya que aun quedaba una hora para el receso.

Al llegar a la parte de atrás se me salieron unas lagrimas de rabia y patalee un poco antes de darme cuenta de que tenia compañía.

Cuando me di media vuelta vi que era Azael Deville el chico del que e estado enamorada desde el kínder. La verdad no se si siquiera sabe mi nombre o de mi existencia.

Trate de recomponerme lo mas rápido posible pero me di cuenta de que el  estaba hecho un mas de lagrimas y me sorprendí al ver a semejante persona tan dura  y gélida llorando, bueno a fin de cuentas todos tenemos sentimientos.

 Le hice un gesto para sentarme a su lado para no tener que volver a entrar y su silencio otorgo para que pudiera sentarme y sentir que aun tenia pañuelos desechables en el bolsillo trasero de mis jeans y se los tendí ya que desde que lo vi hacia ese ruido molesto que se hace al sorber los mocos.

Saco uno y se limpio la cara para poder recomponerse y yo solo me quede hay sin decir nada pasando por mi cabeza un montón de escenas que pudieron haber dejado en este estado a un corazón de hielo.    

No iba a decir nada por que no sabia que era lo que pasaba pero quedarme en silencio no era lo mío menos en estos momentos tan incomodos que quise romper el silencio de una forma divertida.

— Me duele el culo.—Dije seria y el comenzó a reír como me lo esperaba fueron unos 30 segundos de risas cuando llevo su mano a su cara y comenzó a llorar otra vez.—wow eso fue extremo.— Dije para poder calmarlo con risas pero fue un intento fallido por que solo lloraba.

Mi único instinto fue rodearlo con mi brazo y apoyar su cabeza en mi pecho para que se sintiera seguro, cuando lo hice no se alejo como lo esperaba solo se quedo en mi pecho sollozando y lanzando grandes bocanadas de aire en intento para relajarse.

—Lo siento.—Dijo luego de que sus sollozos se fueron desapareciendo.—estoy en una montaña rusa de emociones.

—No te preocupes, todo va a pasar.—Dije intentado relajar el ambiente. El solo asintió con la cabeza.