Después de un mes sin parar en la cafetería y con mi nueva vida, olvido por completo que hace casi 2 semanas debía tener mi periodo.
-Tengo que salir un momento, no me tardo- le grito a George desde la caja registradora ya que él se encuentra en la cocina mientras corro a la farmacia.
-Buenas tardes, me podría por favor dar un par de pruebas de embarazo- pido un poco acelerada.
-Claro- dice la chica del mostrador.
En cuanto me da las pruebas, pago y salgo corriendo al departamento, llego un poco cansada pero aun así corro al baño y me hago la prueba, por cualquier cosa dudosa, me compre 5. Espero la primera y claro sale un positivo. Tomo las demás y hago lo mismo, en las 5 sale positivo, sonrió de emoción y de miedo.
Como le diré a George. Pienso.
Guardo las pruebas en un cajón y salgo en dirección a la cafetería.
- ¿Dónde estabas?, los oficinistas llegaran- pregunta un poco atareado.
-lo sé, ya me apresuro.
Terminamos la tarde con buenas ventas, pues la oficina administrativa se estaba expandiendo y llegábamos a tener hasta 50 personas de 2 a 5 de la tarde, esa tarde cerramos a las 6 y salimos a la plaza por un evento de caridad que había.
Veo a lo lejos un puesto con diferentes cosas para bebé, así que distraigo a George y corro a comprar unas cosas, elijo unos guantes y unos zapatos junto a una cajita, la aguardo en mi bolsa de mano y regreso con George. Nos quedamos a ver los juegos, comemos y bailamos, nos divertimos mucho esa tarde con todos en el pueblo.
Llegamos al departamento y corro al cuarto, saco una prueba y la pongo en la caja.
-George- digo, pero no lo veo en la sala.
Veo que en el pasillo habla con una persona, pero no tomo importancia y me quedo en el sillón esperándolo.
Entra de regreso a mí, pero con una cara tenebrosa.
- ¿Pasa algo? -pregunto asustada.
-Chloe, se suicidó en la cárcel.
-Dios mío- me llevo las manos a la boca, pero por completo olvide la sorpresa y dejo caer la caja.
George se agacha para recogerla- ¿Qué es? – pregunta.
-Nada se la arrebato- pues no creo sea un momento para decirlo.
-Dime que es, por favor- pide así que le entrego la caja y mi corazón se acelera. Su cara se llena de lágrimas y felicidad-Seremos padres- dice abrazándome y levantándome.
-Sí, lo supe hoy en la mañana- digo llorando de felicidad.
-Es la mejor noticia del mundo, mi amor- dice mientras recorre mi cara de besos y baja a la barriga.
Decidimos no decirle a nadie para poder revelar el embarazo de una manera muy especial.
-Si lo decimos en tu cumpleaños- propone.
-Me parece perfecto, será en 15 días, así que podemos preparar todo- digo feliz.
Pasan los 15 días y estamos en la cafetería esperando a todos los invitados, que en ellos esta, la reina, Beltrán, Grecia y Noah, los locales del pueblo, me siento muy feliz, pues aún es increíble que dentro de mi tenga una vida creando.
Bailamos, cantamos y en un momento decidimos hacer la revelación de mi embarazo.
-Tenemos algo que decirles- dice George llamando la atención de todos, así que todas las miradas se dirigen a nosotros.
-Hace más de 4 meses que nos casamos, y estamos agradecidos con Dios, la bendición de tener a todas las personas que nos quieren el día de hoy celebrando un año más de vida de Chelsea, ella la luz de mi vida- suspira -me ha dado la mejor de las noticias, y es que estamos embarazados- dice con una sonrisa inigualable.
Se escuchan los gritos de emoción y los aplausos. De reojo veo que entra una persona y al voltear, veo que es Alexander.
Mi corazón late y corro a abrazarlo-Felicidades por tú embarazo- dice con un regalo en su mano.
-Gracias Alex- lo miro coquetamente, pero disimulo.
George se acerca a nosotros y nos separa el uno del otro -Que gusto que vinieras- dice entre dientes.
-Gracias, pero bueno no vengo solo- y entra una chica, con piel de porcelana, con ojos castaños y cabello rubio, con una sonrisa de ángel, de reojo veo como George la mira sin parpadear y le doy un codazo.
-Tú eres- digo sin quitarle la mirada a George.
-Me llamo Megan- dice dulcemente.
- ¿Y son pareja? - agrega George preguntando.
-En eso estamos- dice Alexander y la toma de la cintura arrimándola a él.
-Bien... Bienvenidos, pasen a mi fiesta de mi cumpleaños- digo un poco celosa.
Paso la tarde viendo cómo se coquetean uno al otro y admito que siento un poco de celos, pues George también muestra interés en la chica, tanto que ya iban 6 vueltas que daba por la mesa para saber si todo estaba bien.
-Creo que ya es mucho no- le lanzo una mirada amenazante a George.
Editado: 01.04.2021