Te haré sufrir

Capítulo 20

 

 Nos mirabamos fijamente mientras sostenía mi taza de té, quizás no hacían faltas las palabras para darnos cuenta de la química que existía entre ambos, pero si me seguía mirando con esa mirada tan tierna, terminaría besándolo y complicaría aún más todo, así que tome la iniciativa de iniciar la conversación.

-Nos vamos a quedar callado. -solte sin más preámbulo.

-Es que tu mirada es un oasis en el cual me estoy perdiendo. -Lo escuché decir con una sonrisa en su rostro.

-Todo un poeta Eitham, pero hablemos antes de que llegue Sofía. -No quiero involucrar a más personas o que Sofía termine escuchando todo.

- ¿Le tienes miedo a Sofía? -Con cara de interrogación.

-No se trata de miedo, no quiero que ella se entere, es solo eso.

-Continuando nuestra charla ¿por que dijiste que soy la debilidad de Sofía? – Aquí vamos de nuevo, habia llegado el momento de enfrentar y aclarar todo.

-Bueno, lo dije porque es lo que veo siento que te sobreprotege y aunque me aclararon que no tienen ninguna relación de noviazgo, los entiendos tal vez lo une algo que yo desconozco. -Cuando lo dije no lo hice con mala intencion simplemente salio de mi boca, no medi mis palabras.

-Entonces resumiendo lo que dijiste ¿tienes celos?

-¿Celos? No, solo fue curiosidad, ya me aclaraste todo y cualquier chica seria afortunada de ser tu novia. -En verdad lo decía muy enserio, Eitham es un chico maravilloso, pero no merecia cargar con mis fantasmas.

-Umm, al menos puedes aceptar que despierto ciertos sentimientos en tí. -Ya no podia seguir callando,  insisti por esta conversacion porque sería directo o mejor dicho, directo a la yugular.

-No te voy a mentir, me siento muy cómoda contigo e incluso pienso en ti de repente, siendo lo más sincera posible acepto que siento cosas por ti. -Debía sacar todo para poder establecer mi barrera.

- ¡Lo sabía! -Lo digo muy emocionado no creí que Gema aceptaría que me ve con otros ojos, con los ojos del amor, que cursi soy, a veces.

-No vayas tan rápido, ni te emociones, hay un, pero…- En todo hay un pero… así es la vida.

- ¿Cuál es el, pero? -Será que Gema tiene un novio.

-Cuando vine a este país, vine con dos objetivos marcados, primero: Estudiar, hacerlo bien y terminar rápido, el segundo: vol… volver por venganza. Quizás estoy mal o tome el camino equivocado, pero es lo que mi mente y mi corazón me dictan por eso no puedo ni debo empezar una relación, además no seria justo arrastrarte en todo esto. -Jamás le haría daño a Eitham.

-No diré que te entiendo porque no es verdad, tampoco sé que viviste o pasaste que te llevo a tener que llevar esa carga contigo, una venganza es solo un peso con el cual vives pensando en que un día aplastaras al que te hizo daño, pero si ese día llega y ¿en vez de sentir paz, te sientes peor? -En ese instante hablaba la voz de la experiencia, yo también quise vengarme de mi exnovia sin embargo a mitad de camino entendí que no valía la pena.

-Quizás no sea lo correcto en cambio mi mente me pedía a gritos cumplir lo que me en medio de llantos me propuse realizar. -Siendo sincera hablar con Eitham me hacía bien, aunque no desistiera de mi venganza.

-Quiero que sepas que aquí estaré para ti, no volveré a mencionar nada de esta conversación. -No me alejaría de gema, ni muchos menos atosigarla hablándole de mis sentimientos o al menos por el momento.

-Gracias Eitham por entenderme. -No pude evitar abrazarlo, fue un abrazo de esos que te hacen sentir especial, que te calman cualquier angustia, definido en una palabra fue reconfortante. Sofía hizo su aparición.

-¿Interrumpo algo? -Dijo Sofía con cara de interrogación.

-No, ando triste, extraño mucho a mi familia, por eso el abrazo que viste. -Mentí descaradamente.

-Es normal Gema, pero aquí tienes una amiga mejor dicho a una hermana. Te abrazaría también, pero estoy sudada, después te abrazo.

-Eres un amor Sofia. Gracias. -La verdad es que Sofía no es una mala persona, creo que podemos llegar a ser buenas amigas.

-Adiós chicos, me daré una ducha. -La vi desaparecer en dirección a la habitación.

-Wao, estoy asombrando con tu capacidad de reacción, inventaste una excusa sin pestañar, tengo miedo. -Eitham puso cara de asombro mientras aplaudía mi actuación.

-No seas dramático, vamos a hacer la cena, así aprendo a cocinar. -Mis palabras lo hicieron reír a carcajadas.

-Vamos pequeña pupila.

- ¿pupila? Que ingenioso. -Aplausos para el chef de la casa.

Abrimos la nevera y observamos la despensa, queríamos algo rápido y sin complicaciones ya eran las 7 de la noche y no queríamos tardar tanto. Finalmente decidimos hacer una tortilla española acompañada de un batido de fresas con kiwi, la cena iba a estar deliciosa.

Eitham me ordeno pelar y picar la cebolla en dados medianos. Limpiar el pimiento verde y córtalo en dados. Yo solo ejecutaba sus ordenes muy juiciosa y con cuidado.

-Vas bien, tienes potencial. -Dice Eitham mirándome.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.