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¿Que mierda hacía Charles en mi casa? ¿por que tenía que ir sin avisar? ¿Por qué justo cuando todo estaba sucio y desordenado? ¿por qué cuando apareció Bella?

Estaba demasiado enojado. Llamé a Alabama.

-¿Hola tú como te fue? Estamos comiendo helado - Ella estaba animada.

- Una mierda, mi vida es una absoluta mierda. Charles esta en casa, por favor vengan ya, estoy esperando afuera del auto- Colgué la llamada y comence a golpear el techo de mi carro. La frustración se había apoderado de mi.

Si Charles estaba ahí y era porque iba querer llevarse a Jade. No podía permitir que eso pasara. Se que no estaba dándole la vida que ella merecía. Pero estaba esforzándome. Nos estábamos llevando mejor. Ella incluso me había dicho que me amaba...

Volví a golpear el techo del auto.

- Deja de hacer estupideces, vas a lesionarte una mano y entonces tendrás un problema más. ¿Te gustan los problemas? - 
Alabama apareció de la nada estaba bien enojada.

- ¿Mylas estas enojado? - Jade me miró confundida. No quería hacerla incomodar. Ni siquiera me di cuenta de que ellas estaban ahí cuando comencé a actuar como un loco desquitandome con el techo de mi auto.

- Estoy bien, estaba practicando para una clase de boxeo-  Fue la excusa mas horrible que se me ocurrió. Eso fue super incoherente. Alabama me miró con cara de desagrado, sabía lo que estaba ella pensando le hice una seña de que mantuviera la boca cerrada.

- Ni siquiera vas a clases de boxeo- Jade contestó tan perspicaz como siempre.  Alabama se burló, no pudo evitarlo.

-Ahora iré, solo sube al auto, Charles esta en casa tenemos que irnos - Sus ojos se llenaron de un brillo inexorable al escuchar que Charles estaba en la casa.

Su reacción me rompió el corazón. Sentía que lo amaba mas que a mi.

- ¡siiiiii! Papá Charles al fin vino a verme, eso es genial Mylas estoy muy feliz. ¡Vamos rápido a casa por favor! -  Una puñalada tras otra. De paso le decía papá, él ni siquiera era su familia real.

- Se lo que estas pensando, ni se te ocurra decirle eso - Alabama me detuvo de decir algo de lo que me pudiera arrepentir para siempre. Le abrocho el cinturón a Jade y le dio un beso para despedirse y luego cerrar la puerta del auto.

-Estas nuevamente en mi lista de amigos, te quiero - Alabama le lanzó besos a través del vidrio ella estaba emocionada. Incluso parecía que me estaba ignorando.

-Cambia esa cara, todo estará bien habla tranquilamente con él, al final son familia - Dijo por fin dirigiéndose a mi.

-No somos familia, él no era el verdadero padre de Ayra, no la quiso nunca hasta que se enteró que se estaba muriendo. Y de paso quiere quitarme a mi hija. ¿De verdad crees que somos familia? - Solté sin reparos. Estaba destilando veneno.

- Mylas, Ayra lo perdono, tú no eres nadie para juzgar a ese señor. Deberías estar agradecido de que ama a tu hija. Si esta aquí es porque como todos estamos preocupados por ti, pero sobretodo por ella- No podía creer lo que estaba escuchando.

-¿Tu también estas preocupada por mí? ¿También crees que soy un mal ejemplo para Jade? ¿O que no la cuido bien? - Le grite por primera vez en mi vida, estaba completamente sorprendido de que ella que me apoyaba en todo estuviera diciéndome todo eso.

- Creo que no estas entendiendo nada. Ahora mismo la rabia te ofusca. Ve a casa habla con Charles y después cuando estés calmado me llamas - Ella me entrego la llave del auto y se fue enojada.

- ¡Como quieras! - le grite enojado por  su actitud y  cerre con fuerza la puerta del auto. Encendí el motor y arranque rápidamente.

- Ella esta enojada contigo porque tienes una novia que no es ella - Jade intervino después de que estuvimos los dos en silencio casi que la mitad del camino.

- Te dije mil veces que Bella no es mi novia. Se lo dije a ella también ¿por que nadie me esta escuchando? - Grite, no me sentí orgulloso pero tampoco podía manejar todo lo que estaba sintiendo. Ella comenzó a llorar.

- No me gusta que grites Mylas - me arrepentí de imediato. Alabama tenía razón, estaba ofuscado. Tenía que calmarme.

Respiré hondo y agredeci a Dios que ya habíamos llegado. Estacione el auto, y baje rápidamente para sacarla de ahí.

-Lo siento mucho amor, no quería gritarte- Desabroche su cinturón, ella ya no estaba llorando. Estaba mas bien enojada, ni siquiera me miraba - Tengo miedo, no quiero que me dejes - Le confesé, estaba demasiado conmovido, tanto que los ojos se me llenaron de lágrimas.

- Pero no voy a dejarte Mylas, solo por favor no grites que me asustas - Ella me miró y yo no pude evitar sonreír. Era tan perfecta, tan hermosa, tan pequeña pero tan grande al mismo tiempo que me desbordaba el corazón. Ella era mi bastón cuando iba directamente al suelo, la luz en las noches mas oscuras, la cuerda para subir del abismo. Ella era todo para mi.

-lo siento, amor de verdad lo siento - Ahi estaba conteniendo las ganas de llorar como un tonto frente a mi hija de casi 5 años que parecía estar mas estable que yo.

- ¿Quieres un abrazo de reconciliación ? - ella preguntó extendiendo  sus manos y yo sin dudarlo la abrace con fuerza.

-Te amo - Dije besando su frente, ella sonrió.  La baje del auto seque sus lágrimas y arregle su cabello. También hice lo mismo conmigo. No quería darle más razones a Charles para que siguiera haciéndome sentir incompetente.

-Lo sé, también yo lo hago - dijo ella mientras subía las escaleras cantando. Así era Jade, pasaba de un extremo a otro sin dejar ni un rastro visible.

- Se que lo sabes, pero me gusta decírtelo - le dije y ella sonrió efusivamente. Como cuando era mas pequeña y me hacía ojitos después de hacer una travesura. Sonreí también al recordarlo y luego abrí la puerta del departamento.

Un olor apestoso salió de inmediato. Olía a vómito, licor y basura al mismo tiempo. La alfombra asquerosa estaba a un lado se la puerta y la casa estaba completamente desordenada, zapatos, juguetes, medias, libros, platos sucios. Y Bella de plus con una cara de muerta sentada frente a Charles cuya cara tenía una expresión de furia.