12.

Ella estaba tan preocupada como confundida. Hice un esfuerzo para sonreírle. Se puso extremadamente seria, tenía el ceño fruncido y los brazos cruzados mientras me asesinaba con la mirada. Mire al suelo, de verdad no podía ver su cara. Sentía vergüenza y miedo de que estuviera enloqueciendo.

Me despedí con la mano. Media vuelta, dos pasos y al suelo. Eso fue lo que resisti. Ella se acercó nuevamente.

-Estoy bien, te dije que puedo solo. vete. -

- No logró entenderte. ¿Porque te tratas de esa forma?. - Ella me volvió a dar la mano. No quería tocarla, la rechacé.

- ¿Quieres dinero para el taxi? - Le ofrecí dinero y ella me golpeó la mano. Estaba actuando como un imbécil pero sino lo hacía ella no iba irse porque sabía que sentía que me lo debía.

- No necesito tú dinero, solo quería devolverte el favor porque realmente necesitas ayuda. Pero has lo que quieras Mylas Blake. Sigue cuidado de todos menos de ti mismo. - Ella saco de su bolso todo el dinero que tenía y me lo aventó. Supe que era todo porque dejó caer incluso las monedas. Les juro que no se porque razón eso me causó risa.  

Ella se enfureció aun más - Ya esta, como las cosas en esta vida se arreglan con dinero pues toma todo el mío y ve por un helado. No te debo nada- Se dio media vuelta y como comenzó a dar enormes pasos hasta alejarse. Me sentí mal por ella, incluso había perdido su trabajo por traerme aquí. Pero no podía tenerla cerca, tampoco quería confundirla.

Suspiré de alivio, ser un imbécil  no era precisamente mi estilo, pero en esta ocasión me había ayudado. Me volví a levantar y  esta vez conseguí por lo menos entrar a la planta baja del edificio. Aún así sabría que no llegaría más lejos. El elevador aún continuaba en reparación y subir dos pisos en este estado sería una odisea. Preferí sentarme en el suelo a un lado de las escaleras. Recorde que Bella dijo que si dormía me sentiría mejor, asi que dormiría un poco y después cuando me sintiera mejor subiría hasta mi departamento. Cerré mis ojos.

- ¿No  te da vergüenza? Vas a asustar a los vecinos cuando vayan a trabajar y te vean borracho durmiendo aquí atravesado - Abrí los ojos y la miré con fastidio. No podía creer que hubiera regresado después de lo  hace rato.

- ¿Por que estas aquí, acaso no te dije que te fueras? -  Le reproche.

- Lo sé, es que en mi arranque de ira te di todo mi dinero - Ni siquiera lo había tomado,  seguramente otra persona vio el dinero en él suelo y lo recogió pensando que era su día de suerte. Suspiré hondo. ¿Ella no entendía que me sentía mal? supone que iba a ayudarme no a darme problemas.

Me sonrió de la misma manera que Jade lo hacía cuando hacía alguna travesura. Y después se sento a mi lado.

- Puedes tomar el mío si lo necesitas - Cerré los ojos. Podía hablarle con tranquilidad si no la miraba.

- No tengo a dónde ir ¿ Puedo quedarme? -

-Asustaras a mis vecinos cuando vayan a trabajar- Use sus mismas palabras en su contra. La verdad quería decirle que prefería que se fuera.

-Ellos no me conocen, no importa lo que piensen de mi-  Soltó sin reparos.

-Dirán que eres mi novia ¿eso es lo que quieres que todos piensen?- Ella no me respondió, Decidí aclararle de una vez - por favor voy a suplicarte que respetes mi espacio, pero que sobretodo no te hagas ilusiones. Pareces de las que creen que encontrarse varias veces con la misma persona es una señal de amor, o del destino. Nada de eso existe Bella. El amor solo se vive una vez y ya yo lo viví... En cuanto al destino, ese es pura mierda- Ella recostó su cabeza en mi hombro. Me sentí indignado,  le estaba hablando de espacio  y distancia y ella parecía no entenderlo estaba haciendo todo lo contrario.

Abrí los ojos para enfrentarla. Ni siquiera estaba dejándome pasar mi borrachera tranquilo. Pero ella estaba dormida... Profundamente dormida incluso estaba roncando. Fue gracioso.

- De verdad quería que escucharas eso que te dije, tengo el mal presentimiento de que vas a traer mas caos a mi vida -  Me dormí también luego de decirle eso.

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- Esto es inaceptable,  puedo entender lo del elevador. Pero ahora tenemos indigentes durmiendo dentro del edificio. ¿Que clase de condominio es este? - Los gritos de una mujer me despertaron de golpe. Bella aún continuaba dormida abrazándome como si fuera su almohada. Me sentí asfixiado. Los gritos de la mujer me rebentava la cabeza. Revisé mi celular, eran las 8 am. Dormimos solo 3 horas. Parecía más tiempo.

Tenía 8 llamadas perdidas de Alabama. Y varios mensajes de texto de mi madre.

- Mira ya despertaron. Ahora si puede llamar a la policía -  El conserje la miró confundido. Me conocía sabía que no indigente. Solo que la mujer estaba tan alterada que no lo dejaba pronunciar una palabra. -

- Bella, despierta tenemos que irnos- le empuje y ella se despertó asustada.

-¿Que? ¿donde estoy? - Ella parecía sacada de un dibujo animado. Me reí.

-Si usted no llama a la policía entonces yo lo haré. Mis hijos viven aquí, no permitiré esta desfachatez. - Tomo su teléfono celular. Yo ya estaba de pie, Bella aún continuaba en el suelo cabeceando. Intervine para calmar la ira de la mujer.

- Buenos días, Disculpe el inconveniente. Soy Mylas Blake. Vivo en el apartamento 202B. Ellas es Bella, Mi compañera de Pisos. Accidentalmente rompió la llave de nuestro departamento y nos quedamos afuera. Decidimos llamar al cerrajero pero ha tardado tanto que nos quedamos dormidos sin querer - Era la mentira mas Horrible del mundo, ni siquiera tenía sentido pero por fortuna la señora lo creyó.

- Ay por Dios que vergüenza. Pido disculpas. Intérprete todo mal. ¿Necesitan ayuda? ¿quieren esperar en mi casa? Tu novia parece estar muy cansada. - Creo que había sido claro con decir que Bella era mi compañera de pisos. Me enoje.

- No hay problema, muchas gracias pero el cerrajero esta por llegar. Preferimos esperar frente a la puerta del departamento para no molestar a nadie más-  Di dos golpes suaves en el hombro de Bella y ella abrió los ojos sobresaltada. Mire hacia otro lado para no tener alucinaciones con Ayra. Si eso pasaba la vecina llamaría al loquero en vez de  a la policía.