Quería decirle muchísimas cosas a Alabama. Pero me trague las palabras una a una y la ignore por completo.
Era evidente que el amor podía ser una fuerza extremadamente poderosa. Correspondido era Magia en su máxima expresión. Pero no correspondido te hacía perder la razón al punto de poder detonar un par de bombas nucleares con tal de sacar del juego a tu enemigo.
Alabama estaba en la segunda descripción.
A ella la podía entender, estaba jugando sus ultimas cartas porque se rehúsaba a perder nuevamente. Yo sabía lo competitiva que ella podía llegar a ser y entendía que con
Ayra no dio batalla porque sabía que era un caso perdido. Ayra y yo teníamos demasiada historia, y un amor inmenso. Pero ahora con Bella la cosa era diferente... Ella estaba convencida que lo que me estaba pasando con Bella no era real, que yo estaba loco, intentando solo llenar mi vacío . Eso aunado a la situación de que como ahora ella y yo tenemos historia en su mente Bella es un agregado que puede sacar fácilmente. Me rei, que equivocada estaba.
En cuanto a mí madre la mire fijamente intentando entender porque estaba actuando en mi contra y no a favor. Ella sabía que irme a Beaufort significativa paralizar mi carrera universitaria otra vez, y ya estaba a punto de terminar el tercer año que para mí había sido eterno. Era cambiar de escuela nuevamente a Jade, e inclusive alejarla de ellos.
Estaba en negación y aunque quería dejar que la frustración y la rabia se apoderara de mí, sabía que no ganaría nada con eso. Tenía que aprender de mis errores, por no controlar mis demonios golpee a Charles y terminé en un gran rollo. No podía volver a pasar por lo mismo. Era momento de pensar y actuar inteligente.
Tomé el sobre que Raquel me estaba entregando y lo abrí sin romper mi silencio, lo máximo que me permití hacer fue apretar el puño de la impotencia. Era una orden de desalojo y fin de contrato de arrendamiento. Tenía hasta fin de mes para entregarle el departamento al señor Williams. Supongo que Charles también estaba metido en este asunto. Estaba acorralandome como si yo fuese una rata para atraparme.
-¿Mylas di algo, porque nos dejas hablando sola? - Que descaro tan gigante el de mi madre.
-¿Que quieres que te diga? Estoy intentando procesar porque razón estas colaborando activamente con todos ellos para arruinarme la vida- Ella se sintió afligida con mis palabras, en el fondo sabía que irme a Beaufort era una locura.
- Todo es por tu bien Mylas, solo queremos que Jade y tú estén bien y en Beaufort estaremos felices. Además Bella es una chica corrida Mylas, trabajaba en un bar es una prostituta por eso te tiene de esa forma - Alabama intervino nuevamente para hacer que mi estómago se revolviera por completo. Ella había pasado de ser mi apoyo principal, mi compañera, mi confidente, mi amiga, a convertirse en aliada de Charles y también en mi rival. Definitivamente como cambian las cosas,
- No quiero hablarte, de verdad trata de no dirigirme la palabra- Ella comenzó a llorar nuevamente y yo voltee los ojos con fastidio. Alabama nunca había sido asi. Odiaba haber sacado esta versión de ella.
- Hijo entra en razón, piensa en tu futuro, no te dejes llevar por lo divertido del momento. Investigamos a esa chica, aparte de lo del bar, ella ni siquiera es nacional, Alabama incluso esta convencida de que se acercó a ti para obtener la nacionalidad, ¿Por que te gusta sufrir amor? ¿No aprendiste la lección con Ayra? Tienes que aceptar que te habrías ahorrado todo este sufrimiento de haberte enamorado de la persona correcta en el momento indicado, de saber dejar ir lo que no era para ti. Ayra no era para ti y esa Bella mucho menos - Raquel sabía que me había desarmado con sus palabras. Ella siempre me había apoyado con Ayra, la quería yo sabía que lo hacía. Solo estaba diciéndome esto para manipularme pero no lo iba a lograr.
Tomé la carta y mis cosas, si ellas no se iban entonces iba a irme yo. Mi vida estaba patas arriba y no podía perder el tiempo tratando de hacer entrar en razón a dos personas que estaban convencidas de que yo estaba loco y mi nueva novia era una prostituta mafiosa.
- ¿Mylas a dónde vas? - Preguntó mi madre.
- A clases, cuando regrese no quiero verlas a ninguna de las dos aquí. Tampoco quiero que se acerquen a Jade. Les dejaré claro a ambas que no voy a irme a Beaufort, no voy a perder a mi hija, tampoco voy a dejar a Bella, quien por cierto no es un capricho, ni tampoco una prostituta, es mi novia. Disfruten su día, si quieren pueden beber café y seguir planeado como separarnos- Salí del departamento con un dolor de cabeza descomunal. Y con una lista enorme de problemas que parecían no tener solución.
Tenía que empezar por el príncipio, buscar un departamento nuevo, un trabajo nuevo y también un abogado. Para dos de esas tres cosas necesitaba dinero y no lo tenía. Ni siquiera tenía amigos a quien recurrir me había alejado de todos, solo había permitido a Alabama quedarse y ella evidentemente ya no estaba de mi lado. Tampoco contaba con el apoyo de mi madre. Sólo me quedaba mi papá y talvez Cassie y Connor. Puede ser que ellos me ayudarán, a pesar de que hacía casi un año que no los había visto.
Y luego estaba Bella... Tenía que hablar urgentemente con ella. Contarle la verdad con respecto a Ayra y esa parte también me aterrorizaba.
Suspiré hondo, decidí no ir a clases y buscar apartamentos . Visite al menos 7 lugares, pero todos eran extremadamente caros porque estaban bien ubicados. Llamé a unas cuantas de inmobiliarias y logré conseguir 2 a un precio que si podía pagar, pero estaban en Allston, a 42 minutos en auto. Sabía que iba a ser complicado vivir alla pero ahora mismo no tenía muchas opciones. Eran la 12 del mediodía Jade salía a las 4. No era como si tuviera mucho tiempo para resolver muchas cosas hoy, pero si lograba conseguí al menos el departamento tendría un problema menos.