Emma
Bajamos del auto y entramos al centro comercial.
Entrelacé mi mano con la de Sebas.
-¿Qué hacemos?
-Vayamos a comprar helado
Subimos las gradas hasta llegar al tercer piso. Había un montón de restaurantes y tiendas de ropa.
-Buenos tardes, me dá dos helados de vainilla por favor
-Te gusta la vainilla
-Y mucho
-Aquí está joven
Me dió uno a mí y el otro se lo comió él.
Bajamos hasta el segundo piso y entramos a una tienda de libros.
-Algo en especial jóvenes
-¿Tiene el libro de Inferno?
-Si, está por acá-nos dirigimos a un pasillo lleno de libros.
-¿Tiene la saga de Harry Poter?
-Buena elección
-Oye te gustan los libros de ese escritor-señalé el libro
-Si y tú ya viste las películas de Harry Poter
-Aquí están joven
-¿Cuánto sería por todo?
-Si se llevan todos sería 700 y se llevan dos libros gratis
-Los que querramos
-Los que quieran
Busqué hasta que encontré La Chica del Tren y Sebas buscó La Quinta Ola.
Esperen La Quinta Ola ese libro es mi favorito.
Pagamos y salimos de allí.
Nos reunimos en la entrada del cine y Carlos nos compró las entradas.
Max se encargó de comprar las sodas y yo compré las palomitas.
Entramos y que comience la película.
(...)
-Hija ¿cómo fué que paraste aquí?
Se preguntarán ¿En dónde estoy? pues en la cárcel.
Flashback
Salimos del cine y subimos al tercer piso a almorzar algo, me moría del hambre.
-¿En dónde quieres comer?
-En Taco Bell
Pidió los mejores combos y nos dimos la grande comiendo.
Al terminar de almorzar entramos al supermercado.
-Quiero Nutella
Caminamos y agarramos las carretillas y las chicas nos subimos en ella.
Y Sebas gritó 《Ya》
-Oye más rápido, vienen tres seguridades atrás
-CHICOS CORRAN-ese grito era de Katy
Me bajé de la carretilla rápido y corrí por mi vida.
La carretilla siguió su recorrido y chocó con un estante de botes de café y bebidas.
-Oye vas a pagar eso-el seguridad gritó
Seguimos corriendo hasta que me tropecé.
-Te tengo-el seguridad me puso las esposas
-Hombre encerio, no me digas-rodé los ojos.
Nos metieron en las patrullas y nos llevaron a la cárcel.
Fin del Flashback
-Ya me puedo ir-mi padre me miraba con una cara de pocos amigos.
-Claro que si-abrieron la celda y me sacaron.
Al rato llegaron a traer a los demás.
Me entregaron mi bolsa de la tienda de libros y nos dirigimos a mi casa.
Al llegar bajé del auto y mis padres me obligaron a sentarme en el sillón de la sala.
-Tienes prohibido salir en esta semana
-Okey, ya los entendí
Me levanté y entré a mi dormitorio, me acosté y me quedé dormida por completo.