Tan solo yo: tal vez no sea el momento

Capitulo 3. un día más

-- Me voy, voy a comprar algo de tomar antes de entrar a clases, adiós- le digo a todos mientras me paro, he estado con este grupo desde la semana pasada, son divertidos y me sacan de mi zona solitaria. Y sí, por supuesto que acá también están Valentina y su novio, ella es agradable, hemos hablado poco, pero hoy venía lanzando dagas por los ojos. Me paro, reviso que no se me quedé nada dónde estaba sentada y me voy dirigiendo a las escaleras para bajar a la cafetería, como cosa rara están bloqueadas, así que me toca dar toda la vuelta he ir a las otras escaleras, me dispongo a ir cuando alguien se me para en frente.

-- Hola- me saluda esa persona haciendo un gesto de saludo con la mano. 

-- ¿Hola?- saludo algo confundida por el hecho de que no hablamos mucho personalmente. 

-- Soy Alessandro, un gusto- me ofrece su mano a modo de saludo como si de verdad se estuviese presentando y me saca una sonrisa.

-- Un gusto, Emilia- respondo estirando la mano para estrecharla con la de él, siguiéndole el juego. Nos reímos al unisono por la tontería que acabamos de hacer y siento que hace mucho no me reía con tanta felicidad. 

-- ¿A dónde va? Emilia- me pregunta con una media sonrisa pero con lo poco en lo que hemos convivido, puedo ver qué también está algo... ¿Triste o pensativo? No sé bien.

-- Me dirijia a comprar algo de tomar a la cafetería, pero esta escalera está bloqueada

-- ¡Oh!, Ya veo, ¿Puedo acompañarle? No he tomado onces hoy y tengo ganas de una ensalada- solo asiento con la cabeza mientras camino.

 

-- ¡No puedo creer que usted nunca haya besado a nadie!- le digo a Alessandro quien está mirándome mientras come. Cuando terminamos de comprar le dije que si quería regresar con los demás ya que quedaban unos 15 minutos de descanso pero me dijo que en realidad no quería estar allá y nos quedamos sentados a un lado de la cafetería entre unas plantas mientras hablábamos.

-- Pues creame ¿Por qué la sorprende tanto?- me pregunta enarcando una ceja.

-- Pues usted es como el chico deseado por las mujeres que buscan novio- se ríe, mientras yo solo me pongo como un tomate por lo que acabo de decir, no pensé y solo lo dije y ¡Oh, por Dios!  Me siento muy apenada.

-- Gracias, supongo que es un cumplido, aunque no se a quienes se refiere- volteo los ojos -¿Por qué voltea la mirada? Acaso no me cree, es en serio, yo no creo ser "el chico deseado del momento" como dice usted- hace las comillas con las manos y solo siento que quiere que le eleve el ego.

-- Claro que sabe, desde el año pasado las chicas con las que he convivido, me han comentado que usted es un gran partido- prosigo - Que nunca ha tenido novia, que sabe querer, que es un gran hombre- lo último lo digo en tono exagerado, aunque todo lo que acabo de decir es verdad. Desde el año pasado María quien es según entiendo, amiga de él desde pequeña, me ha dicho que Alessandro sería su novio ideal, si no fuese porque los criaron como hermanos. 

-- Mmm, bueno saberlo- sonríe y eso me confirma que él ya lo sabía - pero de nada me sirve si la chica que me gusta al parecer no cree nada de eso - termina la frase y me quedo pensativa.

-- Habla de su novia ¿Cierto?- pregunto mientras intento descifrar su expresión

-- - lo dice mientras exhala 

-- ¿Luego? ¿Por qué lo dice? - me mira y siento que metí la pata donde no debía - no me cuente, si no quiere - digo apresurandome para que no me vaya a tachar de entrometida -entiendo si no quiere hablar de eso - prosigo y no se porque mejor no me quedé callada.

-- Tranquila, pues en realidad es complicado, nunca había tenido novia hasta que estuve con Valentina, la quiero mucho, pero ella creo que no me quiere igual - sigue y no creo lo que me está diciendo ¡Todas quieren estar con él! - Más que nada es por su amiga, Karol, ella siempre le dice que en realidad ella no siente nada por mi y pues no lo sé, muchas veces creo que es cierto - lo miro y estoy sorprendida.

-- Pues yo digo que no puede ser tan asi, supongo que ella lo quiere o no estaría ahí. También creo que por eso es que nunca ha dado un beso - como no querer un novio así, es como sacado de un libro, está esperando a una mujer que él en serio quiera - Hoy los vi cuando llegaron con ella y luego se alejaron, es porque pelearon ¿Verdad? - asiente y prosigo - pues no sé porque fue la discusión, pero creo que debería decirle sus dudas, nunca he tenido una relación, pero creo que es importante hablar las cosas, así funciona todo ¿No?.

-- Supongo que si, gracias - dice mientras me extiende la mano para que me pare y otra vez como cuando nos dimos la mano a modo de presentación siento nervios, me da una sonrisa a la que le correspondo y suena el timbre que indica el volver a clases.

-- ¿Que clase le toca?

-- Álgebra 

-- ¿Salón?

-- 301 

-- Vamos, yo tengo en el 303, podemos ir juntos- asiento mientras caminamos.

 

 

Estoy preparadome para dormir y suena mi celular.

-- Hola ¿Cómo está? 

Es Alessandro, hemos hablado más constantemente desde el día que fuimos a la cafetería, ya va una semana de eso y me ha contado muchas veces como se siente con su novia y la verdad me parece feo muchas veces. 

Le contesto con un - Hola. Bien ¿y usted? - y sigo en lo mio, a pesar de hablar un poco más, no hemos vuelto a tener una conversación personalmente y no nos tuteamos de hecho es raro, pero me parece bien. 

 

 

-- Bueno, yo creo que a Evan le gustas - dice Salomé mientras comemos, hoy no quiero estar con el grupo con el que últimamente convivo, quiero estar sola y se negó, en estás tres semanas con ellos solo he podido estar sola en descanso una vez y me tocó casi que volarme, por lo que ella hoy me dijo que estuviésemos solo las dos y prefiero eso, hoy no estoy de humor para estar con todos. 



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En el texto hay: adolescentes, romance adolescente

Editado: 11.01.2021

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