Capítulo VII

"How can you take without giving back?"

Todos los sucesos ocurridos en la fiesta se repitieron en mi cabeza, acompañando la resaca que estaba sintiendo en ese momento. Vi la hora, eran las seis de la mañana cuando me desperté por un vaso con agua. Toda mi habitación pareció moverse, pero solo eran las consecuencias por beber tanto alcohol por una tonta apuesta que, al final, terminó en empate.

Dos vasos de agua y un antiinflamatorio para evitar una resaca peor, y me fui a la cama de nuevo. Creo que me volví a quedar dormida, o quizás dormité, no estoy segura, pero cuando abrí los ojos de nuevo vi el momento exacto en el que Derrick, desde la puerta de mi habitación, me lanzaba una almohada a la cara.

—Vamos a desayunar, escandalosa.

No me sentía mejor, creo que de verdad abusé demasiado del alcohol, como si mi cuerpo no fuese débil ante tanto daño. No vuelvo a beber de esa manera.

—Tal parece que dormiste bien —dijo mi mamá a modo de saludo—. Podía escuchar tus ronquidos hasta mi habitación.

—Por eso Derrick me dijo "escandalosa".

—¿Café?

—Leche con café.

Mi madre me acercó las cosas para que yo me preparase mi desayuno mientras que ella terminaba de tostar el pan. Mi cabeza estaba en Flora, si bien su mensaje logró tranquilizarnos anoche, sentía que algo no andaba bien, de algo no me estaba enterando.

—¿Cómo te fue anoche? —preguntó Derrick sentándose a mi lado.

—Bien, pero terminé agotada.

—Y demasiado ebria —molestó mi mamá—. ¿No necesitas algo para la resaca?

—No, estoy bien.

—¿Fuiste con tu novio?

Ante la pregunta de mi mamá, sentí que se me bajaba la presión. No les había comentado nada acerca de lo sucedido con Flinn, y ahora, me preguntan por él.

—No, él estuvo de viaje —mentí—. Solo estuve con mis amigos, ya sabes, los de siempre.

—¿Y Zareen no fue?

—Tampoco, ella me dijo que iría, pero a último minuto canceló porque le adelantaron una evaluación o un proyecto, ya no lo recuerdo.

Ya estábamos a mediados de octubre, las clases habían avanzado y nuestra única preocupación era no perder los créditos, así que entendía a la perfección la decisión de Zareen.

—¿Y qué pasó de interesante?

Cuando Derrick hizo esa pregunta, el cercano rostro de Andy apareció en mi mente, y las mariposas en el estómago hicieron que me encorvara un poco. Mi madre se había sentado a la mesa y nos acercó las tostadas, yo tomé una y me la llevé a la boca, sin haberle untado nada de queso ni mermelada.

—Bebí mucho alcohol —respondí con la boca llena.

—No hables cuando tengas comida en la boca, Pandora.

Pensé que esa mañana sería tranquila, sin embargo, luego de tomar una ducha y prepararme para poder descansar hasta que mi mamá y mi hermano volviesen del supermercado, me llegó un mensaje de Flinn. Por supuesto, tenía que aparecer para atormentarme la existencia.

Flinn – 11:37am

"Me enfermé y tengo descanso medicado por una semana"

"Cuando vuelva, hablaremos"

Ni siquiera me preocupé por mandarle una respuesta, simplemente lo ignoré.

★★★

Volví a ver a Angeline en la universidad, y fue bastante obvio que intentaba llamar mi atención. Lo primero que hizo fue gritar el nombre de Giselle y correr hasta ella para decirle, a los cuatro vientos, que "disfrutó demasiado del viaje con Flinn, aunque él terminó un poquito enfermo".

Son las siete de la mañana, demasiado temprano como para caer en provocaciones que, creeré, son alucinaciones mías. Estoy imaginando, no es posible que de verdad el mundo gire a mi alrededor. Qué estúpida puedo ser a veces.

Intenté mantenerme lejos de la eufórica Angeline, no fue difícil considerando que la universidad no es un espacio pequeño, el campus es bastante grande y, si la encontraba cerca, simplemente tomaba mis cosas y sugería que nos fuéramos a otra parte alejada del ruido.

Ninguna de mis amigas hizo alguna pregunta al respecto, es como si ellas también estuviesen evitando acercarse a Angeline.

Me parece increíble cómo una persona que solía ser tu amiga, ahora es una completa indeseable. No solo por lo que sucedió con Caitlyn, ahora hay que sumar lo que me hizo a mí, en conjunto con el patán mayor que "tengo" de novio.

En este momento, sentía que mi deber y mi atención debía estar centrada estrictamente en cumplir con mi rol de vicepresidenta de UH.

Pude sobrevivir hasta el miércoles aguantando a Angeline y su nueva amistad con Giselle. Mi ilusión para ese día era poder estar junto con Mandy realizando nuestra primera reunión de UH con nuestros roles asignados. También, tendríamos a los nuevos miembros oficiales con nosotros.

Al fin, había llegado el día en el que podría ver a Andy. No nos habíamos comunicado mucho desde esa noche de la fiesta, por lo que me dijo, debía preparar un portafolio para la evaluación de su pasantía, así que estuvo desconectado. Pero era miércoles, y él, y los chicos, siempre estaban presentes los miércoles. Eso me alegraba el corazón, y, por la sonrisa que traía Mandy, a pesar de querer ocultarla, sabía que a ella también le pasaba.

Hasta ahora, no he podido preguntarle qué es lo que ocurrió entre ella y Lee ese día de la fiesta cuando se encerraron en el baño. Sin embargo, ella podía preguntarme que cómo me enteré y desde dónde los vi, lo que significaría que debía admitir que estaba en la habitación de Andy. Lo mejor sería esperar hasta que el tema se diese con naturalidad.

—Hola.

Mandy y yo nos giramos para ver a aquella chica pequeña y algo robusta acomodándose las gafas. Tenía el cabello rubio atado en un bollo y sujetaba su mochila verde entre sus brazos.

—Hola —respondió Mandy—, ¿sucede algo?

—¿Ustedes van a la tutoría de gramática?