Como me imaginaba la idiota de mi mejor amiga no llega en toda la noche. A saber que esta haciendo con el amiguito de Lucas.
El sabado cerca de las dos llega Ana con comida y una gran sonrisa. Me levanto del sofá mirándola fijamente con los brazos cruzados y expresión de cabreo, como sabe lo que significa esta postura y mi cara intenta irse a su habitación. La conozco y sabía que iba a hacer eso, así que la agarro de la cintura y intento que no se vaya. Al final y después de un rato forcejeando, acabamos las dos en el suelo y le pido explicaciones sobre porque me dejó sola irme con Lucas mientras ella estaba ligando con su amigo.
-Es un tiarrón, ¿Porque iba a impedir que te dieras un homenaje?- Dice Ana con una expresión perversa.
-Porque sabes que no me interesa.
-¡Venga ya tía! Es muy simpático.- En ese momento me pregunto como sabe ella eso si no ha hablado con él. A menos que si lo haya hecho y no me lo ha dicho.
-¿Cómo sabes tu eso? ¿No habrás sido tan cabrona de montarme una encerrona verdad?- Cuando digo eso, le cambia la cara y le noto un tic que tiene en el ojo que solo le sale cuando se pone nerviosa.
-¡No me lo puedo creer! ¿Desde cuando haces eso? Se supone que somos amigas y me montas una encerrona con un tio al que apenas conozco.- Me va a salir humo de las orejas del cabreo que tengo.
-Tempanito entiendelo llevas mucho tiempo sin salir con nadie, rehuyes de todo lo que tiene que ver con la palabra amor. Cuando habló conmigo parecía muy interesado en ti y no me pareció mal que te fueras con el, tiene pinta de buen tio.
Cuando dice eso, me callo. ¿Lucas interesado en mi? No puede ser. Como no me gusta estar mal con Ana, la abrazo fuerte. Supongo que lo habrá hecho porque se preocupa por mi y como Rodri quiere que tenga una pareja y sea feliz.
Pasamos el fin de semana comiendo, limpiando, viendo series, etc. Hasta que llega el lunes.
Como siempre, madrugo y me dispongo a arreglarme para ir a trabajar. Mañana tendré que ir a por mi coche, porque esto de no poder moverme a mi antojo, no me gusta.
Después de desayunar, bajo y espero a Rodri para poder irnos juntos. Al cabo de 10 minutos, aparece con una pinta de dormido que me hace mucha gracia. Por lo que puedo ver, se acaba de levantar. Entro al coche y le pregunto:
-¿Te has quedado dormido?- Me empiezo a reir y Rodri al ver la guasa, se empieza a carcajear.
Hablamos lo justo ya que no está muy centrado. Llegamos justos a la oficina y nos despedimos en el ascensor. Llego a mi mesa y me parece extraño que no haya luz en el despacho de la Pitbull. Me pongo a trabajar y cuando me quiero dar cuenta ya es la hora de comer.
Llamo a Rodri y quedamos en nuestra mesa, voy al ascensor y me encuentro con Lucas y mi jefa. Entro y los saludo con un simple "Buenas tardes". La situación no puede ser mas incómoda, mi jefa al lado mía y Lucas detrás. Mi jefa como siempre se cree superior a mi y me lo hace saber:
-Señorita Ruiz, espero que sepa que tiene media hora para comer, ni un minuto más.- Dice con expresión de altivez.
Suspiro y me callo. Me callo porque sino le arranco los pelos. Siento una mirada en mi nuca y al girarme me encuentro a Lucas mirándome con su sonrisa de malote. Me sonrojo y le sonrío, pero al ver que desvía la vista a mi lado y le cambia la cara, miro a mi lado y me encuentro a mi jefa mirándome con cara de enfado que dejaría al demonio en segundo puesto.
Rapidamente miro hacia delante y para mi suerte llegamos a la planta baja. Salgo y me dirijo a la cafeteria. Me encuentro a Rodri en nuestra mesa y con mi desayuno, no lo puedo querer mas. Al ver que tengo cara de apuro, se preocupa y me pregunta:
-¿Que pasa tempanito? Que pareces que has visto un fantasma.- Le cuento todo lo relacionado con Lucas y lo del ascensor. Se queda pasmado y con la boca abierta. Al mirar la hora veo que faltan cinco minutos para que termine la media hora del almuerzo. Subo corriendo y llego a tiempo.
Trabajo hasta que veo salir a la Pitbull y a Lucas. Se despiden con un abrazo, mientras finjo estar trabajando. Lucas se va y mi jefa me llama para que entre a su despacho. Al entrar con la libreta y el bolígrafo en la mano, me encuentro a mi jefa en su silla. Me pide amablemente que me siente. Todo esto me esta dando miedo, mi jefa siendo amable conmigo. Me siento con temor, mientras mi jefa me mira con una sonrisa. Me dice las tareas que tengo que hacer y me suelta:
-¿Que tienes con mi hermano? Bueno me da igual. No quiero que te acerques a él. Como te vea cerca suya te prometo que te voy a hacer la vida imposible, ¿Entendido?. Conozco a las zorras como tú que solo quieren conseguir el dinero de mi familia. Quedas advertida y ahora sal de aqui y ponte a trabajar si no quieres que te eche.
Salgo y en vez de dirigirme a mi sitio, me voy al baño. Necesito relajarme antes de volver a trabajar. Al final llego a una conclusión:
"Tengo que alejarme de él"