Capitulo 38.

Estaba seguro, no había error alguno, era él, mi corazón me lo decía, a pesar de que su apariencia cambió totalmente, era mucho más alto de lo que antes fue, también tenía más musculatura y, su cabello, su hermoso cabello gris, peinado de lado, alborotado pero ordenado, le cubría parte de la cara, su cara, antes tierna y gentil, ahora es rígida, se volvió maduro y, sus ojos tiernos, que te derretían el corazón, ahora son afilados. 

No podía controlar lo que pasaba en mi interior, estaba totalmente paralizado, estaba emocionado, así que decidí acercarme y hablar con él, estaba vez, estaba totalmente seguro de que era él. 

Me dispuse a acercarme. 

–Julián: ¡Oye! ¡Ritsu! - grité con lo que mis fuerzas me permitieron, él se viró bruscamente y tenía los ojos tan abiertos, parecía petrificado, su expresión mostraba cuán asombrado estaba. 

–Tú, ¿cómo sabes ese nombre? - me dijo con tono serio pero asustado, su voz se había hecho más gruesa - responde, ¿Cómo sabes mi... 

–¡Yun! ¡Ya volví! ¿Me extrañaste? - un hombre de conflexion frágil lo interrumpe, se aferró a su brazo, ese hombre sonreía tanto, me detuve en seco, ellos estaban vestidos igual  - ¿Eh? ¿Quién es él? Yun. - dijo de nuevo el hombre. 

–Julián: ¿Yu..  Yun? - la mirada de Ritsu cambió totalmente, antes era amenazante y fría, ahora se volvió dócil, miraba al hombre con cariño. - Tu... tu nombre es ¿Yun? 

–Sí, mi nombre es Yun, si me disculpas, tengo que irme. 

–Yun, ten tu café.

– Yuang, me asustaste. 

–Yuang: Lo siento, pero no me has respondido ¿Lo conoces? 

–Yun: No, no sé quién es. 

Él y su acompañante pasaron justo a mi lado, el hombre que se hace llamar Yun, me vio con unos ojos tan fríos, que me sentí helado, escalofríos recorrieron todo mi cuerpo, sabía que era él, lo sabía, pero no entendía que estaba pasando, ¿Yun? Por qué le llamó Yun... 

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–Yuang: Siento que me mientes, ¿De verdad no lo conoces? El pareció muy confundido y también parecía estar seguro de que te conocía. 

–Yun: No, no lo conozco, no lo he visto nunca. 

–Yuang: Bueno, te creo entonces - dijo mientras seguía colgado del brazo de Yun.

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*Cafetería* 

Después de que ambos hombres se alejaran, me quedé parado fuera de la cafetería, el pecho me dolía con intensidad, no pude sostener mi peso así que me puse en cuclillas aún lado, llevé mi mano en el pecho, mi corazón estaba totalmente descontrolado, la mirada de ese hombre no salía de mi mente, está vez, no fue como antes, estaba vez si era él, estoy seguro, reconocería a Ritsu dónde sea que lo viera, incluso aunque su apariencia haya cambiado totalmente. Sentí húmedas mis mejillas, estaba llorando de nuevo.

Ray salió de la cafetería y me encontró de cuclillas a un lado.

–Ray: ¡Julián! ¡¿Qué pasa?! ¡Lewis, ven! - dijo alarmado. 

Sin pensarlo lo tomé de las mangas y tiré fuerte de ellas. 

–Julián: Lo ví... Era él, estoy seguro que era él... Está aquí, Ray... 

–Ray: ¿De qué estás hablando? 

–Julián: ¡Ritsu! ¡Ritsu está aquí! Está en esta ciudad, me encontré con él.   - Ray me vió con asombro. 

–Ray: Julián, creo que te confundiste, no es posible que Ritsu esté aquí, no se ha comunicado en cuatro años, no sabemos qué pasó con él.

–Julián: ¡Ray! Te digo que lo ví, me encontré con él, hablé con él, estoy seguro que es Ritsu, aunque no me reconoció... A cambiado tanto, tengo que encontrarlo de nuevo, esperé cuatro años para verlo, no puedo dejarlo ir de nuevo. 

–Lewis: Ray, no parece estar confundido, creo que en verdad lo vio y, ¿De verdad crees que es imposible que sea él? No se ha comunicado en cuatro años, pero eso no quiere decir que esté muerto o algo así, es posible que esté aquí... 

–Ray: Entonces, nuestro amigo... ¡Ha vuelto! 

–Julián: Ritsu ha vuelto - aunque no sé por qué se hace llamar Yun... Omití esa parte a los demás. 

–Ray: Sí permanece en esta ciudad, nos encontraremos con él pronto. 

No creí que fuera tan pronto. 

Después de eso, me fui a casa, no pude dormir, estaba emocionado, confundido y en cierto sentido estaba triste, quería verlo, quería hablarle, el no me reconoció, tenía tantas preguntas en mi mente, ¿Por qué ese chico lo llamó Yun? ¿Quién es ese chico? ¿Por qué estaban vestidos iguales? ¿Qué tiene que ver ese chico con Ritsu? Qué fue de él después de que se marchó; esas preguntas llenaron mi mente, no dormí nada esa noche. 

Al amanecer la misma rutina de todas la mañanas se repitió. Llegué a la escuela, el bullicio estaba aún peor que el día anterior.