Entonces que te vas a poner para más tarde – Kylie toda emocionada me decía, mientras yo andaba distraída hundiéndome en mis pensamientos – ¿me estás escuchando Claire? – sé cruza de brazos.
Claro – atino a sonreír –¿ sabes por qué Mike se estaba peleando?
La verdad no – se encoge de hombros – cosas de chicos – agarra sus cosas y se despide
Nos vemos en la fiesta – cierto la fiesta, no lo había pensado. ¿Qué me pondré? Y peor; no he pedido permiso. Escaparme tendrá que ser, no creo que papá me deje salir; será la vieja confiable.
Ya eran como las 8:00 pm, papá y Míriam ya dormían, era hora de aprovechar para alistarme y salir por la ventana. Solo estaba usando un maquillaje casual; no tan exagerado, un vestido con un par de botines que hacían juego.
Traté de bajar por las gradas lo más silenciosa posible hasta llegar a la puerta, Salí de la casa sin hacer el mayor ruido. Afuera me esperaba Kylie en su carro, con dos chicos.
¿Es nuevo? – pregunto mientras cierro la puerta.
Sí, papá lo compró con la plata del divorcio. Cierto, te presento a Cameron y Hassel; son hermanos – Cameron era un toque más Moreno que Hassel, los dos tenías ojos color caramelo y el cabello rizado negro, además de una contextura delgada.
Llegamos a la casa de Bryce, la fiesta ya estaba comenzando. Vimos a Mike llevar unas botellas, volteo a vernos un momento y luego ingresa a la casa.
Qué le pasa, no nos saludo. Estará molesto – deberíamos de entrar, no crees –
Tienes razón – Kylie, los otros chicos y yo bajamos del auto.
Era una casa enorme, en el patio de adelante se encontraban unos columpios y mesas; seguro era para los hermanos pequeños de Bryce. Hassel abre la puerta, unos chicos lo saludan como si se conocieran hace tiempo. Veo a uno de lejos antes de que entre a la casa sentado y cuando ingreso, nuestras miradas se cruzan; fue cuando supe que todo cambiaría.
Su rostro era imposible de olvidar, sus ojos negros; esa mirada tierna que tenía y cabello rizado, además de sus labios carnosos. Me quedé helada, como si hubiésemos hecho clic.
Kylie – tocó su hombro hasta que me hace caso – sabes como se llama aquel muchacho con el suéter azul – se lo digo en voz baja.
¿Quién? , ¿el ruloso? – asiento con la cabeza – es Daniel Carter