CAP 34 (Nada es lo que parece P2)

Al día siguiente......

Bajo con los niños, anoche fue un caos le dije a los niños que mina solo estaba sin humor y se sentía mal, la inocencia de los niños es tán increíble que Naim le hizo una carta y me hizo comprarle un ramo con treinta rosas blancas sí, así mismo como lo pidió lo  hice.

— Buenos días nana — digo al ver a mi nana en la cocina.

— Buenos días hijo ¿Cómo estás? Y mis pequeños angelitos ¿cómo están? — dice dándole besos en los cachetes a los niños. — Por cómo está peinada Sofi se que mina no está en casa ¿Cierto? — dice al ver a Sofi con el cabello en una trenza y un lazo. Ese peinado y el de una cola se lo hacía a mi hermana, cuando ella me ponía a jugar con ella, si soy de esos hermanos que se dejaba manipular por la princesita de la casa.

— Si nana, tengo que irme a la empresa, Leyla viene a ayudarte con los niños....

— Escuché mi nombre — dice entrando mi hermana como toda reina por su casa.

— ¡TÍA! — gritan los niños, van y la abrazan y le dan besos y ella le corresponde.

— No saben cuánto los quiero pequeños demonios — dice dándole besos.

— No les digas así — digo voy a saludarla.

— ¿Mina ya no está?

— No, salió temprano.

— Ahora entiendo el peinado de Sofi — dice riendo.

— De verdad tu también, el peinado está muy bien.

— No he dicho lo contrario, además son los únicos que sabes hacer, ha y el cabello suelto. — dice riendo. Nana igual ríe.

— Ya me voy, niños los amo — digo despidiendo.

— ¡ADIÓS PAPI! — dicen al unísono. Salgo del edificio y voy hacia el restaurante tengo que hablar con mina.

Voy hacia allá, llego y parqueo cuando entro veo a mina junto a un hombre en una mesa ¿Qué es lo que está haciendo ella con ese tipo?. Me acerco y veo como ella palidece al verme.

— Za..Zair ¿Qué haces aquí? — pregunta tratando de calmar sus nervios.

— Eso no importa ¿Quién es este? — pregunto ignorando la pregunta de mina.

— Este tiene nombre y soy.....

— ¡Un amigo!, Si... Un amigo de la infancia, que ya se Hiba ¿Cierto? — dice mina mirando con súplica al desconocido, al menos para mí.

— Está bien, me voy pero piensa lo que hablamos, — dice Cercandose a ella en un abrazo le dice algo al oído que la puso tensa ¿Qué habrá sido?.

— Adiós, — dice ella y el desconocido me mira mal, igual yo a él. Y se va. Dejando a mina pensativa.

— ¿Qué demonios hacia ese ...

— Zair no es momento ni lugar para tus peleas de celos, estoy trabajando, y tú debes de hacer lo mismo. — me interrumpe saliendo de su trance y cruza por mi lado.

MALDICIÓN, tengo que averiguar que le pasa a Mina, piensa dejarme o ¿Qué?.

(Alaia pov ❤️)

Estoy organizando algunos documentos y organizando el nuevo menú del restaurante, cuando escucho una puerta ser azotada. Me asustó un poco y voy hacia el pasillo donde veo a zair tocando la puerta de la oficina de Mina.

— ¡Abre la puerta Mina, ¿Con quien estabas hablando?! — se escucha a zair enojado.

— ¿Qué pasó? — digo preocupada.

— Eso intento saber desde ayer, que le pasa a Mina a mi mujer. — dice entre enojo y preocupación.

— Zair, porque mejor no vas a la empresa y te calmas un poco y yo me encargo de hablar con ella, cualquier dato importante te lo hago saber. — digo intentando calmar el ambiente.

— Gracias Alaia, eso aré, además voy tarde pero por favor cualquier cosa no olvides de decirme. — dice se despide y se retira. Toco la puerta y no es abierta, así que voy a mi oficina y busco las llaves de está puerta y la abro, entro y veo a mina con una copa de vino mirando por el ventanal de la oficina.

— No quiero hablar con nadie Alaia, solo pensar — dice y solo me pongo a su lado, viendo igualmente por el ventanal sin decir nada. — Alaia quiero estar sola. — dice volteando el rostro hacia a mí.

— Estás sola y no te he hablado hasta ahora, puedes seguir pensando. — le digo mirándola.

— Dios, de verdad necesito estar sola, y ....

No termina ya que su teléfono suena ella ve el número y lo toma.

— ¿Si?... Esta bien... en 15 min... Justo ahí... Bien...

Termina la llamada, toma su bolso y sale por la puerta a toda prisa ¿A dónde va?.

Llamo a zair y le cuento lo sucedido, solo que no tengo idea de a dónde habrá ido y con este embarazo no puedo hacer mucho que digamos.

Después de 15 min veo como entran Alan y Zair al restaurante, voy hacia ellos le doy un beso a Alan y abrazo a zair.

— Voy a seguir el rastro de su teléfono, para intentar localizarla, no se que le este pasando pero lleva unos días así de rara y no me comunica nada incluso ya ni es la mamá cariñosa que siempre había sido. — dice con voz de tristeza, es cierto mina a estado algo extraña, y ni conmigo habla. — Ya tengo su ubicacion está en el parque que queda a 15 min de aquí.

— Bien vamos yo voy con Alaia, te sigo detrás. — dice Alan. Así lo hicimos cuando estábamos estacionando los vehículos, y bajando alcanzamos a ver a Mina sentada con alguien, y no, no, no puede ser.

— ¿Esa es Mina? — escucho decir a Alan.

— S..si... Alan es ella ¡MALDICIÓN LO SABÍA! — escucho gritar a Zair. Que está viendo como mina está besando a... — No... No... No puede ser ¿QUIÉN ES ESE HOMBRE?

— Zair hermano cálmate — dice Alan agarrando a zair de los brazos está muy enojado y triste a la vez.

— No Alan no puedo, tú estás viendo lo mismo que yo se está BESANDO CON ESE MALDITO que me presento COMO SU AMIGO. — grita enojado zair, espera ¿Qué, amigo?.

— Zair ese... — pienso en aclarar pero no sé si empeorará las cosas.

— ¡ALAIA ANDÁ Y DIME QUIÉN ES ESE TIPO.! — dice enojado zair. Lo pienso por un instante pero luego veo que mina en realidad esta siendo obligada a besarlo y digo quien es.

— El no es un amigo zair,... el es... el padre de Sofi. — Termino diciendo, y a zair casi le da algo, veo decepción, dolor, confusión, en sus ojos, Alan de la impresión igual termina soltando a zair.