14. Siempre tú

Ha pasado un mes desde la última vez que vi a Alexander, hoy desperté con el sentimiento de querer verlo, no sé si me necesita o el porqué de mi sensación tan extraña.

-Buenos días hermosa- con un beso en los labios me sorprende George.

-Buenos días, George- contesto soñolienta.

Desde esa tarde que me despedí de Alexander, tomo la iniciativa de estar con George, nos mudamos a su cuarto, ya estamos durmiendo juntos, compartimos las labores de la casa e incluso en la cafetería somos un gran equipo.

-Al fin domingo- dice levantándose de la cama.

Miro el reloj son las 11 am, recuerdo que anoche se nos pasaron los tragos en el bar del pueblo, fuimos con unos amigos suyos y nos la pasamos genial.

- ¿Qué quieres desayunar bella mujer? - pregunta mientras se pone una playera

-Lo que quieras- contesto tumbada en la cama.

Se sale del cuarto y va a preparar un desayuno, aprovecho para revisar si tengo algún mensaje de Alexander, porque después de un mes sin tenerlo en mis pensamientos tiene que volver a mi.

Mensajes 1. Respiro y lo abro.

Querida Chelsea

Se que hace un mes no sé nada de ti ni tú de mí, pero te mando este mensaje por que anoche estuviste en mis pensamientos, no puedo borrarme tu recuerdo de mí, esos labios que pude besar, simplemente siempre tú solo tú serás la dueña de mi corazón, te aviso que el próximo sábado iremos al pueblo a entregar las invitaciones de la boda, espero verte.

Allex@nd3r

Me llamo con sus pensamientos. Tendré que hacer algo para no verlo.

Salto de la cama y me dirijo a la cocina.

-Huele delicioso- digo acercándome a George, lo tomo por la espalda.

- ¿Qué pasa? – pregunta.

-Sabes, estaba pensando en hacer un viaje- digo entusiasmada.

- ¿Un viaje? - parpadea tratando de entender mi propuesta.

-Si, no lo sé, el próximo fin de semana, tal vez tu y yo escaparnos por ahí- digo pícaramente.

-Me suena bien- dice – de hecho, el próximo sábado es festivo así que podemos cerrar desde el viernes por la tarde- agrega.

-Perfecto- dándole un beso en la mejilla.

Hoy domingo nos disponemos a descansar, fue un mes pesado así que solo queremos estar en el sofá viendo Netflix.

Preparamos el desayuno, unos ricos pan francés con malteada, acostada en su pecho quedo a gusto, me encanta escuchar el latido de su corazón, realmente me estoy enamorando de George, lo veo, me encanta sus ojos verdes, su oscuro cabello, sus carnosos labios.

- ¿Qué pasa? - pregunta cuando me descubre mirándolo en silencio.

-Solo veo cuan guapo eres- contesto.

Se pone rojo y me empuja hacia el para darme un beso, en medio del momento empezamos a acariciarnos, cuando suena el timbre.

- ¿Quién será?

-No esperamos a nadie- dice

Por mi mente ruego que no sea Alexander.

-Georgie- escucho la voz de una mujer.

-Grecia- responde él.

¿Grecia?, diablos su hermana, así que me acomodo la pijama y el cabello.

Veo que entra una chica hermosa, piel blanca ojos azules con cabello rojizo.

- ¿Y tú quién eres? – me pregunta cuando me ve parada al lado del sofá.

-Chelsea- contesto apenada.

-Lo siento, tenemos tanto sin hablar que olvide decirte que vivo con una chica- dice apenado.

-Excelente- dice mirándome de pies a cabeza.

- ¿Gustas algo de tomar? - pregunto.

-Si, por favor- contesta mientras mete unas maletas al apartamento.

Me acerco a la cocina para servirle jugo.

- ¿A que debemos el honor? - pregunta George.

-La boda de Chloe- dice.

- ¿Como sabes? – pregunta George asombrado.

-Me llego una invitación electrónica, me dijo Chloe que vienen el próximo sábado así que vine para verla- dice mientras da un sorbo al jugo que le serví.

George y yo nos miramos sin decir nada.

- ¿Te quedaras aquí? - pregunta George.

-Obvio es mi casa también ¿no? -

-Si, bueno solo mía, pero aun esta tu cuarto- termina George.

-Y desde cuando viven juntos- levanta la ceja mirándonos.

-Desde hace un mes- contesta George mientras me abraza.

- ¿Un mes?

-Si, yo trabajo con él también.

-Ah, ya veo, bueno me iré a descansar por que el vuelo estuvo pesado- se levanta deja el vaso en la mesa de la sala.