- No con todas, pero si conmigo - Dijo estaba echa una fúria. - Espera aqui voy a explicarte todo- Le dije a Alabama y ella impactada volvia a sentarse - Y tu, ven comigo - Le dije a Ayra tomándola de la mano para llevarla al balcón.
- Que estas haciendo? a que juegas? - Le dije cabreado.
- Le estoy diciendo la verdad, te estoy haciendo un favor - Dijo encoguiendose de hombros.
- Y quien te dio el derecho de tomar decisiones que son mías? Decisiones que no te conciernen? Explicame? -
- Y quién te dio derecho a besarme anoche? quien te dio derecho a interrumpir mi show? a atravesarte en medio? a quitarme mi teléfono? - Grito enojada, ni supe que responderle. Probablemente todos escucharon, no era una conversación normal estábamos bastante alterados.
-Calmate! No todos tienen que saber nuestros problemas - le dije intentando calmarla pero solo la cague más.
- No te preocupes, saldré ahora mismo y te arreglaré tu vida nueva perfecta. En la que no encajo. Me voy pero entonces no quiero que aparezca nunca mas en medio- Dijo llorando mientras salía del balcón y se acercaba a Alabama.
- No hagas caso a nada de lo que dije, Soy una persona inestable emocionalmente.e sentí celosa de ti y de la vida tan genial que tienen. Sean felices- Dijo y Alabama la miraba confundida. - Nolan, Rebecca, un gusto Adiós- Agregó para salir de la casa supongo que mi madre la esperaba en el. auto.
Golpee la baranda, antes de salir.
- Mylas, que esta pasando puedes contarnos - Dijo Alabama preocupada.
- No es nada, estamos teniendo un muy mal momento. Quiero disculparme contigo y con todos, ella no es así- dije pero me sentía demasiado incómodo para seguir hablando del tema.
-Esta bien bro, nosotros entendemos, no es momento de urgar en la herida, Ya abra tiempo para hablar - Dijo Nolan apoyándome y Alabama cedió.
-Después hablare con ella cuando esté mas calmada, parecía muy afligida - Dijo y yo asentí - Lo está y yo también, ella es muy importante para mí - Confesé
- Si es importante para ti, lo es para nosotros, tranquilo Mylas, porque no vamos al bistro? respirar aire fresco y buena comida siempre es un buen plan - Dijo Becca y todos concordamos en que era buena idea.
Salimos de Casa a comer y a relajarnos. Pero se me hizo casi imposible estar tranquilo. No dejaba de pensar en Ayra. Así que después de enviarle un par de mensajes a mi madre preguntándole por ella y no recibir respuesta fue el impulso necesario para ir a casa.
-Mylas estas bien? - Cuestionó Nolan sacándome del limbo en el que me encontraba.
- Si, lo estoy pero debo irme chicos lo siento - dije levantándome de la silla
- Hoy es viernes, vas ir a dormir a casa!? - cuestiono Alabama y yo asentí. Ella sonrió y se despidió de mi.
Me monte en el auto y conduje a casa. Llegué y sentí tranquilida al ver a mi madre cocinando y a Ayra dormida en el sillón.
- Llegaste - Dijo madre con cara de pocos amigos, asentí con la cabeza. No tenía ganas de discutir. Saqué la jarra de agua y me serví un vaso.
- Puedes hacerme un favor? - Dijo mientras seguía cortando el pimentón.
-Si, que necesitas - Dije para después beber mi vaso de agua.
- Ve a la farmacia y trae esto- Dijo entregándome una lista.
- Te sientes mal? - cuestione nervioso. Ella me volteo la mirada. - Ayra se siente mal? - cuestione nuevamente y ella no respondió solo suspiro de fastidio y yo entendí que eso estaba sucediendo. Corrí al mueble para tocarla, y me di cuenta que ella tenía mucha fiebre.
- Raquel ella tiene mucha fiebre - le dije preocupado y mi madre se acercó rápidamente.
- Ay si, es cierto - dijo mi madre preocupada. - Ve a la farmacia Mylas - Agregó y yo me negué.
-Ve tú por favor, yo me encargo - me sentía extremadamente culpable. Ella se había resfriado por mi culpa.
-No estoy segura, ella no quiere verte ni en pintura, la única razón por la que estamos aquí es porque no hay vuelos hasta después de navidad. La convencí de quedarse hoy, pero mañana buscaremos un hotel -
-Siempre peleamos, porque estan exagerado todo- Le dije y mi madre me miró confundida.
-Mylas si siguen lastimandose de esta forma su relación va a quedar irremediablemente rota. - Mi madre tenía razón.
-Ella ni siquiera se ha disculpado - Dije enojado.
-Y tu te disculpaste? has visto como eres ahora? es culpa de Ayra o es tuya? - me quede callado, sentía que era todo culpa de Ayra, pudimos tener una historia diferente. - Sabes todo lo que ella hizo para llegar aquí? - cuestiono defendiendola parecía su madre en vez de la mía.
-Nadie me lo ha dicho, como podría saberlo? - Dije enojado
- Pues entonces dejen de pelear, hablen, pero sobretodo escuchense- Dijo tomando su cartera. - Voy a la farmacia, coloca paños de agua tibia mientras regresó - Dijo preocupada mientras salía de la casa.
Apenas coloque el paño de agua tibia en su frente, ella abrió los ojos. - Déjame en paz Mylas de verdad no quiero verte aunque muera - Dijo levantándose del mueble y tomando sus cosas. Se tambaleó un poco mientras intentaba coger su mochila. Ella era demasiado terca, me lamenté de no haber ido yo a la farmacia. Hacer que se quedara iba a ser un gran lío.
- Por favor solo un minuto, hasta que Raquel vuelva de la farmacia - Le suplique.
- Sientes lástima por mi? eso fue lo que sentiste siempre? - dijo mirándome fijamente los ojos. Como se atrevía a pensar eso. Siempre le demostré mi amor de todas las maneras posibles.
- La fiebre te esta haciendo delirar, como te se te ocurre decir esas cosas, siempre has sido mi princesa - le dije quitándole el bolso. Ella se recostó nuevamente en el mueble.
- Siempre fui tu princesa, ahora soy solo tu mejor amiga de Beaufort. Te gusta en serio esa chica?- cuestiono refiriéndose a Alabama.
-Somos amigos, la quiero mucho- le dije con sinceridad.
-Ella es muy bonita, también parece ser buena persona, ni siquiera puedo decirte que me cae mal. La odio solo porque ahora te tiene- Confesó mientras temblaba al sentir el contacto del paño con agua en su frente.