Tan inalcanzable

Capitulo 23 Juntos

La señora Lexter nos pide que nos quedemos en su casa por esa noche ya que ella le pidió a los oficiales que vinieran a su casa a tomar la declaración de Vanessa para que ella se sintiera más tranquila y a salvo.

Nos deja saber que la habitación esta lista y una de las sirvientas de la casa nos muestra el camino, llevaba a mi bella de la mano, no quise despegarme de ella desde el instante que la vi otra vez, ella no ha intentado resistirse a mi cercanía.

 

Seguimos a la sirvienta y nos abre la puerta al final del pasillo. Entro con Vanessa y espero a que se sienta cómoda o que quiera hablar.

 

-Gracias por venir hasta aquí por mí.

-Como no lo haría hermosa, si tu eres todo lo que quiero.

Ella me ve a los ojos cuando estoy respondiéndole, y eso me gusta pues quiero que vea mi sinceridad.

-¿Cómo puedes saber eso, y que no cambiaras de parecer en unos días?

-Vanessa no se quien te causo tanto daño que eres aséptica a que alguien sienta algo por ti. Pero quiero que sepas que mis palabras son verdaderas. Cuando te dije que te amo es porque así lo siento.

-No nos conocemos, no sabemos casi nada el uno del otro. No es algo rápido de tu parte.

-No lo creo así, se que no nos conocemos mucho, pero lo que yo he visto de ti me gusta y no me importa lo que hayas hecho ni con quien hayas estado. Solo te quiero a ti a la Vanessa que conocí en la reunión con Jenkins.

-Quiero darme la oportunidad de que nos conozcamos, quiero saber tanto de ti como tú de mí, para que si en verdad podemos llegar a ser algo sea por que amamos tanto lo bueno como lo malo del otro. ¿te parece?

-Me encanta la idea, aunque no habrá nada que no me guste de ti.

-¿Dónde te quedaras esta noche?

-Aquí contigo.

-Claro que no, eso no es apropiado. Aparte no tengo nada que ponerme mi maleta se quedo en el cuarto de Rinaldi.

-Puedo ir a buscarte algo de ropa y Vanessa, no temas de mi nunca intentaría hacer algo que tu no quisieras. Solo quiero cuidarte, déjame quedarme contigo.

 

Escucho que tocan la puerta y la abro, es la señora Lexter.

 

-Vanessa querida, se que no vas a poder dormir con ese vestido, te traje un pijama y a ti también Ashton.

-Muchas gracias Paola, no te hubieras molestado. Has hecho ya demasiado por mí.

-No es nada mi niña. Los dejare para que descansen. Pasen una feliz noche ambos.

 

Nos deja solos de nuevo y veo a mi hermosa pensativa.

-¿Qué sucede? ¿necesitas algo? O ¿te sientes mal?

-No pasa nada, solo pensaba en que si esto no hubiera pasado estaría en Mónaco y no aquí aun sintiéndome nerviosa porque Rinaldi anda por ahí suelto.

-Ya lo atraparan y mientas yo este contigo no dejare que ese imbécil te haga daño.

-Gracias Ashton.

 

La veo ir directo al baño y solo quiero darle su espacio, quiero que se relaje.

 

 

Relatado por Vanessa

 

Ashton llega a la casa y siento un nudo de emociones cuando lo veo, quiero llorar, abrazarlo. Pasan una y mil cosas por mi cabeza.

Siento su abrazo y no puedo hacer mas que abrazarlo con la misma intensidad, necesitaba tanto verlo y sentirlo cerca. Sollozo un poco en sus brazos y el no lo evita, se limita abrasarme.

En un momento sin darme cuenta me besa, un beso tierno pero lleno de amor. Un beso largo en el que puedo sentir su aprecio, yo correspondo, pues se que es simplemente lo único que necesito para sentirme aún más a salvo.

 

Veo que Paola voltea a ver a otro sitio pues no quiere que sintamos su presencia, y aun que me avergüenza un poco, no puedo evitar lo que esta pasando. Realmente quería hacerlo.

Me separo un poco de Ashton y los presento, el saluda cordialmente y Paola hace una pequeña broma para romper el hielo, Ashton me tiene tomada por la cintura y es muy lindo y sutil conmigo, como ha cambiado todo de un momento a otro.

Como es que una situación tan desagradable como la que viví esta haciendo que quiera estar aún más cerca de Ashton que antes.

Paola nos invita a quedarnos y aunque al principio digo que no ella me recuerda que mañana vendrán a tomar mi declaración aquí, ya que ella lo solicito así para que me sintiera segura.

Ella es realmente agradable, es una mujer muy buena a la que le debo estar ahora a salvo y no con ese hombre salido de sí.

Nos llevan a la habitación y noto que nos han dado una para los dos.

Le pregunto a Ashton donde se quedará y me dice que aquí conmigo, siento un poco de nervios pues no he dormido con nadie desde Timothy, me dice que no tenga miedo, pues no hará nada que yo no quiera, lo que el no sabe es que yo quiero todo con él, pero debo llevar las cosas con calma, no quiero que nos hagamos daño.

 

Recuerdo que no tengo mas ropa que el vestido de noche que llevaba para la cena, es un poco revelador en la espalda y no creo que sea cómodo para dormir, pero no hay más. Y no podre dormir en bragas pues el dormirá en la habitación.

Un momento más tarde Paola llega a la habitación y nos lleva un para de pijamas, agradezco tanto el gesto, pues ahora al menos dormiremos mejor.

Ashton me ha dicho que me ama, y yo siento un gran cariño por el pero aun no se si lo amo o solo es atracción, no quiero contestarle algo erróneo, no quiero mentirle. Si en algún momento siento que lo amo se lo hare saber.

Le digo que no quiero que se aburra de mi o que simplemente se le vaya el gusto y me dice que no, confió en que así sea o será una desilusión más, pero estoy decidida a dejarme llevar por este sentimiento.

Me meto a la ducha, quiero quitarme cualquier rastro que sienta en mi cuerpo del roce de las manos de Rinaldi, y relajarme después de este día tan lleno de altibajos. Primero Timothy con sus arrepentimientos y después el señor Rinaldi y sus locuras.




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